Capítulo 32 - No la perderé

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Al día siguiente.

-D: Hey, ustedes dos, despierten, que no pienso entrar y verlas desnudas, tenemos que irnos.

-L: Que te jodan, Dinah.

Respondí ante la brusquedad de mi rubia amiga al venir a despertarnos, ya que no satisfecha de hacerlo levantando la voz, también dio bruscos golpes en la puerta, que era ruidosa y me sacó de mi sueño de golpe, sin embargo, Camila seguía profundamente dormida, por lo que bostecé y la apreté más fuerte entre mis brazos, sintiendo su cálido cuerpo desnudo junto al mío, luego dejé un beso en su mejilla, haciendo que se removiera, que balbuceara un par de cosas sin sentido y se acomodó mejor, dejando su rostro enterrado en mi cuerpo.

Así que sonreí, al sentir como se aferraba a mi y dejé salir una suave respiración al recordar esta noche, donde me dejó amarla sin restricciones, sin avergonzarse y dejándome hacerla disfrutar al máximo, justo como yo igual disfruté.

***

La dejé dormir algunos minutos más, hasta que caí en la cuenta de que si debíamos irnos, ya que teníamos que aprovechar al máximo la luz del día y avanzar lo más posible, por lo que muy a la fuerza, la alejé un poco, sólo para permitirme ver su rostro tranquilo y apacible, y después de acariciar su mejilla, dejé un par de besos pequeños en sus labios, intentando despertarla.

-L: Camz, hermosa, debemos irnos...

-C: Mmm (me abrazó y negó) No quiero.

Mencionó con su voz ronca y adormilada, sin abrir los ojos y haciendo un puchero, que me hizo sonreír de inmediato, pero que no debía de convencerme.

-L: Tenemos que irnos, mi vida, debemos movernos.

-C: Ay, quiero quedarme aquí contigo.

Esta vez sí abrió los ojos, al menos un poco y me observó, yo sonreí y dejé otro beso más en sus adormilados labios.

-L: Yo también quisiera eso, pero no podemos, anda, arriba, mi amor.

-C: Bueno, esta bien.

Muy a la fuerza, se sentó en la cama, mirando al suelo, bostezando y frotando sus ojos mientras que yo me puse de pie, rodee la cama y recogí toda nuestra ropa que estaba regada por todas partes, me coloqué los boxers y el sujetador y a ella le pasé su ropa interior, con la que se vistió con una gran lentitud, se notaba con mucha facilidad que tenía mas sueño que nunca, cosa que me hizo reír.

-L: Podría jurar que justo ahora, los andantes son mas rápidos que tu, amor.

-C: (Me sacó la lengua) Déjame, tengo sueño, y además, es tu culpa.

-L: Asumo la culpa, pero... (Me acerqué y me arrodillé frente a ella) No me vas a negar que valió la pena ¿verdad? (Tomé sus manos y las besé).

-C: (Sonrió y asintió) Toda la pena del mundo.

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-Hal: Bueno, hasta que se dignan a aparecer.

-L: Cállate, Halsey, no me arruines la felicidad.

Mencioné de inmediato, con Camila sujetando mi mano cuando nos acercamos a nuestro grupo, pues ya estaban reunidos todos en el recibidor, listos para partir en cualquier segundo.

-L: Bien. ¿Todo listo para irnos?

-Tr: Desde hace mucho, Jauregui, sólo faltabas tú y la señorita Cabello, que se entretuvieron bastante ¿verdad?

Camila se sonrojó ante tal comentario y yo sólo pude reír, besé la mano de Camila antes de soltarla y caminé hasta una ventana, donde me di cuenta de que la carretera estaba desierta y eso sería una ventaja para que nosotros pudiéramos marcharnos sin mayor problema.

En el camino (Camren) G!PWhere stories live. Discover now