Saúl entra en escena, parte 2

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de Samuel 9: 17-27.

Y luego que Samuel vio a Saúl, Jehová le dijo: He aquí éste es el varón del cual te hablé; éste gobernará a mi pueblo. Acercándose, pues, Saúl a Samuel en medio de la puerta, le dijo: Te ruego que me enseñes dónde está la casa del vidente. Y Samuel respondió a Saúl, diciendo: Yo soy el vidente; sube delante de mí al lugar alto, y come hoy conmigo, y por la mañana te despacharé, y te descubriré todo lo que está en tu corazón. Y de las asnas que se te perdieron hace ya tres días, pierde cuidado de ellas, porque se han hallado. Mas ¿para quién es todo lo que hay de codiciable en Israel, sino para ti y para toda la casa de tu padre? Saúl respondió y dijo: ¿No soy yo hijo de Benjamín, de la más pequeña de las tribus de Israel? Y mi familia ¿no es la más pequeña de todas las familias de la tribu de Benjamín? ¿Por qué, pues, me has dicho cosa semejante? Entonces Samuel tomó a Saúl y a su criado, los introdujo a la sala, y les dio lugar a la cabecera de los convidados, que eran unos treinta hombres. Y dijo Samuel al cocinero: Trae acá la porción que te di, la cual te dije que guardases aparte. Entonces alzó el cocinero una espaldilla, con lo que estaba sobre ella, y la puso delante de Saúl. Y Samuel dijo: He aquí lo que estaba reservado; ponlo delante de ti y come, porque para esta ocasión se te guardó, cuando dije: Yo he convidado al pueblo. Y Saúl comió aquel día con Samuel. Y cuando hubieron descendido del lugar alto a la ciudad, él habló con Saúl en el terrado. Al otro día madrugaron; y al despuntar el alba, Samuel llamó a Saúl, que estaba en el terrado, y dijo: Levántate, para que te despida. Luego se levantó Saúl, y salieron ambos, él y Samuel. Y descendiendo ellos al extremo de la ciudad, dijo Samuel a Saúl: Di al criado que se adelante (y se adelantó el criado), mas espera tú un poco para que te declare la palabra de Dios.
1 Samuel 9:17-27

Hasta acá, sabemos que Saúl no tenía idea de lo que estaba a punto de ocurrir ese día, pero Dios si.

Dios ya había preparado todo este encuentro: Saúl y su criado suben en busca de el " vidente " de Dios,  y ese vidente,  no era más que Samuel. El Señor le habia revelado un día antes a Samuel ,  quién iba a gobernar a su  pueblo,  y en efecto asi fue.

Esta última escena se desarrolla en muchas partes:

1. En la puerta de la ciudad.  Pasando por ella,  Saúl encontró a Samuel, y le pregunta por el vidente,  a lo que Samuel le dice,  " yo soy el vidente, la persona por la, que preguntas".

2. Samuel le hace quedarse hasta el día siguiente.

3. Le da satisfacción en cuanto a las asnas, para que ya no las busque más.

4. Le cuenta que le tiene deparada una gran sorpresa,  a lo cuál el responde con una " modestia " un tanto ridícula. Pensó que Samuel se pudo haber reído de el.

5. Entró a la fiesta pública.  Samuel llevó a Saúl y su criado,  ya no tratándolo como alguien común, sino como a alguien que tiene una distinción y cargo, para que el pueblo y el se prepararán para lo que debía seguir. Aquí hubieron dos señales de esto:
1. Lo colocó a la cabecera de los invitados.
2. Le reservó el mejor bocado.

6. Lo que paso entre ellos en privado.  A lo mejor le contó sobre todos los sucesos ocurridos días atrás,  y porque Israel quería un rey.  Hizo que el criado se fuera adelantado para, dar paso a lo que seguía.

Estamos a un paso de la coronación de Saúl, pero el carecía de muchas cualidades profundas todavía.  Dios,  en su gran Misericordia proveyó de un rey a su pueblo, escuchó su clamor y se los dió.  El era el elegido para gobernar a su pueblo. Así es con nosotros, provee de aquello que necesitamos.

Al principio,  Saúl dió la impresión de ser alguien humilde y modesto,  pero con el tiempo,  se descubre lo que hay verdaderamente en el fondo de nuestros corazones.

El gran papel de Samuel,  alguien digno de imitar,  y como este,  estaba ya en su rol como alguien importante dentro de la corte del rey.

Nota:

Gracias a, todos los que leen y comentan este libro, es un gran esfuerzo para mi estar capítulo por capítulo, pero siento doble recompensa : aprendo yo,  y a la vez que estoy leyendo por primera vez un libro entero de La Biblia,  y que ustedes aprendan,  que es lo primordial.  Oren por mi,  que Dios me de tiempo para continuar escribiendo, y no abandone estas historias, ya qué se vienen cosas y proyectos profesionales a futuro míos.

Dios les bendiga, y nos vemos en la coronación de Saúl.

Conforme al corazón de Dios _ Volumén 1( el origen) ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora