Gaara y Matsuri Escolar

9- Consejo y desconocido

Estaba amaneciendo y aun podia sentir el dolor en mi mano que aún seguía vendada, me levanté de mi cama y me cambié cuidadosamente para no lastimarme más de lo que debía y salí de la casa junto a mi mochila para tomar el tren como de costumbre. Al bajarme del tren empecé a caminar para llegar al colegio y a lo lejos pude ver a Sakura que se encontraba hablando con Sasuke mientras Hinata estaba junto a Naruto y Tenten se acercó a mí rápidamente al verme.

- Hola Matsuri- me saludó Tenten tranquila mientras Neji la llamaba a lo lejos.

Yo agache la cabeza en forma de saludo y note que todos los alumnos estaban fuera de sus clases, volteé a ver a todos lados en busca de alguien que por cierta razón no se encontraba en la clase aún, así que subí para sentarme en mi lugar de siempre pero un compañero se encontraba ahí, volteé a ver los lugares y me di cuenta que habían cambiado a los alumnos de asientos. Salí de la clase para darme cuenta que mi nombre se encontraba en el listado justo en medio de la clase. No sabría quién sería mi compañero y miré que el nombre de Gaara se encontraba justo al frente del mío, el estaría enfrente. Me sorprendí cuando vi eso y justo al lado mío se encontraba Sari, eso me animó mucho ya qué no estaría sola en clase.

- Hey Matsuri!!!- me llamaba Sakura - Nos han cambiado de aulas, ya que se han causado muchos problemas, que tal se encuentra tu mano!?

- Bueno... Mejor, ya no duele mucho!- le dije con una sonrisa

- Era necesario un cambio no crees!?- me decía ella viendo el listado mientras yo asentía - Yo fui quien solicitó que el presidente se sentara frente a ti en la reunión pasada.

Yo la miré sorpendida por lo que acababa de decir, me sentía feliz por lo que hizo aun que él no estuviera habían otras personas que se preocupan por mí.

- Gracias - le dije mirandola directamente

- No tienes que agradecer, las chicas y yo ya lo habíamos planeado... Al menos una de nosotras tendrá una linda relación antes que acabe el año. Además considero que no hay mejor persona que te cuide como Gaara.

- Sakura-san... ocurre algo!?- le dije preocupada al ver que ella bajó su mirada al suelo.

- Todo está bien!- me respondió ella con una sonrisa

El timbre había sonado haciendo que ella se fuera lo cual hizo despedirse con la mano en alto mientras yo le sonreía al verla irse, no me había convencido del todo.

Caminé para buscar mi nuevo lugar y sentarme donde me correspondía junto a Sari que se encontraba ahí, pasaron las clases y el lugar frente a mi se encontraba vacío, por alguna razón Gaara no se había aparecido en toda la mañana hasta después del almuerzo lo cuál sentí extraño. En la hora de refacción lo vi caminar frente a la cafetería no parecía ser él, estaba pálido y distraído lo cuál me preocupaba. Me levanté de mi lugar y caminé hacía la salida, recorrí todos los pasillos con mi mano hasta que escuché un fuerte ruido en la salón de prácticas de lucha... Me acerqué curiosa de quién se encontraba ahí y la sorpresa fue que ahí estaba él frente a mí golpeando un saco con unos guantes. Lo miré confusa y curiosa parecía estar molesto y estresado por alguna razón, ver lo tan solo en una camisa sin mangas junto al pantalón del colegio lo hacia ver bien, sabia que no estaba bien espiarlo pero no podía evitar verlo, deseaba hablar con él y disculparme por todas las molestias que le había causado pero no podía hacer aquello.

Un dolor dentro mí invadió mi ser volteé a verlo de nuevo parecía que luchaba contra algo que le acusaba dolor, sabia lo de su accidente pero esperaba que le me contara ello... tener esa marca dentro de él y vivir con aquel recuerdo. Tenía ganas de llorar en ese momento pero no podía permitir que él me escuchara. Cerré con cuidado la puerta del salón de prácticas y me fui del lugar, en clase las horas se pasaban lentas hasta que finalmente terminaron, mientras todos guardaban sus cosas me detuve un momento para dirigirme a la biblioteca a estudiar un poco. Gaara no se había presentado a clases pero sí estaba en el colegio, debía estar pasando por algo difícil pero como saber sí él estaba bien o no. No se comunicaba con nosotros y siempre estaba ocupado con las juntas, al ver que ya era tarde guardé mis cosas para salir del colegio caminé para tomar el tren tranquila, me había quedado algo tarde entre los libros de la biblioteca para estudiar un poco y subir un poco mis calificaciones. En el camino todo parecía estar oscuro y solo podía sentir como alguien me perseguía por detrás, me estaba asustando ante aquella mala presencia entonces empecé a caminar rápido para evitar que me sucediera algo malo. Mi corazón se aceleraba rápido debía llegar lo más rápido a la estación del tren, corrí para llegar pronto pero aún así me perseguía. Al llegar la estación estaba vacía así que busque la banca mas lejana para estar alejada del señor pero él seguía ahí.