Lindo juego.

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  Empezaba la mañana, me despertaba, me cepillaba los dientes y me vestí para irme a estudiar como lo hago siempre. Mientras mi mamá me preparaba el desayuno, y mi padre calentaba el motor del coche. Siempre en esa rutina me quedan uno 20 minutos para poder entrar en la PC, y ver que ah pasado. Un mensaje a que llega a esa hora no es nada normal, era mi mejor amigo hablándome sobre un "juego" de el cual medio mundo estaba empezando a jugar, como siempre me explicaba todo para estar al tanto: 

- ¡Vamos, hay que jugarlo!, se trata de el "choking game". Literalmente te mueres por unos segundos, y luego vuelves y debes decir que soñaste. ¿Lo hacemos hoy?

- ¿Estas loco, quieres que muera idiota?

- Deja de ser tan cobarde. Por eso no tienes novia pendejo...

- Ay si, el señor con novia ahora. 

- Pues no tengo, pero igual, intentemos...

- ¿Que, conseguir novia?

- El juego...

- No sé, luego vemos. Nos vemos allá. 

  Desayune, cerré mi sección y me fui tranquilamente al colegio. Al llegar como siempre me recibía ella. (No le había contado a mi mejor amigo, pero ñe. Ella, era mi novia. Llevamos poco saliendo, pero me gusta mucho realmente. 

- Hola cariño, ¿como estas?

- Bien, con algo de frió ¿y tu? - Dije mientras metía mis manos en los bolsillos de mi suéter favorito -

- Igual, con frió... 

  No sé, si a todos los hombres le pasara, pero bueno. A mi se me hace costumbre quitarme el suéter y dárselo a ella. A si este a bajo 0 grados lo haría. 

- Gracias, te adoro. 

- Yo igual... 

  El timbre de las 7:00 a.m sonaba, y mientras yo y ella subíamos por las escaleras que nos dejan frente al gigantesco pasillo que conecta todos los salones de bachillerato, y a uno de 3er año. Ver a todos correr, y caminar era un poco tranquilizante para mi.

- Bueno, luego te veo. 

- Esta bien...

  El cambio de sección que pedí a salir de 4to año me dejo en la A, y ella quedo en la B. Algo que posiblemente ayudo a que siguiéramos para tener esta relación. Tras un beso, y ver como entraba al salón, al voltear me sorprendí. Pues el asqueroso de mi amigo estaba viéndome desde dentro del salón, describir su mirada creo que no es posible, pero se la imaginan...

- Oye, ¿que haces con ella?

- Pues nada. - Dije mientras me sentaba -

- Si claro...

- Siéntate... 

- ¡SE SINCERO CONMIGO, DIME QUE ME CAMBIASTE POR ELLA!

- Oye, deja tus homosexualidades para otra ocasión, nos están viendo.  

- ¡Y A MI QUE ME IMPORTA QUE NOS VEAN, DIME LA VERDAD!

- Ah, ve a joder a otro. 

  Tras esa extraña discusión y algunas horas luego: 

- Oye, ¿vamos a hacerlo o no?

- No tengo condones...

- Deja, enserio. 

- No lo sé, ¿como es? - Dije tratando de seguirlo -

- De tal manera, debes respirar profundamente 10 veces, y en la décima te levantas sosteniendo el aire, sin votarlo. Luego alguien te empuja contra la pared, solo que en mitad del pecho. 

- Eso suena muy peligroso...

- Ná, ¿lo intentamos? 

- No lo sé, tengo una idea.

- ¿Que?

- Oye, Arturo. Todos sabemos lo suicida y loco que eres, ¿estoy o no en lo cierto?

Arturo: Pues si, ¿que quieren que haga?

- ¿Sabes que es el choking game?

Arturo: Pues no, pero bueno. ¿De que trata?

  Tras explicarle 3 veces a el y ahora al grupo que se había formado entre estudiantes de ambas secciones, y que todos me empujaran a hacérselo ya que era "el mas fuerte".

- ¿Listo?

  Arturo: No me mates bro. 

- Bueno, ahora...

  Arturo empezó a respirar, y todo mundo ahora contaba de una manera algo inspiradora. 8, 9, 10. El se levanto y aguanto la respiración, y ahora yo ponía mi mano derecha en su pecho, y empujaba mientra mi mano izquierda ayudaba a seguir... Mientras lo hacia me percate de su cara, y los ojos que ahora veían el techo empezaron a cerrarse.

- Se fue, dije mientras dejaba que su ahora pesado cuerpo cayera en mi hombro. 

  Poniendo despacio en el suelo, y esperando con mirada fría a ver que sucedía... Impresionante mente todos se callaron, y un increíble silencio recorría el salón. 

- ¿Y ahora que? - Dijo alguien detrás de mi -

  Arturo empezó a convulsionar, y luego de 2 movimientos bruscos abrió los ojos, y vio con mirada perdida a todos. 

Arturo: ¿Que paso?

- Volviste, ¿que viste?

Arturo: Ayúdenme a levantarme, no siento la quijada. 

- Ya, ¿todo bien?

Arturo: ¿Que mierda me hiciste?, vi a mi abuelo, que loco esta esto...

 Ahora las risas controlaban la situación, pero algo dentro de mi decía que esto estaba mal...

En otra dimensión.Där berättelser lever. Upptäck nu