Sonríe, Tn... 💌 Souta Nimura Washū

💌 Quintoagésimatercera Sonrisa

– Tn...

– Nimura.

El silencio se hizo presente en el lugar, algo que Nimura sintió mal, pues sentía que "su chica" ya no quería hablarle.

– ¿...Viniste a verme? –preguntó, con una leve sonrisa.

Ella tomó aire y soltó un suspiro.

– Odio admitirlo, pero sí.

– Me siento tan bien de que vengas por mí...Pero... ¿Por qué? –preguntó, borrando su sonrisa.

– ¿Por qué vine? Bueno, eres mi medio-hermano después de todo...y mi esposo, más allá de lo incestoso y extraño que eso suena. Quería despedirme bien.

– ... –bajó la mirada.– ¿Por qué te fuiste con Kaneki?

– Quería detenerte.

– ¿Por qué? Todo esto lo hice por ti...Cuando estaba en el Jardín decidí que acabaría con todo, pero...luego decidí hacerlo por ti –la miró.

– ¿Por mí? –rió.– Sí, me lo dijiste, pero...aun así quise arruinar tu plan.

– ¿Por qué?

– ¿Es todo lo que preguntarás?

– Quiero saber...el porque terminas prefiriendo a Kaneki en lugar de mí...siempre elegiste a otros antes que a mí.

– ¿Es enserio? –preguntó con sarcasmo.– Tú siempre elegiste a Rize antes que a mí, así que no te extrañes si yo elijo a alguien antes que a ti.

– ... –bajó la mirada.– Entiendo...Lo siento...

– ...

– Tn...Te amo, lo sabes... –la miró.– Debí haberte hecho caso. Si nos hubiésemos ido a Alemania juntos, ahora estaríamos felices.

– Hm. Claro... –suspiró.– Si lo que quieres saber es el por qué arruiné tu plan, te lo diré –él frunció el ceño, confuso.– Solo quería arruinar tu plan como venganza por dejarme en el Jardín.

– ...Entiendo.

– Quería destruirte, Nimura. Quería arruinar tus planes, quería golpearte, quería que murieras...por venganza...

– Lo entiendo –sonrió.– Mátame.

– ¿Qué?

– Mátame. No quiero morir solo, quiero que me mates...si muero en tus manos seré feliz.

– Estás muerto ya, Nimura, solo tienes que esperar a que dejes de respirar...pero ya no estás con vida.

– ... ¿Puedes abrazarme entonces? –pidió, levantando una mano hacia ella.

– ¿Abrazarte?

– Sí...Moriré, y quiero hacerlo en tus brazos...quiero sentirte una última vez...

– ...

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Kaneki y Ayato giraron, viendo a la chica.

– Tn...

– ¿Terminamos? –preguntó ella.

– Sí... –asintió Kaneki.

– Es mejor salir antes de que esto se venga abajo –dijo el menor.

– Sí.