capitulo 6

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Dos días, habían pasado dos largos días y Harry no había emitido sonido alguno en aquella casa, era una casa según Louis ya que tuvo sus tiempos libres para observar a sus alrededores, era una casa simple: contaba con todo aquello que un omega desearía, menos el...para el era simple, una simple casa.

Hoy se encontraba en la piscina totalmente recostado boca abajo tomando un poco de sol, los rayos de sol le daban justo en la espalda bronceando la delicada piel de su espalda con destellos dorados, unos lentes oscuros cubrían sus orbes mientras sus párpados se encontraban cerrados, sus labios estaban hidratados por su propia saliva de un color rosa, los lazos castaños que colgaban de su cuero cabelludo estaban desordenados y brillantes, este omega realmente irradiaba alegría y hermosura.

¿Y Harry? Bueno, Harry estaba observando al castaño desde el balcón, un cigarro estaba atrapado entre sus labios mientras este se consumía poco a poco en cada suspiro y inhalación, la garganta seca ¿hace cuánto que no hablaba? Había perdido totalmente la cabeza en cuánto vio la espalda del castaño, su vista se perdió totalmente en la curva de su espalda baja, ese bóxer tan ajustado no ayudaba para nada.

Louis sentía una mirada a lo lejos pero ya estaba demasiado acostumbrado a la atención de desconocidos. Sin embargo sentía comodidad ante esa mirada, tenía un pequeño destello de esperanza, quizás era Harry.

Poco a poco abrió los párpados a través de sus lentes oscuros y pudo observar a lo lejos como Harry lo miraba, pudo ver esa mirada, pudo sentir esa mirada, emitió un ronroneo inconsciente ante aquella mirada. ¿Porque no jugar un poco?

Casi de inmediato se puso de pie ante la atenta mirada de su ahora esposo, comenzó a caminar con lentitud provocando un vaivén de lado a lado en sus caderas, ese bóxer se ceñia demasiado a sus caderas el sabía que lo que más llamaba la atención de su silueta, definitivamente era su trasero, no era un omega dedicado a la práctica del ejercicio sin embargo aquel dote era definitivamente un rasgo demasiado llamativo especialmente en él. Al llegar al borde de la piscina soltó un suspiro fingido y ahí Harry supo que Louis estaba tratando de provocarlo, lo sabía, maldito omega. Por un momento no reconoció a aquel omega dulce que conoció años atrás.

Louis comenzó a sonreír de lado quitando sus lentes oscuros y tirando estos a un lado de su cuerpo para finalmente estirar sus brazos hacia arriba haciendo que su única prenda baje un poco hasta descubrir su pelvis.

Louis quería el nudo de Harry era algo que realmente deseaba, sin embargo no quería eso por obligación, no quería que Harry lo tomé solo por una obligación y orden de sus padres, iba a provocarlo y el sabía que eso tendría dos resultados.

Uno, Harry caería por el nuevamente y lo tomaría en un impulso de pasión, según noticias escandalosas Harry tenía amantes por doquier, ellas se enamoraban y luego declaraban en la prensa que Harry era demasiado brusco y tenía tendencia a morder partes de su cuello y muslos ¿no es excitante? Pues claro que lo era.

Louis tenía un secreto, aquellas noticias sobre el, mencionando que era un niño mimado que se comportaba como una completa prostituta en las discotecas de mala fama buscando un buen polvo, no era como lo pintaban. Sin embargo él era demasiado iluso y siempre caía en la típica promesa de enamorarse con aquellos polvos, siempre un alfa, siempre eran altos y demandaban su cuerpo. Sin embargo en todas aquellas ocasiones que tuvo sexo, nunca permitió que un alfa formará un nudo en su interior. Quizás por miedo, quizás por precaución. No lo sabía pero lo odiaba.

¿dolera? Esa era la pregunta constante que se hacía a diario.

Volviendo al tema, la segunda opción era que Harry se cansaria de sus juegos y lo tomaría bruscamente, por las palabras de Harry, seguro este ya habría leído aquellas escandalosas entrevistas de sus folladas de una noche, los novedosos escándalos en artículos únicamente dedicados a él. Definitivamente era malo.

Estereotipo (L.S) Larry Stylinson Where stories live. Discover now