En el camino (Camren) G!P

Capítulo 31 - Permíteme

Tiempo después.

Para este punto, ya habíamos recorrido y pasado cuatro ciudades, evitando pasar por el centro de estas, y aunque fuera más tardado, preferimos pasar por la orilla, conduciendo de noche, de vez en cuando refugiándonos en donde fuera seguro, otras veces durmiendo en la orilla de la autopista, o en lugares inhóspitos para permanecer lo más seguros que fuera posible,   encontrándonos así, ahora  mismo en Indianápolis, específicamente en la entrada de la ciudad, y como ya era de noche y casi ninguno de nosotros había descansado lo suficientemente en estos días pasados, habíamos llegado a la conclusión que buscar un techo donde pasar la noche era la mejor opción de todas.

Así que tras unas horas de conducir por la orilla de la ciudad, milagrosamente encontramos un lugar que nos serviría, que en este caso se trataba de una estación de policía, que aunque no era muy grande, era perfecta para nosotros.

Por lo tanto, detuvimos las camionetas en la entrada de dicho establecimiento, notando a algunos andantes rodando por aquí, pero no era nada que no pudiéramos controlar, claro, si armábamos un buen plan, algo que estaba por hacer, sin importar que el grupo estaba dividido entre las dos camionetas, pues podíamos comunicarnos a través de los walkies, pero por supuesto, tratando de no hacer ni el más mínimo ruido posible.

-L: Muy bien, chicos, esto en lo que va a pasar. Camila, Hailee y yo saldremos primero, Camz con la ballesta, Haiz con su espada y yo con el arma y el silenciador, mataremos a esos tres o cuatro que están más próximos a nosotros y enseguida los demás nos siguen, eliminamos a los demás que queden por la zona y entramos, sin hacer ruido, en caso de que algún andante esté dentro, así que, preparados.

Enseguida guardé silencio, miré a Camila que estaba sentada a mi lado en el copiloto, ella asintió, después miré a Hailee, Halsey y Tyler que iban en los asientos traseros y asintieron de igual manera, preparados, por lo que suspiré, coloqué el silenciador a mi arma y puse mi mano en la manija de la puerta.

-L: De acuerdo, a la cuenta de tres... Una... Dos... Tres...

Abrimos las puertas con rapidez y esos cuatro andantes que estaban cerca de nosotros se tambalearon hasta acercarse, haciendo ruido, llamando la atención de los que se encontraban más alejados, pero actuamos rápido, Hailee mató al que estaba más cerca de ella, degollando con un corte limpio, mientras que yo maté a otro más con un disparo en la frente y Camila se encargó de los dos últimos, con dos flechazos exactos y directos en el entrecejo, para así, que los demás salieran del interior de nuestros vehículos y con cuchillos o armas que no hicieran ruido, nos encargamos de todos los demás, para de esa manera, entran con prisa a la estación y atrincherarnos ahí, bloqueando las puertas con cadenas que traíamos con nosotros, procurando en todo momento no hacer ruido, pero teníamos que efectuar el siguiente movimiento, comunicándonos entre nosotros con nada mas que susurros.

-L: Ok, chicos, escuchen. Quiero que tres se queden aquí en el recibidor... Amm Dinah, tu, Normani y Ally se quedarán y vigilarán las puertas, mientras nosotros seis nos dividiremos en parejas. Hailee y Tyler, ustedes buscarán cualquier entrada y la asegurarán, que nadie pueda entrar, también vean si hay un almacén de armas o suministros. Halsey y Troy, quiero que ustedes revisen las dos oficinas y la sala de interrogatorios y Camila y yo nos encargamos de las celdas y la sala de cámaras ¿estamos de acuerdo? (Asintieron) Perfecto, a trabajar.

Sin más, nos dividimos, Dinah, Normani y Ally se quedaron aquí, mientras que Halsey y Troy fueron directo a las oficinas, al fondo en el pasillo, Hailee y Tyler buscaron salidas en esta planta, al igual que Camila y yo, con la diferencia de que nosotras fuimos a la segunda planta, dirigiendonos a la zona de detenidos.

Antes de entrar de lleno a esas celdas, nos quedamos pegadas a la pared, asentimos mutuamente y nos dividimos con la mirada lo que inspeccionaríamos, ella se encargaría del lado derecho y yo del izquierdo y entramos, sin hacer ruido y abrimos las primeras puertas, no había nada, después las segundas, donde ella no encontró nada y yo solo me topé con un cadáver, inmóvil, algo que no fue un problema y después abrimos las dos últimas, donde otra vez no había nada, tal parece que los que estaban aquí escaparon, así que no tuvimos mayores problemas y ambas bajamos la guardia y nos miramos.