Capítulo 10: La poción y un día de diversión

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–Nevra–

Miré a Elizabeth perplejo. Sabía lo que Ezarel estaba haciendo por órdenes de Miiko, pero ella me acababa de decir que se sentía donde debía estar... Observé como me sonreía y un nudo se me formó en mi interior. No podía hacerle eso y menos cuando sé que aquí se siente a gusto.

– No tienes que darme las gracias por ello – dije controlando mi voz – Aquí sabemos la existencia de seres que no vemos y conviven con nosotros.

– Lo sé, pero aun así...Gracias por el apoyo y ayudarme. – me dio un abrazo cálido, no pude resistir devolvérselo, respirando el aroma suave de su cabello. – Bueno vamos a seguir por donde lo dejamos, que me faltan cosas por comprar – muy a mi pesar se separó de mí y la seguí por el mercado.

Tenía que ir a hablar con Miiko, tenía que decirle que parara su absurdo plan B.

Cuando acabó de comprar lo que necesitaba me disculpé ante ella y caminé hacia la Sala del Cristal. Para mi suerte estaba Miiko reunida con los demás.

– Bien Nevra, ya iba a pedirle a Leiftan que te buscara – dijo Miiko al verme llegar.

– Miiko tengo que hablar contigo, no deberíamos de hacer esa poción, ella siente que este lugar es su hogar no hay razón para hacer eso.

– Ahora no nos queda otra opción – dijo ella cabizbaja.

– ¿Qué? ¿Por qué?

– Cuando fui a Balenvia para la misión estos me hablaron que por la zona Oeste del pueblo estaban rondando unos mercenarios humanos que jamás habían visto, ni ellos ni pueblos vecinos, eso quiere decir que son recién llegados – me respondió Valkyon con una voz firme.

– No sabemos quiénes son, ni por qué han venido, pero su llegada coincide cerca de la llegada de Elizabeth, o al menos eso calculamos nosotros, si es así no podemos permitir que vengan más humanos de su mundo, nuestro hogar estaría en peligro. –añadió Miiko.

– Pero son especulaciones – la miré furioso – No sabemos si vienen por ella...Aparte siempre han estado viniendo humanos a nuestro mundo y han hecho cosas horribles, ella no se merece eso...

– Lo sé, pero ella apareció aquí, en la Sala del Cristal, no podemos arriesgarnos a que otro humano también lo haga, no sabemos qué podría pasar.

– Miiko...Esta vez yo no estoy contigo, no voy a apoyar esto...Yo...yo... – caminé hacia la salida de la sala y pude escuchar como Leiftan y Ezarel apoyaban mi opinión pero que podrían entender la decisión tomada por Miiko.

Me quedé apoyado en la pared, suspiré de forma pesada y pasé mis manos por mis cabellos. Oía a mis compañeros hablar de fondo, era algo que solo yo podía escuchar por mis sentidos.

– Ella está esta última semana conmigo y luego irá a Obsidiana así que en estos días haré la poción con ella. – dijo Ezarel con un tono de voz apagado. Ya me había comentado su descontento ante eso.

– Perfecto, cuanto antes se haga antes nos olvidaremos de eso. – comentó la kitsune. ¿Desde cuándo Miiko se había vuelto tan fría?

– He de añadir – continuó enseguida Ezarel de forma rápida – Que es una alumna brillante y estoy en total desacuerdo con estos métodos, creo que lo mejor sería preguntarle y hacerlo bajo su consentimiento y no a sus espaldas, eso no está nada bien. Entiendo que lo haces para proteger Eel y el cristal, pero no estoy de acuerdo con las formas que has optado para realizar dicha acción.

Otro mundo [Libro 1][Eldarya][Nevra][COMPLETA]Where stories live. Discover now