Míngwáng

Parte II

—Mi nombre, es Hideki Ryuga. Soy el detective a cargo de la investigación sobre el caso "Míngwáng"

Light volteó el rostro para ver los inquietantes ojos de aquel tipo.

¿Quién era ese loco? ¿De dónde había salido? ¿Qué acababa de decir? ¿Él realmente era quien decía?

Sintió un nudo formase en su estómago y retuvo el aliento; las manos le comenzaron a sudar casi de inmediato. ¿Podía ser posible que le hubiesen descubierto? O ¿Estaba simplemente observando sus reacciones? Pero ¿Cómo había dado con él, tan rápido?

Recordaba haberlo visto solo una vez durante el examen de admisión y su presencia le había resultado escalofriante, sin embargo, no le había prestado más atención hasta ese momento, en el que le dirigía directamente la palabra. Realmente, la apariencia de ese sujeto era inquietante. Tenía su misma estatura, pero parecía más bajo a causa de esa posición extraña en la que estaba parado, de espalda encorvada y las piernas levemente flexionadas, su espalda era ancha y sus hombros, huesudos, denotaban una delgadez extrema, sus cabellos oscuros como el ébano eran largos hasta tocarlos e iban muy desarreglados, resaltaban la palidez de su piel y sus prominentes ojeras, sus ojos eran grandes y miraban fijamente, le recordaron a los de un búho, nariz griega y labios finos, también empalidecidos, que ayudaban a complementar su aspecto enfermizo.

"Tranquilízate, Light"

—Si realmente eres quien dices ser, déjame decirte que estoy encantado de conocerte y que eres un hombre al que admiro mucho.

—Me han dicho que eres un excelente estudiante, Yagami, e incluso, que has ayudado en la resolución de algunos casos.

—Dejando la modestia aparte, si lo he hecho.

—Interesante- dijo y se llevó el pulgar a los labios —Pronto te enterarás el porqué de que me encuentre aquí.

**

Light abrió los ojos y levantó la cabeza del incómodo sitio en el cual la había posicionado; el escritorio. Mirando a su alrededor desorientado, descubrió la lámpara encendida y lo que recordaba de la carta que tenía Linda en su celular, escrita en un papel. Tomándola entre sus dedos, la observó unos instantes sin prestarle real atención. Había tenido un extraño sueño, pero más que eso, las imágenes de su pasado habían inundado su memoria, trayendo consigo la vez que había conocido a Elle.

Sintiendo una opresión en el pecho, trató de sonreír al recordar el shock en el que había caído cuando Elle le había revelado que creía en un 10% que él era el líder de "Míngwáng"

En ese momento lo había odiado, lo había aborrecido con todas sus fuerzas y habría dado lo que fuera porque muriese de inmediato. Si alguien le hubiese dicho que un par de años después se sentiría tan devastado con su muerte, se le hubiese reído en la cara.

Light suspiró sintiéndose terriblemente abatido y nuevamente los deseos de llorar comenzaron a embargarle. Elle, su Elle...

"Concéntrate, Light" se dijo asimismo recordando que no tenía tiempo que perder. Seguro, la rata albina ya andaba detrás de alguna pista, después de todo, él conocía mejor a Linda.

Volviendo su mirada a la carta, se dedicó a releerla.

"Queridos...

En estos momentos de seguro, estoy de viaje, por ello, es necesario que lean con atención esta carta, puesto que se trata de...