Junghope || OMFR!

[04]

Hoseok estaba comiendo sus croquetas cuando a lo lejos escuchó unas risillas, miró a su derecha contemplando dos conejitos muy acaramelados. Soltó un maullido de molestia, dándole un golpe a su plato que fué a caer en el rostro de su último hermanito. El gato de manchas empezó a pavonearse muy coqueto hasta llegar donde aquellos dos y separar el beso que se tenían.

—Hola, par de pelusas horribles—habló el gato con un tono burlesco.La conejita tragó duro y miró en dirección de Jungkook, escondiéndose rápido tras este—escuché por allí a un pequeño pajarito—comentó con su tono socarrón y divertido—que por la parte trasera de la casa de los perros, se encuentra una enorme caja de Heno.

La conejita al escuchar aquello paró de un solos sus orejitas muy emocionada y sonrió acercándose al gato de manchas. Cayendo muy inocente en la trampa del astuto gato.

—¿En serio? ¿Qué tanto?

—¡Mucho, ni te imaginas, incluso para tres meses—comentó Hoseok levantando una de sus patas delanteras y mostrando sus afiladas garritas y las lamió.

—¡Oh, eso es interesante, Kookie, podía funcionar para nuestro gazapitos, para el nido!

—Ah...—Jungkook miró al gato de manchas que hinchó el pecho con orgullo, miró en dirección de la puerta transparente que dejaba a la vista el jardín y a los dos perros enormes y casi soltó un chillido—yo creo que con el que tenemos nos aguan-...

—¡Ay, eres una pelusita muy llorona!—comentó Hoseok y se acercó al oído ajeno—¿O le tienes miedo a los perros, conejo? —río ladino—no creo que quieras mostrar esa imagen de cobarde frente a tu amada conejita.

Jungkook tragó más duro y miró a su izquierda a la conejita blanca que le contempló con sus hermosos y enormes ojos celestes.

—P-puedo hacerlo—afirmó tomando valentía.

La conejita sonrió y se fué rápido a su nuevo nido que habían hecho ambos por el cuarto. Jungkook tragó duro, con su cuerpo tembloroso se acercó a la puertita y sobrepasó. Hoseok le siguió en silencio, notando los pies temblorosos del conejo, que con lentitud empezó a caminar en dirección de la casa de los perros. Los animales estaban tumbados sobre la grama, durmiendo con profundidad.

Hoseok se pavoneó muy tranquilo de la vida, con su collar verde de diamantes incrustados. Se sentó sobre sus patas traseras, dando un empujón al culo del conejo, incitandolo a seguir.

—¿E-en serio hay Heno allí?

—Por supuesto ¿Acaso te mentiría?—comentó el gato—tu dueña lo esconde allí para que no te lo robes, sabe que le tienes miedo a los perros.

Jungkook no sabía si confiar en aquel gato, venga. Era el hijo del propio Yoongi, sabía que Hoseok era como la copia de su propio Papi.

—Y-y si no hay nada...¿Qué te hago?—preguntó Jungkook tomando valor.

Montatelo, cof, cof.

—Pelusa horripilante—maulló el gato acercándose al conejo y empezó a frotarse, rodeando su cola alrededor del cuello ajeno, con cuidado y sacudiendola de forma coqueta. Jungkook se paró de un solo sobre sus patas, su cola se movió de un lado a otro y su patita golpeando a gran velocidad en el suelo ante el toque de aquel gato—soy cualquier cosa; pero no un mentiroso—comentó con su tono tan caracterizo cargado de diversión y coquetería.Hoseok notó el golpe del pie de Jungkook y frunció el ceño al percatarse que el sonido iba incrementando—espera ¿Por qué demonios mueve tu pie de esa forma?

—¡Es que manchitas, tú siempre me pones caliente!

La cola de Hoseok se encrespó al escuchar aquello.

—Así como a tí te trajeron una coneja, a mi me traeran un guapo gato de raza—comentó con una ceja derecha enarcada y puyó con su nariz la naricita del conejo—animal feo, pelusa horrible—aquella frase no estaban cargadas de un odio o asco, era calmadas.

Hoseok suspiró y desvió la mirada para acercarse a la puerta. Girándose sobre sus patas y pavoneándose como siempre lo hacía.

—Oye Manchitas—habló el conejito girándose a ver al menor—Si yo hubiese sido un gato...¿Te hubieras fijado en mí?

—¡Claro que no animala fea!—se sonrojó de un golpe Hoseok al escuchar aquello.

—Ese es un sí—sonrió Jungkook de forma dulce y suspiró.

—¡No eres ni por cerca bonito! ¡Escuchaste! ¡YO TE HARÍA CONEJO ASADO SI FUERA POSIBLE!—gritó cargado de nervios.

—Dioses, eres como mi padre de gritón—murmuró sorprendido.

—¡NO ESTOY GRITANDO PEDAZO DE PELUSA HORRIPILANTE!—se sonrojó un poco más.

Hoseok no pudo evitar sentir sus mejillas calientes, soltando un maullido. Los perros abrieron los ojos como dos platos y se levantaron con lentitud, notando una bolita café en medio de sus visiones y se lamieron el hocico.

Jungkook se paralizó al escuchar un gruñido tras él y también como la respiración caliente de uno de ellos. El conejito chilló sin poder mover uno de sus músculos, sus ojos se aguadaron mirando como cachorrito tembloroso a Hoseok. El gato maulló molesto y echó a correr en dirección del perro.

—¡ESA PELUSA HORRIBLE YO ME LA COMERÉ, PERRO DE MIERDAAAA!—gritó Hoseok dando una patada voladora.

Cuando haya cierto número de comentarios, subiré otro capitulo ^^ ¡Gracias a quienes leen, comentan y dan estrellita! ~

Cualquier error de ortografía, redacción, avisar por favor, esto se corregirá cuando el fanfic pase a edición]

¡Recuerden el lema de la familia!

∞ Somos Sol que calienta; pero no quema! 7w7r∞