Capítulo 40.

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Era un amante de primera al sexo duro y al masoquismo, por su parte, amaba tratarla mal y decirle cosas sin sentido, sucias que era lo que más le gustaba y ella no se quedaba atrás, amaba que Jimin hiciera eso, después del todo eso era lo que lo caracterizaba. La puso en cuatro y lamió su mano para lubricar su pene y sin previo aviso entró en ella haciendo que gimiera.

Tomó su cabello en una cola de caballo he hizo que su cabeza se fuera ligeramente hacia atrás mientras formaba con sus labios una fina línea intentando no gemir. Jimin empezó a gruñir en cada estocada, sintiendo el placer máximo por aquel hueco tan estrecho sin importar las veces que le ha dado sexo anal. Hizo presión en su trasero y besó su hombro para dar comienzo al sexo, una partida de sexo.

La cama hacia el típico sonido cuando una pareja tiene relaciones pero a ella le era inevitable el no gemir, haciéndolo sin importar que tenían unos hijos los cuales estaban durmiendo. Su lado psicópata salió a luz cuando empezó a darle nalgadas hasta dejar morados, la estaba penetrando sin piedad alguna.

-¡Esta noche te dejaré mal del culo!- gimió y dio una nalgada para seguir con sus duras y rudas embestidas. Ella simplemente mordió su labio inferior y se apoyó sobre sus codos, sintiendo como el pene de Jimin la hacia ver cosas.

Sus testículos pegaban tan fuerte en su trasero que el sonido que empleaba era descomunal, miles de maldiciones salían por la boca de ambos. -¡Quiero venirme las veces que yo quiera, maldita!- fueron las dulces palabras que Jimin le dijo al oído al sentir que estaba a punto de tocar el cielo.

Salió rápidamente para hacer que ella estuviera sobre él, dándole la espalda empezó a cabalgar frotando su clítoris a la par que el pene de Jimin entraba y salía. Una mano se encontraba en su vagina, dándose más placer del que ya estaba sintiendo y la otra sobre el pecho de Jimin para no caer. Llevó su mano a la boca y la lamió y nuevamente empezó a frotarse.

-¡Me encanta, sigue así!- bañada en sudor quitó algunos cabellos que se encontraban en su cara. Dejó de moverse y puso ambas manos en el pecho de Jimin, este elevó sus caderas y empezó a meter más rápido su pene y hacer cada embestida más profunda. Llevaban treinta minutos teniendo sexo que pensaban seguir toda la santa noche.

-De todas las mujeres con las que he estado tú has sido la única que me vuelve loco y me hace venir en instantes- detuvo sus embestidas para decirle eso al oído. -¿sabes qué significa?- apretó uno de sus senos mientras le besaba el cuello. -¡qué esta puta noche te partiré en dos y me harás sentir el puto amo!- le tiro levemente del cabello y nuevamente empezó a moverse.

-¡Hmm! ¡Me encanta cuando me hablas sucio, me excita más de lo que ya estoy!- como si estuviese haciendo una presentación de twerk empezó a moverse siendo una ducha en en tema, haciendo que por milésimo vez Jimin gimiera tan alto y le pegara más duro que las otras veces, ella complace a su hombre en todo lo que él necesite.

Una nueva posición iban a probar, estando ambos de lado froto su pene contra su vagina y lo metió para seguir dándole toda la noche mientras que sus manos traviesas apretaban sus senos como si de dos bombas de agua se tratasen y, es que sus senos no eran normales, eran grandes al igual que su culo. Le tapó la boca con una mano tras presentir que iba a gemir pero seguía moviendose para no perder el ritmo que llevaban.

-¡Solo yo puedo darte sexo!- gimió en su oído. -¡Joder, estás apretada y eso me encanta!- la tomó del mentón y le metió la lengua para besarla y hacer con su boca su propio escenario.

Una hora exacta llevaban teniendo sexo, cambiando de posición cada diez minutos. Salió rápido de ella y se levantó de la cama, cogió su pene y dio unas dos masturbadas para que saliera el semen,_____estando sobre la cama se puso de rodillas y sacó su lengua para recibirlo gustosa. A los pocos segundos empezó a salir cayendo en su boca, cara y parte del cuello, quitando el semen de su rostro con los dedos para meterselos luego a la boca y probar lo mejor de la noche.

-Te amo- y sin importar que aún tuviese algo de esperma en sus labios lo besó metiendo su lengua para jugar con la de él. -¡Eres el maldito de mi esposo que me da sexo todos los días!- le susurró sobre su boca.

-¡Y tú eres mi maldita esposa que me tiene loco! ¡La única que me hace sentir bien en la cama y por fuera de ella!- la agarró del cuello y la besó con autoridad, aclarado una vez más que_____era solo de él.

-A ratos se nos olvida que tenemos hijos- comentó ella con la respiración agitada. -Pero eso no quita a que me penetres todas las noches-.

-Muy seguramente mañana me meteré al baño y empezaré a masturbarme pensando en el buen sexo que acabamos de tener- habló Jimin besando los labios de_____.

-¿Necesariamente tiene que ser mañana?- interrogó coqueta jugando con mechones de sus cabellos.

-Es mi turno de que te vengas en mi boca, tú ya hiciste tu parte- habla Jimin y se pone encima de ella dejando su peso en los codos. -Y créeme que de ti no tendré piedad.

#3 ¿quieres jugar? ©park jimin.Onde as histórias ganham vida. Descobre agora