Beat of my heart | Sterek |

Capítulo 36

- Báñate tú primero. - le ordenó y el menor se metió sin mediar palabras.

¿Qué demonios intentaba hacer Stiles? ¿Por qué esa complicidad con Jughead? O peor aún... ¿Por qué escondérselo a él?

Stiles salió del baño bastante menos animado de lo que estaba hacía minuto. Sacó sus ropas del armario y se vistió volviéndose a poner la sudadera roja que lo tenía puesto en todo el día.

Hale soltó un bufido y se dirigió al baño con la toalla en la mano.

- Derek. - le llamó el castaño con su débil voz. El mayor apoyó la mano en la puerta y lo miró por encima de los hombros con una ceja levantada. 

- ¿Si? - preguntó impaciente.

- Ven. - le ordenó cuidadoso en medio de la habitación, el otro obedeció y se paró frente a él. - Te amo mucho, ¿lo sabías? - le dijo mientras sus ojos se llenaban de lagrimas.

- Yo también te amo, pero... - respondió sorprendido.

- Quiero que sepas que fuiste lo más hermoso que me pasó en la vida. - volvió a hablar dejando que las gotas que caían de sus ojos recorrieran sus mejillas lentamente.

- Stiles, cariño, ¿qué pasa? - preguntó asustado apoyando las manos en los hombros de Beta.

- Estoy muy orgulloso de lo que has logrado. Del gran Alpha que resultase ser... -

- Me estás asustando, Stiles. - le miró completamente confundido.

- No dejes que nadie vuelva a hacerte daño, ¿de acuerdo? - preguntó poniendo una mano en la mejilla de su novio.

Pero Derek apartó aquella mano de su mejilla con hastío. - ¿Qué hiciste, Stiles? - cuestionó frunciendo el ceño.

- No he hecho nada aún. - contestó metiendo una mano en el bolsillo de su sudadera, y al sacarla dejó ver una sustancia, un polvo de color negro en su mano.  

- ¿Cenizas de serbal? ¿Qué... ? -

- Perdóname. - susurró arrojando las cenizas al aire donde rápidamente calló al suelo dibujando un círculo perfecto alrededor de ellos.

- Stiles, no puedes hacer esto. - exclamó desesperado frunciendo el ceño.

- Tengo que hacerlo, Derek. Tengo que salvar a mi padre. - fue lo último que dijo antes de salir corriendo de la habitación.

- ¡Stiles! ¡Stiles! - gritó Derek con fuerza sintiendo que el aroma del castaño desaparecía poco a poco.

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Stiles bajó del jeep a toda velocidad luego de haberlo dejado mal aparcado. Corrió a la entrada y en cuanto vio a Melissa caminó a velocidad normal, le sonrió a la mujer y cuando quiso entrar al pasillo que llevaba a la habitación de su padre, la madre de Scott le sujetó del brazo.

- ¿Viniste solo? - le preguntó extrañada mirando a sus alrededores por si Derek estaba cerca.

- No... yo... Derek tenía asuntos que atender y yo ya me iré al cuarto de papá para ver como está. - mintió inocentemente.

- Esta bien. Pero aún es temprano, está con su médico en su atención de rutina. - avisó ella.

- De todos modos iré. - replicó él rascándose la nuca. Se zafó de la mano de la mujer, le sonrió forzosamente y se encaminó a la habitación.

Inoportunamente Melissa tenía razón y el doctor estaba hablando con su papá. Se quedó detrás de ellos y empezó a caminar en círculos con los nervios a flor de piel.