Good girls are Bad Girls.

Capítulo 18.

No salimos de la habitación en toda la tarde, Luke tenía algunas golosinas en la maleta y nos dedicamos a comérnoslas mientras veíamos una película, no logré terminal de verla porque me quedé dormida, con Luke aún abrazandome.

Y así amanecí por la mañana, sobre él, que me observaba enternecido. Le observé con sólo un ojo abierto y él me dedicó una sonrisa.

- Feliz Navidad, Tess.

- Igualmente.- Dije volviendo a apoyar mi cara en su pecho, se estaba bien, de su cuerpo emanaba una especie de calor que me adormilaba.

- ¿Podrías... eh... esto... levantarte? Quiero ducharme.- Me preguntó, riendo.

Me levanté rápidamente.

- Ah no, de eso nada, hoy me ducho yo primero, eres un lento en la ducha.- Anuncié.

Él se levantó despacio, sin dejar de mirarme, para cuándo comprendí lo que se proponía, era demasiado tarde, echó a correr hacia el baño, traté de alcanzarle pero se metió al baño demasiado rápido. Aporree la puerta y cuando conseguí entrar, encontré a un Luke en bolas entrando a la ducha.

- ¡Oh, por dios! ¿Podrías tratar de dejar de acosarme?

No lo dudé un segundo y me quité la ropa.

- ¿Se puede saber qué haces?

- Si no vas a dejarme entrar primero, entraremos juntos.

Había valido la pena sólo por ver la cara que puso, su madíbula parecía que fuera a descolgarse em cualquier momento y los ojos se le iban a salir de sus órbitas.

-Cierra la boca, que te van a entrar moscas.- Dije mientras entraba en la ducha.

Él me observaba desde fuera, con una toalla tapando como podía sus partes inferiores.

- ¿Vas a venir o no?- Dije con picardía.

Él sacudió la cabeza, como despejandose, para después tirar la toalla a un lado y entrar a la ducha.

En realidad, la ducha no podía recibir tal nombre, si no que era una bañera bastante espaciosa, cuándo nos encontramos frente a frente, él se sonrojó ligeramente, quién lo hubiera pensado, el mujeriego de Luke Hemmings sonrojado por estar desnudo ante una mujer, no me podía hacer una idea de lo normal que podía llegar a ser este chico, siempre había pensado que lo único que pasaba por su cabeza eran maneras de follarse a chicas y después no tenerlas que volver a ver, para poder tirarse a otra sin problemas, pero ahí estaba, delante de mi, con una erección y sin atreverse a tocarme sin mi permiso. Al igual que la noche anterior no quiso ponerme las manos encima y dejar el momento en algo bonito y mágico. Es increíble lo que las apriencias pueden engañar. Aunque él mismo habíaz admitido que hasta hace poco era exactamente como yo imaginaba, pero jamás hubiera podido si quiera pensar en que detrás de esos preciosos ojos azules y esa pícara sonrsa podría encontrarse algo tan traumático como la muerte de su mejor amiga, de la que además estaba enamorado. De todas maneras, ¿qué chica podría no desear a un chico como él? Quiero decir, es jodidamente caliente. Seguro que tiene a  miles de chicas babeando tras de él, y eso era lo que me preocupaba ¿Y si me enamoraba de él y se cansaba de mi? Se iría corriendo a la cama de la primera furcia que le hiciera ojitos. No estaba preparada para soportar que me volvieran a romper el corazón, no otra vez. Comencé a pensar en cómo él me dejó echa una mierda, llena de inseguridades y moratones, y se me inundaron los ojos de lágrimas.

-  ¿ Estás bien?- Me preguntó Luke, preocupado.

- Sí, es sólo que se me ha metido algo de jabón en el ojo.- Mentí.

- Pero si no has cogido el jabón aún, te estaba preguntando si querías y me estabas ignorando.

Mierda.

-  ¿Qué te pasa?- Insistió.

- Yo... No es nada, de verdad, da igual.- Dije dándome la vuelta y cogiendo el jabón.

- Si diera igual no llorarías, Tess, puedes confiar en mi. No quiero empezar esto si no confías en mi.- Me soltó de golpe, con voz dulce, pero dura.

- Luke, no sé si puedo confiar en ti.- Declaré.- Tú mismo dijiste que no te atabas a nadie, que eras un mujeriego, ¿cómo sé que no te aburrirás de mi e irás a la cama de cualquiera que te haga ojitos?

- Podría preguntarte lo mismo.- Dijo serio.

Suspiré, eso me había dolido pero sabía que tenía razón.

- No te voy a engañar, si es lo que dudas.

- No quiero enamorarme de ti y que me hagas daño.- Confesé, medio en susurros.

Él se acercó a mi, y cogió suavemente de la barbilla, haciendo que le mirara a los ojos.

- De eso debería tener miedo yo, ya que yo ya estoy enamorado de ti.- Sonrió.

- Pero yo eso no lo sé, no sé qué piensas o sientes y tengo miedo.

- Te lo demostraré.- Dijo seguro.- Te lo prometo.

Me besó suavemente en los labios, para después salir de la ducha, dejándome sola, estaba confundida, pero sabía que si no lo intentaba, nunca lo averiguaría.

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Bueeenas chicas, quería decir que siento que este capítulo sea cortito, pero veo que esto está ya cerquísima de los 350 MG y voy a ir preparando el maratón, así que, para que se les haga más corta la espera, aquí tienen.

Después, quería darle las gracias a Isabel por la portada y decir que su personaje aparecerá en el capítulo 20. Como ha sido la única que me han mandado y me encanta, esta será probablemente la definitiva. Muchas gracias por leerme, si os ha gustado no os olvidéis de dalr me gusta y comenten xx