Call Me Daddy || JinGyeom

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—Pasaré por ti. —BamBam habló desde el teléfono a su amigo YuGyeom para así avisarle que ambos se irían juntos a la fiesta.

Los dos habían terminado su jornada hace una hora, y fue el suficiente tiempo como para volver a casa, ducharse, ponerse una ropa un poco adecuada para la ocasión y cargar un poco sus celulares ya que tenían baja batería.

YuGyeom antes de salir del trabajo seguía insistiendo a BamBam con que no quería ir, y nuevamente repitiéndole por milésima vez que si su amigo iba a aplicarle la ley del hielo, se la quitaría así como había hecho antes.

El menor no tenía ganas de pasar el rato en una fiesta donde ni siquiera conocía a alguien -a excepción de BamBam- y quería aprovechar el día como se lo tenía merecido después de haber estado parado detrás de un mostrador preparando cafés o recibiendo el dinero de las personas que pagaban por este. Pero era BamBam, su mejor amigo y sabía que si lo decepcionaba le diría su típico "primero es la amistad, Yugyeom." así que por eso no se inmutaba a hablar y hacer una queja al respecto de eso.

—¿Vendrás por mi? —preguntó sorprendido. —¿Acaso mi mejor amigo tiene un coche y en el pasará por mi?

Al mayor le causo un poco de gracia su comentario al igual que un poco de pena.

—No te crees ilusiones, Yugyeom. No sé ni conducir. —contestó un poco avergonzado. —Pero no, pasaré por ti caminando, así ambos llegáremos juntos a la fiesta. Últimamente hasta tomar el metro te sale muy caro. Y sería muy tonto que gastáramos millones para un lugar al cual sólo iremos dos horas.

—¿Porqué me quieres allá? —cuestionó YuGyeom ignorando todas las palabras del mayor. —Te invitaron a ti, no a mi. Haré un mal tercio si tu amigo ve caminando a un completo desconocido por su departamento.

—Él dijo que podía llevar a más personas. —respondió. —Además, te conoce, por fotos pero lo hace. Y es un completo chico que no se da cuenta de lo que sucede a su alrededor, podrían entrar a robarle y él no pela ni un ojo. Así que el verte por ahí será lo de menos.

—BamBam, aveces no confío en tus palabras. Así que espero que al menos le llames a tu amigo y le digas que iré, no quiero quedar en ridiculo.

—Yah~ no te preocupes, le diré a Jackson. —rió. —Ahora, debes de estarte cambiando, son las seis y media, y al menos debemos llegar allá a las siete diez.

—Esta bien. —bufó. —Te veo en un rato. —colgó sin esperar que el mayor hable.

Estaba lo suficientemente enfadado con él como para oírlo articular una palabra más. Ya tendría suficiente con verlo parado delante de su puerta criticándolo por las pintas que llevaba como "vamos a una fiesta Yugy, no a un parque de diversiones o a hacerla de payasos."

Le quería pero algunas veces odiaba guiarse mucho por él como oír las palabras respecto a su forma de vestir y volver a su dormitorio y cambiarse una vez más.

Eran muy unidos, que han sido muchas las veces en las que ambos de sus padres les preguntan si son pareja o algo así, y que lo si eran, no había ningún problema ya que siempre lo sospecharon.

Y el ser tan unidos traía las consecuencias de YuGyeom haciendo caso a cualquier cosa que decía o pedía BamBam.

Sí, básicamente por aquellas razones el menor se encontraba buscando entre su closet ropa adecuada y zapatos no tan espantosos para acompañar a su mejor amigo a una fiesta y no fallarle.

***

Apenas faltaba pasar por unos pasillos y la música ya estaba entrando por los oídos de ambos chicos, cosa que hacía que a YuGyeom le pasara por la mente el salir corriendo de ahí y escaparse de la ciudad para que BamBam no lo pueda encontrar ni menos reprochar el porque lo había dejado solo en aquella fiesta.