Capítulo 4: Un acosador.

107 10 6
                                    

Capítulo dedicado a: SaraArredondo

Helena...

Alguien está siguiéndome.

Y no, no estoy alucinando.

¿Por qué diablos pensé que era una buena idea salir a correr a las cinco de la mañana a central park?

Pienso mientras corro más deprisa para llegar a un sitio donde al menos me topé con alguna persona.

Por Dios, estamos en la ciudad que nunca duerme, porque justo hoy nadie decidió venir a correr temprano.

Vuelvo a escuchar ruidos tras de mí que provocan que me sobresalte, por lo que apresuró más el paso. Pero las piernas están comenzando a dolerme por haber estado corriendo tanto tiempo.

De repente escucho claramente las pisadas de quién sea que venga corriendo tras de mí y me alarmó, por lo que utilizo lo último que me queda de energía para acelerar el paso una vez más. Por suerte logro alcanzar a una pareja que también está corriendo, pero a muy baja velocidad, por lo que aminoro mi ritmo y me atrevo a girarme a ver quien venía tras de mí.

Pero no hay nadie, todo está absolutamente solo. Un escalofrío me recorre todo el cuerpo por el miedo, por lo que ignorando el dolor en mis piernas me apresuró a salir del parque para regresar al departamento.

**********
-Estas muy distraída hoy-me dice Gabriela mientras choco por quinta vez con ella. -¿Estás bien?

-Sí, lo estoy-le respondo de inmediato y trato de sonreírle, antes de girarme rápidamente y alejarme de ella. No he querido contarle a nadie lo que me sucedió por la mañana, porque quizás solo estoy un poco paranoica por los días pasados; por lo que he estado tratando miserable de actuar normal...Pero no puedo dejar de sentir que alguien me está observando.

-Hola belleza-me dice Andrew apareciendo frente a mi de repente con un gran ramo de rosas, no son mis flores favoritas, pero están hermosas; por lo que le sonrió y me acerco a abrazarlo.-Lamento haberme marchado por la mañana.

-No te preocupes-le digo de inmediato, separándome de él.-Debí haberte dicho que saldría a correr.

-Esta bien, no sabía que iban a llamarme tan temprano y como no tuvimos mucho tiempo a solas ayer; vine a secuestrarte para compensarlo.

-¿Adónde vas a llevarme?-le pregunto con sospecha.

-Eso es una sorpresa-me responde y se acerca a abrazarme de nuevo, antes de darme un beso.

-Vas a tener que esperar a que mi turno termine-le digo, observando el reloj y viendo que hacen faltan veinte minutos.

-Te espero toda la vida de ser necesario-me responde antes de darme otro beso que me deja un poco desubicada; para luego tomar las flores y sentarse en una de las mesas vacías.

-Eres una mujer afortunada, ¿lo sabías?-me pregunta Gabriela apareciendo a mi lado.

-Lo soy-le respondo sinceramente, olvidandome por un momento de todo lo malo, mientras regreso a trabajar, ansiosa de que se termine mi turno.

-¿En verdad no vas a darme ni una pista de a dónde nos dirigimos?-le pregunto a Andrew cuando ya estamos en su auto de camino a la sorpresa.

-No, déjame que te sorprenda-me insiste.-Estoy seguro de que va a encantarte... Nada más que tenemos que cambiarnos primero.

-¿Cambiarnos?-le pregunto con curiosidad miéntras me doy cuenta de que se estaciona fuera de mi apartamento.

-Si, vamos-me responde y ambos salimos del auto.

Tú eres la razón. (#FixYou2) Where stories live. Discover now