Un sol tras la lluvia - • OneShot KaraIchi • -

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La lluvia caía sin parar chocando contra el frío pavimento, en el cual podían ser audibles las pisadas del sextillizo de enmedio.

—Tal vez lo mejor sea seguir caminando, muy lejos de aquí —Murmuró Ichimatsu antes de asentir ligeramente para si mismo y caminar más a prisa. No quería ver a nadie, lo único que deseaba era desaparecer y no volver a ver nadie, no hasta que pudiese aclarar todos sus pensamientos.

El ruido que había en su cabeza no paraba, dolía demasiado.

—¿Por qué no se puede callar? —Balbuceó adolorido sujetando con firmeza los cabellos de los costados de su cabeza queriendo parar todo aquel revoltijo de ruidos dentro de ella. Jadeó ligeramente teniendo horribles ganas de estrellar su cabeza con la pared más cercana.

Las voces aumentaban conforme a su desesperación.

—¡Déjenme en paz! —Gritó lo más fuerte posible sintiendo su garganta arder debido al esfuerzo. No le gustaba y no estaba acostumbrado a levantar la voz de esa manera. Cerró sus ojos fuertemente deseando poder calmar todo ese dolor, poder dejar de sentir aunque sea por un par de segundos.

Fue audible un ligero maullido.

—¿Ah? —Abrió sus ojos lentamente al haber escuchado un suave maullido. Con cautela miró a su alrededor logrando ver no muy a lo lejos un pequeño y delgado felino color negro. Tragó saliva antes de acercarse hacia el pequeño, tomándolo cuidadosamente entre sus brazos—. Tranquilo, estás a salvo...

Las gotas de lluvia seguían resonando fuertes. Parecían no tener fin.

—No llores... —Murmuró con una sonrisa muy ligera acariciando el lomo del felino el cual maullaba débilmente temblando debido al frío que hacía. Lo apego contra su pecho conteniendo sus propias lágrimas. Estaba frustrado—. Yo estoy aquí~ —Tembloroso beso la peluda cabeza del gatito.

Se sentía mal, perdido y olvidado.

—¡Por favor, no tengas miedo! —Se aferró con fuerza escondiendo al pequeño entre su sudadera dejando correr las lágrimas por sus mejillas. Su corazón chocaba fuertemente contra su pecho y su respiración se hacía cada vez más irregular. Tenía miedo. Alguien, quería que alguien lo encontrara pronto.

—¿Ichimatsu? —Dejó de hiperventilar al escuchar aquella voz tan conocida. Volteó lentamente vislumbrando el rostro tan parecido al suyo, su hermano, Karamatsu. Tragó saliva sin importarle que viese su rostro. Sus lágrimas fácilmente podían ser escondidas por la lluvia, no tenía nada de lo cual avergonzarse.

—Karamatsu... —Tuvo que carraspear al escuchar su propia voz ronca y quebradiza. Volteó la vista hacia donde se encontraba el gatito dormido, mordió su labio no queriendo soltar un hipido vergonzoso que revelara su estado depresivo. No deseaba causar lástima en nadie.

—Vine porque se desató la lluvia y vi que no traías paraguas y yo... —Explicó nervioso rascando su mejilla avergonzado. Sacudió su cabeza despabilando antes de extenderle el paraguas extra que llevaba en su mano libre ya que en la otra sostenía el suyo propio. Lo vio confundido por unos segundos antes de abrir sus ojos asombrado—. ¡Ichimatsu! ¿Te encuentras bi...?

—¡Kusomatsu! —Exclamó fuertemente evitando que terminase de formular su pregunta. Fue estúpido pensar que no iba a darse cuenta de sus ojos hinchados y rojos, era Karamatsu de quien estaba hablando, su hermano claramente se daría cuenta de su estado. Era quien más pendiente se encontraba de su estado. Se levantó aceptando tranquilamente el paraguas—. Gracias, Karamatsu...

—¿Ah? —Abrió sus ojos asombrado al escuchar esas dos palabras provenir de los labios sonrientes de su hermanito menor. No esperaba recibirlas y menos de él, su corazón chocó contra su pecho fuertemente mientras podía sentir como el calor remplazaba con rapidez el frío clima—. ¿¡Ichimatsu!? —Lo llamó al ver como este ya se encontraba varios pasos lejos de él.

—Apúrate, quiero volver a casa —Murmuró volteando a verlo de reojo con su característica mirada neutral. Lo miró por leves segundos antes de continuar caminando deseando estar en su cómodo futon caliente. No admitiría que se encontraba feliz por haber sido encontrado por Karamatsu ni que las voces habían parado por él provocando que su estado de humor mejorase demasiado.

No admitiría que Karamatsu era su rayo de luz.

No lo haría.

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Ajjskajska, mi bebé wey >:'c 💜 -La que sufrió al escribir esta wea-
Tengan buenas tardes :'u 💙

Dentro de los Matsuno (Osomatsu-san) Onde as histórias ganham vida. Descobre agora