Capítulo 83: Colapso

2.4K 216 6
                                    


KATE

El que Ben haya llegado tan rápido luego de llamarlo, a pesar de haber estado a muchos kilómetros de distancia me llena el corazón casi por completo, si mi papá no estuviera todavía peleando por su vida podría decir que la felicidad está por fin apareciendo en mi vida. Parece que hubiese pasado un siglo desde la última vez que lo vi —realmente— pero nada de eso parece importar una vez que estamos juntos aunque no me he atrevido a besarlo y creo que lo entiende porque no me ha presionado. Lo que sí, no puedo dejar de abrazarlo, es mi recordatorio de que estamos en el mundo real.

Llevo más de veinticuatro horas en esta maldita sala de espera y aunque mamá me ha dicho que vaya a casa a descansar por un par de horas, no me atrevo a hacerlo. Quiero estar lo más cerca posible de papá aunque no pueda verlo, necesito no alejarme de él. Mamá tampoco se ha ido, pero ha obligado a Zack a llevarse a Leah a casa un rato, es demasiado pequeña para esto.

Sophie por su parte está sentada en la banca más alejada de nosotros sin dirigirnos la mirada y sé muy bien por qué, me lo ha dejado muy claro. Ella cree que lo que le pasó a papá fue culpa mía, que mis estupideces lo han alterado más de la cuenta y aunque me duela no puedo dejar de pensar en que tiene razón, lo que no hace que sea más fácil.

—No le hagas caso —susurra Ben en mi oído haciéndome estremecer, para mi desgracia, escuchó toda la discusión—. Le salvaste la vida a tu padre, ella solo está asustada y habla sin pensar.

—No creo que lo diga sin pensar, hace meses que guarda mucho rencor contra mí y no sé qué fue lo que le hice. Esta no ha sido la única pelea en estas últimas horas.

—Es una adolescente, no dejes que te afecte. En un tiempo pasará esta etapa y volverá a ser la de antes.

—Es mi hermana, ¿cómo puede no afectarme?

—Situaciones así de complicadas pueden llevar a las personas a decir cosas que no quieren, ya se le pasará.

—Espero que sea pronto, si... —me corrijo antes de siquiera pensarlo— cuando papá vuelva a casa no podemos vivir en un ambiente tan tenso, le hará mal.

—Cuando las cosas se calmen deberían hablar de verdad.

—Lo sé.

Me apoyo en su hombro, exhausta hasta que el médico aparece y nos da la buena noticia. Papá ya no está con riesgo vital y ya podemos entrar a verlo.

—El señor Walker quiere ver primero a su hija, Katherine. Solo pueden entrar de uno.

—¿Por qué a ella? —salta Sophie de su asiento furiosa—. ¿Se olvida que tiene más hijos?

—Sophie, por favor, no hagas esto más difícil —pide mamá y se acerca a ella para abrazarla pero mi hermana la esquiva—. Luego de tu hermana entras tú.

No escucho nada más de la conversación porque lo único que me importa en estos momentos es comprobar con mis propios ojos que papá está bien. Lágrimas de alivio recorren mis mejillas cuando veo que está bastante mejor de lo que esperaba, lo único que delata su condición es el oxígeno que está pasando por una naricera y la sonda nasogástrica. Supongo que es la misma imagen que ellos tuvieron de mí cuando ocurrió el incidente.

—Mi Katie —suena agotado y no es para menos.

—No deberías hablar.

—¿Por qué no? Estoy fresco como una lechuga.

—Casi nos matas de un susto.

—Bueno, si somos sinceros el que estuvo a punto de morir fui yo.

Enséñame a amar (SS#1) (VR#3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora