My little best friend, "the famous"

Capítulo 52.- ¿Creo en el amor?, supongo que sí.

     Creo que en ese momento mis ojos estaban llenos de lágrimas de felicidad y un grito se ahogaba en mi garganta, mi hermano estaba detrás de mí, sin decir nada, sentí su presencia y su respiración, esperaba una respuesta.

- Realmente le gusto.-

- ¿Te vas dando cuenta hasta ahora? ¿Realmente tenía que hacer esa publicación para que tú te dieras cuenta? Eres una tonta y una ciega.-

     ¿Qué haría? Digo, una novia orgullosa por las palabras de su novio, ¿Qué haría? Ahí me ven, publicando la foto de Cameron por cada red social, para que todo el mundo se enterara, claro, puse mis "Me gusta" a cada una, como apoyo, pero por lo pronto no diría nada, sabía que miles de chicas me odiarían, me odiaban ya. Al terminar, fui a acostarme a un lado de mi hermano con una sonrisa gigante en mi rostro.

- Debes de aprender a defenderte contra los medios y las fans locas, pero me alegro que ahora seas feliz... Dejaré que lo seas al menos una noche más.-

- Gracias hermano.-

     Esa noche no hubo pesadillas, sólo sueños de mi infancia... Ese gran patio trasero y un niño con cabello naranja... El olor de las margaritas, la ligera brisa, y las risas...

- Al, despierta, iremos a desayunar. -Rapha movía mi hombro suavemente- Te esperaremos abajo, no tardes.-

     Después de que todos se fueron, me levanté de esa gran cama e hice mis necesidades básicas, salí al desayunador con mi pantalón negro favorito, mi camiseta de Winterstorm y botas militares, no me peiné ni maquillé.

- Al fin bajas, pensé que tendríamos que desayunar sin ti.-Me miró mi madre, mientras cortaba un trozo de sus waffles.

- Buenos días, ¿Todo en orden Aleena?- Diane me acercó una taza de café.

- Sí Diane, todo está más que perfecto -Tomé asiento a lado de Cameron y mi hermano, como siempre- ¿Por qué la pregunta?.-

- Ya sabes, por lo de ayer... No creí que se enterarían tan rápido.- La voz de mi anaranjado novio sonó calmada.

- Nada de eso me molesta, no me importa. Que piensen y hagan lo que quieran, no me van a arruinar estas vacaciones, no me van a arruinar nada...-

     El desayuno, que constaba de panes franceses, café con crema, fruta y un postre, siguió de maravilla, hablamos de todo. Por lo general yo evitaba las conversaciones relacionadas con "amor", ya que siempre lo creí algo imposible y hasta estúpido en ocasiones, pero ahora... ¿Creo en el amor? Supongo que sí.

- Bien, ¿Por dónde iniciaremos el paseo de hoy? ¿Quieren conocer más la ciudad? ¿Ir a un museo?- Cam miraba en su celular un mapa de la ciudad.

- No está nada mal, un museo me parece bien.-Mi padre ajustaba con su mano las gafas sobre su nariz.

- Claro, como el viejete que eres, prefieres lugares callados.-Molestó mi hermano.

- Raphael -Dijo mi madre con su tono serio que nos helaba la piel-, más respeto.-

- Má, tengo 27 años y le serví a éste país por 10 años... No me asustas...-