Capitulo 13.

36.2K 1.2K 133
                                    

Capitulo 13.

Habían pasado varias semanas, estaba comenzando a cambiar mi forma de ver a mi alrededor, ya que ahora no solo pensaba en lo malo que podía suceder. Ahora estaba muy feliz, ella me hacía y me hace feliz, pero aún existía esa pequeña necesidad de querer olvidar todo y perderme un poco, aún pensaba en cuanto quería droga, en cuanto la necesitaba.
Así que tomé una decisión apresurada y me dije a mi misma que hoy sería la última vez.

Salí a caminar a la orilla del lago, que quedaba prácticamente en el jardín de mi casa. Solo con el fin de poder tragar una pastilla y fumar un poco.
Iba al lago para no perder el control dentro de mi habitación, prefería estar al aire libre para no sentirme acorralada, porque esa sensación mientras estaba drogada era la peor. Debía sentirme libre. Ese era el punto.

Estuve pensando en cómo comenzó todo esto, cuando consumir droga se me hizo un tipo de necesidad, cuando lo volví algo esencial para mi vida.

Cuando me dejé caer en la arena, ya con mi cabeza dando vueltas y sintiendo la adrenalina. Comencé a sentirme culpable por haber hecho esto, así que sin pensarlo mucho le mandé un mensaje a Camila, dificultándome un poco al escribir.

-"Lo siento mucho, pequeña. Es la última vez, te lo prometo."

Camila: "No lo prometas, solo inténtalo, ¿si?. Te quiero mucho."

A penas terminé de leer las lagrimas cayeron por mis mejillas, porque era difícil pensar en que Camila fuera mi novia, que estuviera para mi, y es que era totalmente perfecta, ya que quería ayudarme a pesar de todo y yo solo la defraudaba.

-"Camz... ya no quiero decepcionarte."

Camila: "No lo has hecho, pero si llegas a hacerlo no me alejaré de ti, te prometí que te ayudaría."

Con ese mensaje me levanté de la arena, algo lento para decir verdad, y caminé de vuelta a mi casa, tomándome mi tiempo para no marearme demasiado.
Entré a mi habitación y comencé a dibujar. Las facciones de la sonrisa.. los ojos color chocolates, estos los repetí muchísimas veces. Los borrones estaban por todas partes, porque realmente la perfección que era ella no podía dibujarse.

Cuatro horas más tarde dejé el dibujo a un lado, no había quedado de maravilla, pero lo hice, lo terminé cerca de las seis de la mañana.. y en unos quince minutos más tenía que alistarme para ir a la escuela. Ahí supe que no sería un muy buen día.

No pude siquiera cerrar los ojos unos cinco minutos, así que terminé por darme por vencida y decidí tomar una ducha rápida.
El agua estaba bastante fría, sentí como mis músculos se contraían y eso me hizo calmarme un poco, estaba muy exaltada, no sabía si era por la droga ya que aún no pasaba del todo o era que tenía mucho sueño y no logré cerrar los ojos en toda la noche.

Salí de la ducha, me alisté y bajé a tomar desayuno.
Encontrando a Michael bebiendo su café de todas las mañanas, pero no le presté mucha atención.

Michael: Lauren.. -miró mis ojos con duda.- ¿Estás bien?.

Michael era mi padrastro, el marido de mi madre «ex marido.», solo duraron dos escasos años, pues mi madre había muerto.

-Si, estoy bien.

Michael: ¿Has dormido?, tienes los ojos rojos e hinchados.

-No, estoy muy cansada.

Michael: ¿Irás a la escuela?.

-Claro que sí.

Michael: Está bien.. -suspiró.- No quiero que me llamen por tus problemas. No otra vez.

Don't Forget Me. «Camren»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora