Miranda ||BORRADOR||

Capítulo 25

-Debemos irnos. -Susurre y corrí a la habitación seguida de Thomas. -Guarda todo lo necesario, iré a ver que tengamos el camino despejado.
Sus ojos se abrieron como platos y negó rápidamente con la cabeza. 
-No, ¿Que tal si te pasa algo? No dejaré que vallas sola. -Dijo antes de cerrar la puerta detrás de mi. Bufe.
Sabía que estaba preocupado pero mi trabajo era mantenerlo a salvo. -Además si algo te pasa yo no podré sólo con esos lobos. -Bufe nuevamente sabiendo que tenía razón. Había cedido a su chantaje.
Él  sonrió triunfante y una vez que guardamos lo más importante en una mochila negra salimos de la cabaña, me transforme en mi lobo y me agache para que Thomas se subiera a mi lomo. Él  dudo un segundo, sólo me había visto una vez transformada y sabía que tenía miedo pero ahora no era momento para mostrarle que yo no era un peligro.
Se subió a mi lomo y se abrazó a mi cuerpo anttes de que empezará a correr.
Iríamos a un pueblo que había al otro lado del bosque. De ahí, después de comprar algo de comida, seguiriamos nuestro camino por el extenso bosque hasta llegar a un sector rogue.
Pero claro, las cosas nunca salían como yo las planeaba.
Mis planes se vieron frustados cuando un gran cuerpo golpeó al mío tirandome al suelo y como consecuencia Thomas salió disparado unos pocos metros de mi. Lo escuché quejarse haciendome reaccionar, me levanté rápidamente del suelo poniendo me en posición de ataque.
Frente a mi se encontraba un gran lobo marrón con ojos negros gruñendome, el dio el primer golpe al saltar encima de mi, logré cerreme pero no fui lo suficientemente rápida ya que mordió mi pata haciendome gemir por el dolor.
Rápidamente giré mi cuerpo con mis fauses abiertas lista para arrancale la cabeza, sin embargo sólo logre morder una parte de su rostro. El lobo gimoteo y a los poco segundo senti un peso sobre de mi, en un rápido movimiento tome al lobo de encima de mi por el cuello y lo lancé contra un árbol.
-¡Alto! -Escuché una voz gritar pero no le hice caso y me lancé sobre el lobo marrón inmovilizandolo bajo de mi, esta vez no fallaria. -Al parecer no te importa mucho el pelinegro.
Voltee rápidamente a donde escuché la voz, me había concentrado tanto en la pelea que ni siquiera me había dado cuenta de la presencia de Ashton y mucho peor no había escuchado a Thomas quejarse mientras intentaba liberarse del agarra del alfa, algo que obviamente sería imposible.
Baje mi Guardia sin saber que hacer por lo que no me di cuenta cuando el lobo al que lo había lanzado contra el árbol se levanto y empujó mi cuerpo con tal fuerza que este impacto contra un árbol dejándome inconciente.
***
Mis ojos se abrieron lentamente, me sentía nerviosa ya que el hhechizo de Sasha me impedía oler a Thomas así que no sabía donde estaba.
Intenté levantarme pero mi cuerpo estaba muy adolorido, mi pie izquierdo dolia horrores, antes la adrenalina me había impedido sentirlo pero ahora... Dios soy capaz de arrancarlo de mi.
-Veo que despertaste. -Reconocí la voz de Ashton sin embargo ya no olía a menta ahora olía a un lobo cualquiera.
-¿Donde está Thomas? -Pregunté haciendo esfuerzo por sentarme sobre el suelo.
Mis manos estaban atadas atrás de mi espalda, así que eso era otro obstáculo para levantarme del suelo.
-A lado tuyo, pero el todavía no despierta -Sonrió con burla. -Tal vez haya que darle una ayudadita.
Las luces se encendieron dejando ver la celda en donde me encontraba, miré a mi costado encontrando a Thomas en la otra celda con los ojos cerrados y con su respiración débil. Sus manos y pies estaban atados y su cuerpo estaba en posición fetal sobre el suelo.
Gruñi cuando Ashton entro en su celda con un balde de agua. Se lo tiró encima, Thomas enseguida abrió los ojos asustado inspeccionó inspeccionó su alrededor y paro cuando sus ojos se conectaron con los míos.
Lo mire con tristeza y culpa, no fui lo suficiente para protegerlo. El me sonrió entendiendo mi mirada, me sonrió como diciendo me que todo estaría bien.