Ella no es lo que parece.

15

Neftalí.

Los días han pasado, y yo creí que Chanyeol estaba enamorado de mí. Pensé que por un instante él había correspondido mis sentimientos pero lo único que ha hecho es mírar a la rara de mí hermana. Siento un coraje, de tan solo pensar en ellos juntos.
Él es el hombre que quiero y que verdaderamente amo.

Era raro, ya que en estos días en el instituto no me topé con mi hermana, ni si quiera en casa. Sabía que le gustaba estar sola, pero me gusta que esto este pasando. Así Chanyeol se ha concentrado en mí. Estuvimos juntos y platicamos animadamente. Todo como lo era antes de aquel baile.
Aún así me había preocupado el no ver a mi hermana. Pregunté a los chicos con los que compartía clases sí la habían visto y lo que me dijeron fue que no faltaba a las clases, pero no sabían a donde iba despúes.

Llegué a casa y le pregunté a mamá sí la había visto, a lo cual negó. Subí a mi habitación a realizar las tareas y estar en redes sociales. Bajé a comer y compartí con mi mamá una pelicula. Hasta que llegó alguien que no esperabamos.

Mi padre.

Nos saludo y nos estuvo contando de los negocios y el viaje que hizo, los lugares que visitó y los multiples platillos que saboreo. Mamá nos dejó solos para preparar la cena.

-¿Qué tal te ha ido en la escuela?

-Muy bien padre, me he esforzado mucho y he logrado entrar en la lista de los de mejor promedio.

-¿Qué puesto ocupas?

-Soy el tercer lugar del instituto, papá.

-Oh ya veo -volteo observando la casa- y dime ¿dondé esta tu hermana?

-No lo sé-Bajé la mirada- estos días no la he visto en casa y mucho menos en el instituto.

-Eres su hermana mayor, tienes la responsabilidad de cuidarla. ¡¿Cómo diablos no vas a saberlo?!- gritó muy enojado.

-Eh.... yo- balbucé la verdad era que no quería verlo a los ojos, sabía que en cualquier momento me mataría con esa mirada. Si a algo le tenía miedo era a mi padre enojado.

-Llegué. -Anunció _______.- Oh, papá ¿qué estas haciendo aquí?

-Hija -mi padre se paró a abrazarla y darle un sonoro beso- ¿Cómo estas? ¿De dondé vienes?

-Estoy bien pa, vengo del entrenamiento. Y ahora dime ¿Por qué Neftalí esta así? -me señaló.

-Le grité porque no sabe donde estas, son hermanas. No es posible que ella no te cuíde.

-Papá, ya no somos pequeñas y tranquilo, no tienes porque regañarla. Ya sabes como somos ambas. Además sabes que me gusta estar sola.

En estos momentos quiero a mi hermana por defenderme de papá. Ella es la única que puede calmarlo.

-Ok, esta bien, hija. Neftalí me dijo que hay una lista de los mejores promedios en el instituto. ¿Estas en esa lista?

-Sí, primer lugar.

-Esa es mi hija -la abrazó - ahora vete a bañar, pronto estara la cena.

-Bien.

Yo me paré y me fuí a mi habitación. Quería olvidar esa escena, así que le llame a mis amigas.
Era tormentoso ver el cariño que nuestro padre le demostraba más a mi hermana que a mí.