CAP. 9

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—Sí, sí fue lindo— dijo cruzándose de brazos —Pero lo siento cariño, no entras— abría y cerraba su mano como despidiéndose.

—Entiendo que tengas miedo de que llegue a ser mejor que tu— tenía que provocarla para que me dejara entrar

— ¿Mejor que yo?— fingió indignación —Si claro— agregó con sarcasmo

—Lindsay no eres la única que puede decidir quién entra y quién no— Volteé hacia atrás de mí, y me encontré con la entrenadora de las porristas. —Es buena... ¿por qué no quieres que entre?— le preguntó

—Si Lindsay ¿por qué no quieres que entre?— agregué

—Todas estamos de acuerdo en esa decisión, (tn) no entra— afirmó con mucha seguridad — ¿Cierto chicas?— les preguntó con una mirada de 'Si me contradicen, mueren' Todas se miraron entre sí, poniéndose de acuerdo sobre que decir. Excepto sus 'clones' quienes en automático corearon un 'Si estamos de acuerdo'.

—No— todas voltearon -incluyéndome- hacia donde provenía la voz de la valiente chica que había contradicho a Lindsay — Es buena y debería de entrar— opinó... ¿Ana?.

—Cállate si, eres nueva no tienes derecho de opinar aquí— le dijo furiosa

— ¡Lindsay!...— la reprendió la entrenadora

—Si yo también creo que debería entrar— agregó una rubia y después de estos más votos a mi favor se escuchaban a coro.

—Entonces no hay nada más que decir, (tn) está dentro— informó la entrenadora y se dio la media vuelta.

—Pero Alexandra...— la siguió Lindsay después de mirarme furiosa, solo le sonreí victoriosa. Lindsay caminaba desesperada tras de la entrenadora.

—Gracias chicas— les dije seriamente, si había que agradecerles pero tampoco quería que pensaran que estaba tratando de socializar con ellas. —Gracias Ana.

—No es nada, eres buena merecías entrar— dijo como si nada, me acerqué a las gradas y tomé mi bolso.

Caminé un poco alejándome de todas y volteé hacia las gradas donde todos me miraban esperando noticias. Con una enorme sonrisa puse ambos pulgares hacia arriba indicándoles que había entrado. Seguido de esto todos se pusieron de pie y gritaron en voz alta '¡Eeh!' Todos bajaron corriendo hasta llegar a mi lado.

— ¿Y por qué quieres ser porrista?— preguntó Erick

—Para que preguntas idiota, si tú le diste la idea— lo regañó Chris

— Solo fue un comentario que hice por el grito que dio en el partido.

—...pero ¿algún plan debes de tener no?— preguntó Erick mientras que Chris solo negaba con la cabeza

—Algo así...— sonreí.

Caminábamos hacia el estacionamiento cuando Lindsay se paró frente a nosotros, cruzándose de brazos con sus enormes pompones de color naranja con blanco.

— ¿A donde crees que vas cariño?— preguntó con toda la hipocresía del mundo.

—A mi casa— le contesté usando el mismo tono

— ¿Qué no se supone que querías ser porrista? Ahora a entrenar— me indicó

— ¿Ahora?— pregunté con asco, la verdad no tenía ganas de quedarme

—Si ahora, el siguiente partido es en unos días y no dejaré que lo arruines— bien ahora que lo pienso ya no quiero ser porrista. –Valdrá la pena- mi perversa mente me motivó.

—Entonces nos vemos chicos— me despedí con una sonrisa

—Suerte— me abrazó Chris y me dio un beso en la frente. No se te ocurra hacer enojar más a Lindsay —me dijo al oído.

Más vale que valga la pena, porque no es nada sencillo, llevábamos una hora completa sin dejar de practicar las mismas rutinas. Ya me las había aprendido al derecho y al revés pero Lindsay insistía en seguir practicando. Seguramente solo lo hacía para hartarme y que saliera huyendo, y tengo que aceptarlo que si lo pensé al inicio. Pero ahora no le daré el gusto.

La formación era un triángulo, la punta obviamente era Lindsay las dos siguientes eran Leslie y Leigh que parecían no tener vida puesto que se la vivían copiando todos los pasos de Lindsay. Las tres siguientes no tengo ni la menor idea de cuáles eran sus nombres ya que Lindsay se refería hacia ellas como 'Tu'. Y finalmente las últimas cuatro eran otro par de 'Tu', Ana y finalmente Yo. Ana era discriminada por ser 'la nueva' y yo por simplemente ser odiada por Lindsay.

— ¿(tn)?— preguntó Ana algo insegura

— ¿Si?— le contesté mientras seguíamos con la estúpida rutina.

— ¿Tú... tú tienes algo con... con Chris?— volteé a verla sin detener mis movimientos.

—Así es— le contesté segura y vi como bajaba su cabeza desilusionada —Una muy buena amistad— agregué y rápidamente volteó su mirada hacia mi —...Es como mi hermano— aunque hubiera sido divertido decirle que Chris y yo salíamos, para cobrarme lo que me había dicho y que ahora de verdad tuviera motivos para decirme que no me metiera en su vida, no lo hice. A Chris le interesaba y además de no ser por ella, mi plan de entrar a las porristas hubiera sido frustrado, digamos que le estaba pagando el favor.

Voten y comenten please.

Espero les guste.

~•Pensando solo en mi•~ Joel Pimentel (CNCO)Where stories live. Discover now