Capítulo 056.

1.6K 67 3
                                    

Sus manos recorrieron mi cintura mientras pegaba su frente con la mía. El tiempo de alejarnos me había lastimado más de lo normal, sólo quería abrazarlo y no soltarlo por ninguna razón.

Justin tomó mi rostro entre sus manos y besó mis labios delicadamente, haciéndome sentir millones de mariposas en el estómago. ¿Cómo podía hacerme tan feliz con un simple roce?

—Nunca volveremos a alejarnos, ¿Está bien? —Susurró sin quitar su mirada de mis ojos.

—Está bien. —Asentí mientras mi labio inferior comenzaba a temblar.

Al notarlo, me abrazó aún más fuerte. —Ya estoy aquí nena, no hay razón para llorar.

—Lloro de felicidad. —Sonreí y en ese instante una lágrima resbaló por mi mejilla. —Porque tú me haces feliz, haces que te quiera cada día más. Es algo que jamás imaginé sentir.

Miró hacia abajo, sonriendo de costado. —Hall...tú no tienes idea de lo que causas en mí.

Ambos sonreímos al unísono. Acaricié su brazo y él volvió a atrapar mis labios, haciéndome sentir la más afortunada. Lograba hacerme sentir única, protegida, libre, amada y mucho más a la vez. Todo lo que quizás merecía.

Besó mis labios con pasión y lo miré a los ojos dulcemente. Eran los ojos más hermosos que había visto; de un color miel brillante que lograban atraparme con sólo parpadear. ¿Cómo podía ser tan perfecto? Su cabello estaba levemente despeinado y eso hacía que se viera sexy...¡Tenía a un dios griego en mi habitación!

Pero más allá de aquello, Justin tenía amor para dar; y eso hacía, me daba amor. Con sólo mirar sus ojos mieles brillantes ya podía morir en paz, incluso con sólo acariciar su mano.

—Te quiero. —Susurré, sintiendo mis mejillas arder poco a poco.

—Yo a ti, nena. —Respondió de igual forma. —Eres hermosa hasta cuando te sonrojas, ¿Lo sabías?

—Justin. —Dije, cubriendo mi rostro con mis manos y riendo.

Soltó una risita. — ¿Qué? Es cierto.

Sonreí levemente, para luego mirarlo. — ¿Sabes? Creo que a causa de ti comenzaré a verme hermosa yo misma.

— ¿Acaso no te ves así?

Negué rotundamente, dirigiendo mi mirada hacia un punto en la pared. —A veces dudo cuando las personas me halagan. Jamás me he sentido hermosa.

—Déjame decirte que estás equivocada. —Hizo una pausa, buscando mis ojos. —Tú eres la mujer más hermosa de todas, y nadie nunca volverá a hacerte sentir inferior mientras yo esté a tu lado.

Por mi mente pasaban miles de cosas que buscaban distraerme, pero era como si no las viera. Lo único que podía observar sin cansancio era el rostro de Justin. Estaba centrada sólo en semejante perfección y en las preciosas palabras que utilizaba para subir mi ánimo. Por esa razón me lamentaba no haber visto antes lo maravilloso que podía llegar a ser.

—Entonces... ¿Me prometes que nunca te irás de mi lado? —Pregunté casi en un murmuro.

Me observó atento. —Jamás he estado tan a gusto de prometer algo, Hall.

Acarició mi mejilla izquierda con dulzura de por medio, sacándome una sonrisa. Me limité a hablar, sólo podía disfrutar de ese instante tan maravilloso que me hacía vivir. ¿Cuántas chicas desearían estar en mi lugar? Algo me hacía pensar que ni siquiera Alice había sido tratada tan bien por él.

¿Eso me demostraba que estaba enamorado de mí?

Era una de las dudas por la cual temía rendirme. Incluso temía que me dejara sin qué pensar, sin ninguna otra razón para ser feliz. Lo amaba como nunca había amado a nadie, me hacía sentir como una princesa. Limpiaba mis lágrimas para luego reconstruir mi sonrisa poco a poco.

Y por eso estaba segura que no soportaría perderlo.

++++

La alarma comenzó a hacer su típico sonido irritante y de un solo golpe se calló. Era viernes, debía ir a la preparatoria. Papá me había dado un sermón la noche anterior, mencionando que había inventado una historia de un "viaje inesperado" al cual yo había acudido. Gracias a ello podía seguir pisando aquel establecimiento.

Caminé hacia el baño y me metí en la ducha, sintiendo como todo rastro de frustración se iba poco a poco. Me vestí cómodamente con la ropa "de moda" que Marie había dejado sobre mi cama y al verme al espejo sólo pude sentirme hermosa por primera vez en toda mi vida. Al parecer las palabras de Justin habían hecho un estupendo trabajo con mi autoestima...incluso sentía que era más bella que las demás.

Até las agujetas de mis converse y opté por bajar las escaleras rápidamente mientras acomodaba mi bolso en mi hombro. Marie preparaba el desayuno con total paciencia mientras papá leía el periódico. Tomé un vaso de agua y al terminarlo guardé una galleta en mi bolsillo.

—Hey, hey. ¿Por qué tanto apuro? —Preguntó papá quitándose sus lentes para leer.

—Debo llegar a la preparatoria...—Respondí tratando de no sonar tan obvia. Al parecer lo logré.

—Conseguí a una persona para que te lleve, pequeña.

Guiñó su ojo y por un momento quedé estática en mi lugar. Le di un beso en su mejilla y luego a Marie, saliendo de la casa lentamente.

Justin estaba apoyado en un Ferrari negro. Llevaba una playera que dejaba sus tatuajes a la vista y su cabello estaba levemente despeinado, haciéndolo ver aún más sexy. Bajé los pocos escalones que me separaban del césped verde aún sin poder creer lo que observaba.

Alice y Hailey nos verían llegar juntos...justo como lo había deseado.



++++

Hasta aquí por hoy <3

¡COMENTA Y REGÁLAME UN VOTO SI QUIERES QUE LA SIGA!

Rom.

Invisible »Jb. |FinalizadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora