Un secreto con mi jefe [CORRIGIENDO]

52.Complacer

-Para adelante y para atrás-repetía la maestra de vals a todas las personas que bailaban dicha danza a su alrededor.

-Creo que debemos bailar para pasar hacia el hotel-me susurra Joshua mientras observa cada paso que las,por lo menos,diez parejas hacían.

Este era el caso,nos habíamos bajado del automóvil que Josh había alquilado para venir hasta el hotel,y nos topamos con estas parejas y su maestra bailando vals delante de la entrada,a las cinco de la madrugada,creo que es una tradición de Seattle.

-No se hacerlo-digo avergonzada y en voz alta-claro que tú sabes,debiste de haber ido a bailes de gala...

-La diferencia,es que no lo hice con la chica que me hace bien-me interrumpe mirándome directo a los ojos,era imposible no sonreírle a la cara por sus palabras-¿querrías bailar con un idiota con el brazo enyesado?

Sonreí mientras miraba el yeso de su brazo.

-Sería un honor.

Él tendió su mano,y la tomé,luego caminamos hasta quedar cerca de las parejas,Joshua puso su mano en mi cintura,y con la otra,haciendo esfuerzos por el yeso que portaba,sostuvo mi mano,cerré los ojos mientras comenzamos a dar pasos de la misma forma que le habíamos visto a los demás.

-Vaya,creo que se nos unieron nuevos huéspedes-dice la maestra mientras que una multitud grita contenta.

Observé nuestros pies,admito que varias veces había pisado sus lustrados zapatos,pero restando eso,no lo hacíamos como la mierda.

-Parece que fuiste a más bailes de gala que yo-susurra él,cerca de mi oído,reí ligeramente-debemos acercarnos a la puerta del hotel.

Como él dijo,fuimos moviéndonos poco a poco,hasta llegar a la puerta principal del hermoso y lujoso hotel de Seattle,por suerte unos sujetos nos habían traído nuestras maletas al vestíbulo.Nos separamos justo cuando pasamos la enorme puerta de vidrio.

-Buen día,soy Joshua Trew y ayer realicé una reservación para una habitación-dice Josh una vez que se acercó a una especie de barra de madera,donde un hombre vestido de gala aguardaba.

El hombre buscó en su computadora,hasta asentir.

-Aquí esta,habitación 506,ahora nuestros botones les ayudarán con sus maletas-comeinza a decir,luego voltea para coger una llave-aquí tiene,que lo disfruten.

Ambos volteamos hasta el ascensor dorado que había casi al final del vestíbulo,donde muchas personas ya habían bajado.

-¡Por cierto!,justo en la mesa de luz de su habitación,y en el primer cajón,podrán encontrar protección para tener relaciones-agrega el hombre,las personas alrededor nos miraron extraño,que vergonzoso.

-¡Claro!-grita Joshua,estaba rojo como un tomate.

Una vez en el ascensor,junto a los botones y dos ancianas más,Joshua me miraba de manera provocativa,ya sabía que era lo que quería.

Cuando llegamos a nuestro piso,los dos botones nos guiaron hasta nuestra habitación,y esta por dentro tenía,en la entrada, un pasillo con sillones pequeños pero elegantes,al igual que cuadros y espejos,y girando a la derecha,se podía presenciar una sala con televisión plasma,tres sofás tamaño mediano color rojo,alfombras blancas y suelo de madera oscuro,y en una de las paredes un enorme ventanal con cortinas blancas.Pasando una puerta de vidrio,se encontraba la habitación,esta tenía una enorme cama matrimonial con sábanas blancas,y pétalos rojos,con un respaldo del mismo color que el suelo,dos mesas de luz a ambos lados,al igual que pequeños espejos,y al lado izquierdo,dos puertas de vidrio por las que podías acceder al balcón,con dos sillas blancas,una mesa de cristal en el medio,y dos arbustos pequeños en las esquinas,en resumen,era el departamento de mis sueños.