El Triunfo (Wariam)

San Junipero?

Miriam

Lo malo de pasar mucho tiempo con Ana Guerra es que llega un momento en el que no sabes cómo has podido vivir sin ella. Ana es como una droga, te engancha, y da igual lo mucho que intentes evitarla porque hasta los defectos de Ana son adorables. Mírame a mí, toda una leona, la borde de la academia, que me empeñé en convertirla en mi rival y ahora solo pienso en que sea mi compañera. Es que Ana te rinde con su ternura, su forma de quererte y cuidarte, es imposible no acabar enamorándome de ella. Si hasta cuando la odiaba me costaba decirle que no, imagínate ahora que quiero decirle que si a todo. Por eso me da tanto miedo salir ahí fuera. Levanto un poco la colcha para poder ver mejor a Ana.

Ana- ¿Ya estamos? ¿Tú no tenías que descansar?-
Miriam- No creo que mirarte sea una actividad extrema. Pero vamos que yo hago la estrellita de mar y me quedo tan contenta- Ana se incorpora con una sonrisa traviesa.
Ana- ¿Ah sí? No esperaba yo eso de la leona, no te tenía por una de esas-
Miriam- ¿De esas?-
Ana- Pillow Princess en el argot de bolleras-
Miriam- ¿Y eso que es?- la beso- es que me parece a mí que estamos poniendo mucho empeño en la práctica y se nos olvida la teoría- Ana se ríe.
Ana- Pues una Pillow Princess es una tía que en la cama se deja hacer y ya- me vuelve a besar.
Miriam- Ni de coña soy una de esas, a mí me gusta mandar- Ana empieza a darme pequeños besos en el cuello mientras me acaricia la tripa con sus dedos.
Ana- Pues tampoco tengo claro eso, yo creo que eres más una service top y yo una power bottom-
Miriam- Esto es más difícil que la ingeniería agrónoma de Ricky, ¿Qué significa toda esa mierda?-
Ana- Significa que aunque te gusta dominar eres capaz de adoptar un rol más sumiso y dejarte hacer por complacer a la otra persona-
Miriam- ¿Y lo tuyo?-
Ana- Lo mío es que, aunque me encanta que me domines, a veces cojo el rol de líder porque no soy del todo sumisa- Ana se pone encima mía.
Miriam- Ah, pues yo lo que me parece es que en este curso hay muy poca teoría y mucha más práctica- Ana se ríe.

Ana- Si quieres lo hacemos al revés, nos ponemos un examen de 30 preguntas a lo Mamen y lo de practicar lo dejamos para luego- Ana se levanta un poco, esta a cuatro patas con un brazo a cada lado de mi cuello y sus piernas a los lados de mis caderas.

Miriam- ¿Justo hoy que tenemos la mañana para nosotras solas? Ni hablar- La cojo del cuello y la atraigo hacia mí para besarla.

Ana- Bueno, pero hoy nada de esfuerzo, tú ahí tumbadita, que yo me encargo de todo-

Miriam- Me encanta cuando te encargas de todo- Ana me mira y baja de nuevo la cabeza para un beso, está intentando no echar su peso sobre mí pero yo no la quiero tener tan lejos- Ana échate encima mio-

Ana- Ni hablar, estas convaleciente- Ana empieza a besarme, pasando su lengua por mi cuello, levanta mi camiseta un poco mientras acaricia mi pecho- Miriam, ¿puedes sujetarme los hombros?- yo obedezco, ya sé porque me lo pide Ana quiere que sujete parte de su cuerpo porque su otra mano ha abandonado el colchón y ya está entre mis piernas- solo un momento- se acomoda en la cama y abre mis piernas con cuidado colocándose entre ellas. Yo no es que quiera hacer la estrellita de mar, pero en estos momentos sólo quiero ver como Ana me devora. Veo como Ana pasea su dedo índice por mi cuerpo, lo introduce dentro y luego lo lleva a su boca donde empieza a lamerlo muy lento.
Ana- Que bien sabe mi Leona-
Miriam- No sabes tú, como me estás poniendo-
Ana- Pues como quiero ponerte Leona-
Miriam- Pues no sé si lo has notado, pero lo estás consiguiendo- Ana pone su cabeza muy cerca de mi cuello empieza a dar pequeños mordiscos en mi oreja, mientras me agarro a las sábanas lo más fuerte que puedo, Ana susurra en mi oído.
Ana- Sí, me encanta cuando te pones tan mojada sólo para mí- La voz de Ana es profunda y oscura, no me extraña que Amaia se corra viva cuando ve las coreos, si ve esto, si oye esto se muere.
Miriam- Ana por favor- Ana juega con mi entrada pero no quiere hacerme sufrir demasiado así que introduce sus dos dedos aún húmedos adentro.
Ana- Como me gusta que estés caliente y húmeda- Yo creo que me muero, no sabía yo que era de las que se ponen cuando le dicen guarradas. La verdad es que, estando aquí dentro, Ana y yo no hablamos mucho por eso de que nos pillen, pero ahora estoy aquí con ella y los demás en clase de Magalí y Ana no va a dejar pasar la oportunidad. Ana empieza a mover los dedos y no sé que acaba de tocar que hace que mi cuerpo se curve y gimo mucho más alto de lo que debo-
Ana- Vaya, parece que si hago así...- Ana vuelve a mover sus dedos exactamente de la misma forma en la que lo hizo antes y vuelve a sacarme un gemido, un poco más alto que el anterior, Ana pone una mueca burlona- la leona ruge-
Miriam- La leona va a puto chillar si sigues con eso- No debería haber dicho eso porque creo que a Ana le gusta el reto.
Ana- Pues a ver cuánto aguantas- y Ana baja su boca a mí sexo, añade un tercer dedo y sigue combinando los movimientos con pequeños lametones. Ahí ya me vuelvo loca, nivel la niña del exorcista de loca, mis caderas suben hacia Ana en un intento de acercar más su boca a mí y sentirla más adentro y cuando ya no puedo mas, grito.
Miriam- Ana, Ana, Anaaaaaa- Ana se tumba sobre mi cuerpo y me habla sin borrar esa sonrisa burlona de su cara.
Ana- Shhh, leona que escándalo a ver si mantenemos el volumen bajo, que nos pueden estar oyendo-
Miriam-Eres una cabrona, a ver si ibas a estar callada si yo te hiciera lo que me estabas haciendo- La sonrisa de Ana se hace más evidente, una sonrisa confiada que le llena la cara- ¿Estas orgullosa de esto, verdad?-
Ana- Altanera, preciosa y muy orgullosa de hacer que te corras gritando mi nombre- Creo que me estoy poniendo roja, intento responder pero Ana me está acariciando y creo que me ha cortocircuitado el cerebro.
Miriam- prrrrr-
Ana- ¿Estas ronroneando?- Ostia, ¿pero que coño me pasa que no controlo mi cuerpo?.
Miriam- No que va, te lo estás imaginando- me doy la media vuelta avergonzada como si enterrar la cara el la almohada fuera a librarme de esto, pero Ana vuelve a tocarme de esa manera y yo, sin poder evitarlo, ronroneo.
Ana- Ay qué me encanta, que mi leona es un gatito, anda ven aquí, no te escondas. Es lo más adorable que he visto nunca- Ana me coge por el hombro y me gira de nuevo.
Miriam- No soy adorable-
Ana- Lo eres y mucho, por eso te quiero-