2

49.9K 4.7K 3.4K
                                    

Aquella noche Draco durmió bien. Una que otra imagen le aturdió pero eso no significaba que eran recuerdos de la guerra, al contrario eran recuerdos algo borrosos de su noche "alocada".
A la mañana siguiente se preguntó quién podría ser esa chica, no es que la quisiera buscar o algo así. Tan solo... Tenía curiosidad.

Se ducho y camino junto a sus amigos al gran comedor.
Pansy tenía la duda de ayer. Pues ella le había dicho más que nadie, que despejar la mente era bueno. Pero Draco no volvió a la hora acordada, sabía que había vuelto demasiado tarde o demasiado temprano.

Cuando se sentaron en la mesa de Slytherin Pansy miró al rubio.

—¿Qué sucedió? —Le preguntó, Draco no comprendió a que se refería. — Ya sabes, lo de anoche. No llegaste a la hora acordada.

—Ah. Bueno sucedió algo genial pero no es de tu incumbencia.

Pansy lo miró con los ojos entre cerrados. ¡Lo sabría de todas formas!

En la mesa de Gryffindor faltaba alguien. Harry, había decidido dormir solo un poco más, solo que a diferencia de su usual pereza ahora era un sentimiento mucho mayor. Cuando supo que ya no podía seguir de vago se levantó, sintiendo sus músculos doloridos, se encontraba cansado.
Pero al menos el otro tipo de dolor que había sentido, había por fin cesado.
Soltó un bostezo cuando se sentó junto a Ron, Hermione se le quedó viendo, ella estaba al frente.

—Buenos días. —Dijo ella.

—Buenos días. —respondió Harry.

Rápidamente los chicos se encontraban en clases de pociones, con Severus. Harry jamás podría ir lo suficientemente bien en esa materia, al menos ya no, porque al parecer no tenía el libro de el príncipe mestizo.
Estaban todos concentrados. Cuando a Harry le dieron ganas de ir al baño. Al principio creyó que no iban a ser tan intensas pero al cabo de unos minutos parecía imposible aguantar.
Comenzó a mover sus pies. Llamando la atención de Ron que estaba a su lado, Ron sintió que aquello era sumamente extraño.
Harry estaba sentado, y se movía en el asiento. Comenzó a simular saltos, moviendo solo sus pies.

—¿Estás bien? —Preguntó Ron. Poniendo toda su atención en su amigo.

—No. —Negó Harry. Nunca antes había sentido tantas ganas de orinar.

—¿Qué pasa? —Preguntó alarmado.

—Quiero ir al baño. —Susurró, mordiéndose el labio por la desesperación.

Ron arrugo la frente, no entendía tanto escándalo solo por ir al baño, aunque quizás las ganas de Harry eran demasiadas.
El profesor Snape miró a Potter un momento, ¿Ahora que rayos le pasaba a ese chico?

—Potter. —Habló, parado detrás de los chicos. Con las manos cruzadas. — ¿Qué le sucede? —Preguntó al ver la cara de sufrimiento del chico.

—Quiero ir al baño. —Susurró.

Severus lo miró desconcertado. Ron creyó que ese sería el fin de su amigo, solo que no hoy, la cara de Harry realmente alarmaba y esos saltitos que daba no ayudaban.

—Vaya, Potter. —Ordenó Snape, fruncido las cejas.

Harry se levantó de prisa del lugar y camino como nunca antes para salir del aula. Una vez en el pasillo corrió hacia los baños.

Malfoy había mirado todo desde su lugar, con una ceja alzada. Pues vio a Harry muy apresurado.
Pero dejó de tomarle importancia, Potter era asunto del pasado.

Harry por fin había descansado. Aunque le parecía realmente extraño tener tantas de orinar. Después de todo nunca le venían ganas a esas horas.
Cuando la clase término otro suceso atacó a Harry, un fuerte dolor de cabeza, el cual no era ocasionado por la cicatriz. Se sentía mareado. Era como si todas las cosas malas de pronto estuvieran arruinando su salud.

—¡Harry! —Chilló Hermione, sujetando a su amigo. — Realmente no estas bien. Hay que ir a la enfermería.

—Exageras, Hermione. —Harry soltó una risita.— Estoy muy bien.

—Amigo. No, casi te desmayas. —Habló Ron. Los tres chicos estaban en medio de un pasillo.

—Es cansancio. Simplemente estoy algo cansado. —Sonrió.

~~~

—¡Por Merlín, Albus! —Exclamó horrorizada  Minerva. — Ni siquiera se esfuerzan en esconderse mejor. Los retratos son chismosos, lo sé, pero hay cosas que ellos simplemente no dicen, ¡Pero estaba vez! ¡Que horror, que indecencia!

—Quizás la sala de menesteres al final, si es usado para cuestiones, no académicas.

—¡Albus! —Reprochó.— Si supiera quienes fueron los protagonistas de tamaños hechos. Los puntos menos a su casa serían suficientes para que no lograrán ganar la copa.

— Así es, pero, ¿Crees que signifique esto? ¿Será que al final algo extraordinario pasó? Si los rumores de los retratos son ciertos, querida. Algo grande va ocurrir en Hogwarts.

MacGonagall lo miró un momento totalmente desconcertada. Claramente no había nada que hacer, más que tomar ciertas medidas para que tales actos no se fueran a repetir otra vez.

~~~

Habían pasado unos muy extraños días. Todos se encontraban almorzando y Harry parecía no cesar de comer.

—¿Realmente te vas a comer eso? —Preguntó Ron extrañado. Harry le estaba quitando el puesto.

—Sí. —Sonrió, mientras seguía comiendo el pollo. Una tercera ración por cierto.

Hermione lo miraba como si lo analizará. Primero las ganas de ir constantemente al baño, los mareos y las ganas de comer. La verdad esos síntomas... Se le hacían conocidos. ¿Has leído acerca de los ciclos del embarazo? Cómo toda muggle, y como quizás toda bruja o mago, era muy sencillo reconocer a esas alturas cosas que en la juventud anterior, se ignorarían, pero Hermione Granger es perceptiva puede observar lo que otras personas no. Y vaya, ¡Nada se le escapa!

Draco desde la mesa picaba su comida con un tenedor, realmente no tenía muchas ganas de comer, una parte de el estaba hundida en recuerdos anteriores, otra sentía cierta repulsión ante los agradables aperitivos.  Hasta que su vista se posó en Harry. El idiota comía demasiado, tanto que por instante Draco sintió que se iba a ahogar.

Al sentir una mirada, Harry levantó su vista del plato. Fijándola en Malfoy.

—¡Hola! —Exclamó feliz, alzando unas de sus manos.  Luego de un momento todas las miradas estaban posadas en él.

¿Había saludado a Draco Malfoy?

Si, lo había hecho. Algo lo había impulsado a hacerlo, y también algo en su interior deseaba estar junto a Malfoy, porque al parecer ese idiota era importante para él.

Harry abrió sus ojos. Realmente debía ir a la enfermería. Estaba mal.

Serpiente En Apuros. |1|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora