The Exception||Pennywise [Bill Skarsgard]

Capitulo 151.

🎈Capitulo dedicado a Pris1726 espero te guste linda, gracias por siempre leer😄🎈
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—Amor la comida ya esta lista.
—Ya voy.

Dijo él regalandole una pequeña sonrisa para luego ponerse de pie y caminar detras de ella hacia la cocina para poder cenar tranquilamente los cuatro en familia.

Para cuando terminaron Ethan y Oliver increiblemente acabaron teniendo una tranquila charla en la sala, entre que Mary aprovecho el momento a solas con su hija en el dormitorio de esta para poder conversar sobre lo ocurrido ese mismo dia temprano.

—Cariño sigo insistiendo en que los ojos de Emily cambiaron de color esta mañana.
—Má puede ser, pero no te asustes, tal vez es como esas personas cuyos ojos cambian de color de vez en cuando.
—Conozco a esas personas pero jamás cambian tan drasticamente. Sus ojos eran azules y brillaban, te lo juro.
—Mamá hablare con el pediatra sobre esto, le consultare pero dudo que sea algo malo—aseguro Evie mientras terminaba de amamantar a su beba.

—Genevieve yo siento que me estas ocultando algo—soltó Mary—Y me duele porque jamás tuvimos secretos, y que me ocultes algo ahora y más que pueda relacionarse con Emily, me duele realmente.

—No es nada má, de veras. Si estuviese sucediendo algo te lo diria, pero no es nada.

Mintió desde luego haciendo una mueca después, para luego acomodar a la pequeña Emily en el centro de la cama y luego recostarse ella a su lado.

—Mañana seguimos hablando mami, aprovechare a descansar un poco ahora que se durmió.
—De acuerdo Evie. Buenas noches.
—Buenas noches má.

Musito la joven Marshall cubriendose con las sabanas, y abrazando a Emily disponiendose a dormir antes de que la niña volviese a despertar.

Ethan por su parte, apenas termino la charla con su suegro se dispuso a regresar a su dormitorio para poder dormir. Se acosto con cuidado de no despertar ni a Emily, ni a Evie pero al acomodarse se percato de que esta última continuaba despierta.

—¿No puedes dormir?
—Dormi quince minutos y desperte nuevamente—respondió esta con seriedad.

—¿Que sucede amor?
—Es mamá, ella volvió a preguntarme sobre los ojos de Emily.
—¿Que le dijiste?
—Que tal vez es como esas personas cuyos ojos cambian con el clima, no lo sé, que le consultaria al pediatra. Le dije cualquier excusa pero desconfia.
—Tranquila Evie, ellos se irán mañana, solo hay que hacernos los tontos hasta mañana y luego fin del problema—aseguro su novio acariciando su brazo, el cual estaba abrazando a Emily.
—No, no es hasta mañana Ethan porque ellos regresaran.

—Si pero no será hasta el siguiente fin de semana, con suerte hasta el siguiente a ese. Ellos se olvidaran, no tienes de que preocuparte—garantizo intentando calmarla—Y sino les decimos todo. Sabes que por mi no hay problema con eso.
—Lo sé.
—Pero tú si tienes problema ¿verdad?
—Sé que no debo pero no puedo evitar sentirme mal ante la sola idea de que ellos nos rechacen,o peor aun, que rechacen a Emily—expreso con amargura la joven Marshall.
—No tienes que pensar en eso mi amor, yo comprendo tu temor pero no quiero que hagas de esto un problema. Tú misma lo dijiste cuando discutimos sobre tu posible cambio, o el de la niña. Ahora sabemos que ella si es como yo, entonces no lo convirtamos en un problema, disfrutemos de estos momentos de paz que estamos teniendo, y de Emily, de esta etapa que tú misma dijiste dura muy poco, entonces enfoquemonos en eso, no demos importancia al resto.

Indico acariciando su rostro para darle un pequeño beso y luego disponerse a dormir los tres juntitos y abrazados.

[...]

A la mañana entrante Evie estaba cambiando a Emily mientras que Ethan estaba en su forma de payaso entreteniendo a su hija para que no llorara mientras le cambiaban su ropita. Era extraño ya que la niña en lugar de asustarse como cualquiera creeria, sonreía mucho al verlo, como si realmente comprendiera que ese payaso no es otro que su padre.

—Si tengo que ser sincera creí que demoraria un poco más en aceptarte con esa cara de payaso asesino que traes—comento Evie soltando una carcajada.

—Pues con esta cara de payaso asesino te enamore asi que no me puedo quejar—replico el ente sonriendo satisfecho.
—Tonto—rio la joven Marshall.
—Cariño apresurate asi desayunamos todos juntos antes de irn...

Se escucho en la puerta y al voltearse divisaron a Mary, que llevaba una expresión de espanto al ver al payaso junto a su hija y su nieta.