Capitulo 58.

19.7K 753 51
                                    

Capitulo 58.

Escuché unos pasos que venían hacia la habitación. Era Lauren... con su mirada baja y se situó frente a la cama, erguida.
Llevaba una chaqueta negra desgarrada y unos vaqueros iguales. Su chaqueta estaba abierta y solo traía su sujetador. Todo su abdomen tenía cortes que aún sangraban. Dejó caer su chaqueta al suelo, al hacer este acto vi sus manos cubiertas de rojo profundo, sangre.
No me miraba.
Y me mostró sus brazos, llenos de cortes, al igual que su abdomen. Estos llegaban hasta sus codos.

Lauren: ¡Esto me lo haz hecho tú!. -gritó.- ¡Me estás matando poco a poco! ¡Me estás matando!.

La sangre de sus brazos caía y se deslizaba hasta por la punta de sus dedos. El pliegue de su pantalón estaba empapado de sangre, la cual caía de todo el sector de su abdomen.
Levantó su cabeza y me miró fijamente, tenía sus ojos inyectados en sangre. El verde ya no existía en ellos, ahora sus ojos eran negros, completamente negros.

Lauren: Necesito acabar con este dolor que me estás causando.

De su bolsillo trasero sacó una navaja «lo bastante larga para atravesar y matar al instante» y se la colocó frente a su pecho. Me sonrió. La fue alejando un poco para tomar impulso, apretó su mandíbula y atravesó su corazón.

Desperté.
Ya era de mañana, el sol brillaba por entre la ventana.
Mi respiración era demasiado rápida, escuchaba mis latidos golpeando en mi oído.
Gotas de agua volvían a caer con la misma intensidad que ayer. Me llevé mis manos a mi rostro, cubriéndolo.

-Solo a sido una pesadilla. Nada más.

Me decía a mi misma para tranquilizarme. Ya no se encontraba Lauren para calmar y recordar que solo ha sido una pesadilla.. ya no está.

Mi pecho subía y bajaba, mi garganta se secaba. Estoy SOLA en un departamento que ni siquiera es mío.

Era hora de ir a la universidad, pero no quiero hacerlo, no puedo ir y fingir que todo está bien porque la persona que amo se ha ido. Nada de esto está bien.

Mi celular estaba a mi lado y dio un pequeño sonido. Sacudí mi mano para que dejara de temblar y lograr tomar el celular, en la pantalla tenía un mensaje. De Lauren.

Lauren: "No abandones, por favor. Debes ir a la universidad."

Que extraño, ¿Ella cómo mierda sabe que no quiero ira la universidad?.
Traté de llamarla, pero no contestó, así que le mandé un mensaje.

-"Solo quiero escuchar tu voz."

Lauren: "No te lo mereces. Ahora te levantas y vete a la universidad."

Estoy de acuerdo con ella.. no lo merezco, siquiera merezco que me esté contestando los mensajes.

-"¿Y si no qué?, ¿Qué harás, volverás?, no."

Lauren: "Está bien, si no fuera por mi tu estarías fuera de esa universidad, así que hazlo por el poco respeto que aún te tengo."

Realmente me odia.

-"Solo iré si me llamas."

Y así fue, Lauren en ese preciso momento me llamó.

Lauren: ¿Estás feliz ahora?.

-¿Por qué te fuiste?.

Lauren: ¿Tan hipócrita eres como para preguntármelo, Camila?.

-Debes volver.

Lauren: No. -alzó su voz.- aunque me duela mucho me olvidaré de ti. Ya no me importa esto, o al menos finjo que no me importa.

-Vuelve, te lo pido.

Lauren: No, haré lo mismo que tú me haz hecho.

-¿Qué harás?.

Estaba confundida, su voz era dura y... no quiere volver.

Lauren: Daño, eso haré, ¿Cómo?, sonreiré.. te dolerá porque lo haré y no será por ti. Quiero sentir esa sensación en la que luchan por tu amor. Como tu no lo hiciste.

Hice caso omiso. No quería creerlo.
Sus palabras son como cuchillos que atraviesan a mi corazón. Co.. como en mi pesadilla.

-Vuelve. Te necesito.

Lauren: No me llames más. Ahora como lo dijiste, vete a la maldita universidad.

Y eso fue todo. Cortó.
Debo hacerlo, "Por el poco respeto que aún tiene por mi". Me levanté y me dirigí al baño, mirándome al espejo.. no recordaba que Lauren lo había roto. Fui hacia la sala donde se encontraba uno.
Noté mi horrible aspecto, cabello alborotado, ojos rojos e hinchados, labios partidos y nariz roja. Me preguntaba cómo iría de esta manera, tomé una ducha y todo estaba mejor, a excepción de mis ojos.
Entrando a la habitación algo brilló en la esquina de la cama que encandiló mis ojos. Era su collar, lo tomé y la pequeña cruz se balanceaba.

«Es de mi madre, me lo dio antes de morir, es algo muy importante para mi.»

Recordé esas palabras, era algo muy importante para ella.. y ahora lo tengo yo, ella me lo ha dado. ¿Por qué lo ha hecho?.
No quiero perderlo, así que me lo coloqué. Debía saber el por qué del collar.

Nuevamente tomé el celular. La llamé.. a la llamada numero veinticuatro contestó.

Lauren: ¿Qué quieres ahora?.. mierda.

-¿Por qué me diste el collar..?, era de tu madre. ¿Por qué me lo diste a mi?.

Lauren: Mi madre me lo dio porque abandonaría a la persona que amaba y no podría protegerla. Me lo dio para que no me ocurriera nada. -hizo una pausa.- yo hice lo mismo contigo. -cortó.-

Dios mío. Lauren... la persona más tierna y hermosa del mundo... la he dejado ir.
Me sentía una pésima persona, tengo el collar de su madre. SU MADRE.

Me vestí como lo hacía todos los días.. cuando Lauren me esperaba en la sala con esa enorme sonrisa que aparecía al verme, con esos hermosos ojos verdes que brillaban día y noche. Aquella sonrisa y aquellos ojos... que ya no están.
Un escalofrío pasó por todo mi cuerpo cuando cerré mis ojos y traté de visualizar su rostro. La perdí, quizás para siempre.

-Deja de perder el tiempo, debes ir a la universidad.

Me dije a mi misma en un murmuro ahogado mientras caminaba hacia la puerta. Caminé treinta calles para llegar a la universidad.

Don't Forget Me. «Camren»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora