Capítulo 15

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Lo que hace al amor único, es que se manifiesta de diferentes formas y colores. Pero todos en algún momento nos damos cuenta que estamos enamoramos. Yo supe, desde el momento en que la vi, que ella sería mi dulce perdición. Sin embargo la besé y ese beso fue el principio de un trágico final.
Tormentosa pasión, Nathaniel Proulx.

Me froto las sienes mientras la profesora de anatomía reparte los exámenes. Delta me chista y cuando volteo a ver, me pasa un pequeño bollo de papel. Frunzo el ceño y con señas me pide que lo lea. La nota dice "Hoy. Oficinas de Newman. ¿Vienes?". Volteo a verla con el ceño fruncido y ella me regala una leve sonrisa, pero nuestro intercambio de miradas se ve interrumpido porque la profesora se para entre nosotras para entregarnos el examen.

—¿Les traigo un té? —pregunta con una ceja enarcada—. No quiero que hablen o les quitaré su examen y a ninguna de las dos les conviene eso en estas instancias. Ambas son candidatas para las becas, ¿no? —pregunta con superioridad.

Asiento cabizbaja y me concentro en el examen. Escucho que Delta aclara la garganta y comienza a apretar varias veces el botón de la lapicera. Mi amiga es buena en los deportes, pero se pone demasiado nerviosa en los exámenes.

Me concentro en mi hoja y me pongo a pensar en las respuestas, recordándome que lo que más me importa en este mundo es conseguir esa beca. La idea de alejarme de todos los que me han hecho sufrir me agrada, alejarme de mi padre, de Frederick, de Nicholas y de mi madre (aunque esta última tenga sus días buenos y malos). Escribo las respuestas focalizándome en la beca como única meta en mi vida. Media hora después, entrego el examen y espero fuera del aula. Poco a poco los alumnos van saliendo y la última en entregar es Delta, que parece más nerviosa con las palabras de sentencia que pronunció la profesora.

—¿Qué te ocurre? —pregunto con el ceño fruncido.

Mi amiga castaña se ve pálida y el labio inferior le tiembla un poco.

—Tengo miedo que anatomía me arruine el promedio escolar —confiesa—. A la profesora siempre le caí mal y no quiero depender de su estado de ánimo para tener un futuro en Stanford.

—Tranquila, el entrenador no dejará que la profesora se anatomía le arruine el futuro a la única deportista que califica para beca —le aseguro mientras caminamos hacia el patio de comidas.

—Y si eso ocurre, nos encargaremos de ella... —le asegura América guiñándole un ojo—. Pero tú concéntrate en los exámenes y no en el nuevo chico que apareció en tu campo visual —añade y le da un codazo.

Delta sonríe. Nos desviamos hacia la sala donde está el equipo de periodismo. Delta golpea la puerta y Aria nos abre para luego dejarnos pasar, no digo nada pero sé que estas tres traman algo. El equipo del periódico nos saluda. Algunos están en la zona de impresión y los de diseño se encargan de organizar la próxima entrega del periódico, donde saldrá en primera plana la nota exclusiva a América y su investigación en la aplicación. Aria y otro chico más estuvieron una semana entera entrevistando a América, además de conocer cómo se maneja con las investigaciones que hace sobre energías renovables. El mes pasado Delta estuvo en la primera plana, cuando el equipo de vóley ganó contra el equipo de otro instituto y mi mejor amiga fue la estrella del partido. Yo nunca estuve en la primera plana, simplemente porque no destaco en nada más que en el cuadro de calificaciones, donde peleo el primer puesto con nada más ni nada menos que Bryanna Smith.

—¿Dylan nos acompañará? —pregunta Aria a Delta y mi amiga castaña asiente.

Las observo con el ceño fruncido.

—¿Nos acompañarás a ver a Newman, verdad? —pregunta con su sonrisa compradora, esas que usa cuando quiere salirse con la suya. Siempre lo consigue, sobre todo porque Delta tiene excusas demasiado convincentes para que te unas a sus locuras.

Mi problema favorito #1 [EN EDICIÓN]Where stories live. Discover now