Guerra fría [Historia gay]

Primera parte: capítulo 28: Dudas

Hoy estoy de buen humor, no sólo porque sólo me queda mañana para terminar los exámenes, ni porque saqué un 7,8 en filosofía e.e Sino también porque he podido acabar el capítulo 28 antes de los previsto, ¡y os traigo una novedad!

Os traigo a los personajes e.e Jajaja, es decir, que me explico. Supongo que todo el mundo tendrá su versión de Giovanni, Harry, Chase, y todos los demás, incluso yo tengo la mía. Por eso, aunque no pretendo cambiar vuestra versión física, os pondré cada capítulo una foto de personas o actores que vea parecidos. Hoy, por ejemplo, empiezo con nuestro amado italiano Giovanni xDD

Su nuevo look e.e Como ya sabréis, Giovanni tiene el pelo más larguito y ondulado, pero vamos, que en este cap se lo corta (spolier xD). Aunque su cabello es más claro, cuando lo vi fue un: ¡GIOVANNI! Sólo se le cambia un poco el tono, y es él, hasta con la barbita, ¡precioso!

Bueno, os dejo con la bella foto, y el capítulo 28.

¡Besos!

PD: Hay comentarios que no respondí del capítulo anterior porque, soy idiota, lo borré y todos los votos y comentarios hasta el momento se borraron, así que lo siento. Pero, este capítulo irá dedica a Seofer12, ya que comentario me llegó mucho. ¡Gracias!

Capítulo 28: Dudas

Harry abrió lentamente. La luz entraba por la ventana, y la fina cortina no impedía que los rayos del sol chocasen con sus párpados. Se había dormido de un tirón. Los brazos de Giovanni le habían acunado hasta que él cayó rendido, y juraría que también durante mucho rato después.

Se giró sobre la cama, quedando boca abajo, y cuando se tomó la molestia de fijarse en su alrededor, vio la cama totalmente vacía. Miró la hora, y tan sólo eran las diez de la mañana. Se sentó sobre el colchón y se refregó los ojos con pereza, bostezando. Con la boca pastosa y los ojos casi cerrados, paseó su mirada por toda la habitación. Estaba completamente vacía.

Frunció el ceño, extrañado de que Giovanni ni estuviese allí, y se levantó de la cama. Rebuscó entre las mantas sus calzoncillos, y cuando los hubo encontrando se los puso. Aún con una mano en sus ojos, quitándose las pocas lagañas que tenía, salió de la habitación de Giovanni. En el salón, todo estaba como el día anterior. Los libros seguían tirados por el suelo, junto a otras cajas llenos de objetos.

Buscó al mayor con la mirada, y se lo encontró en el balcón, de espaldas, con un cigarrillo en la mano. Harry sintió como sus piernas frenaban, y su corazón subía hasta su garganta. Algo no iba a bien.

Salió por el balcón, haciendo el suficiente ruido para que Giovanni lo notase. Se giró y le miró. Harry pensó en saludar, o en decir cualquier otra cosa, pero el mayor se le adelantó.

-Pensé que estabas durmiendo. -su voz sonó angustiada, y algo forzada.

-Me acabo de despertar. ¿Tú llevas mucho tiempo despierto? -Giovanni bajó la mirada, y le dio una calada a su cigarrillo. Tardó en responder.

-Sí... bueno, nunca he sido de dormir mucho.

Harry, por primera vez en mucho, sintió como si aquella situación fuese estúpida. Era obvio lo nervioso que se sentía Giovanni, y esos nervios provocaban que Harry se sintiera sin la suficiente valentía como para decir algo. Cómo si todo ese desparpajo característico en él, desapareciese.

-Oye... -el menor dio un paso hacia delante, dispuesto a romper el hielo. Pero Giovanni retrocedió de inmediato. Harry frunció el ceño. -¿Pasa algo?

El mayor no respondió, ni si quiera se molestó en mirarle. El tabaco de su cigarrillo se consumía poco a poco, formando la ceniza a punto de caer.