Una Nueva Vida (Cancelada)

Capítulo 15: tan importante

Luego de un rato ya estaba haciéndose de noche, por lo tanto tenía que irme, al levantarme de la cama Momo enseguida me sujeta de la mano, la miro sin comprender su acción.

Yo: Momo, me voy, mañana vuelvo – su única respuesta fue abrazarme, me rodeo con sus brazos el cuello impidiéndome apartarla – Momo, necesito un baño ¿acaso no apesto? – Ella sólo movía su cabeza en modo de afirmación lo cual me causaba gracia y ternura en cierto modo, no sé qué me está haciendo, yo nunca fui alguien el cual se enterneciera ni mucho menos, pero ella era distinta – déjame ir a bañarme y vuelvo ¿quieres? – Volvió a asentir pero sin soltarme aún – no tardo – le susurré mientras le doy un beso en la frente, es como una niña, aunque sé que no lo es, de cierta forma me hace recordar a mi hermana. Al levantarme ella me dio sus llaves y se volvió a acostar. De camino me quedé pensando cómo decirle de mi trabajo, no me gustaría que le digan cosas mis fans, aunque quiera a todos mis pambisitos sé que hay algunos que están locos, al llegar a casa puse a subir uno de los videos que siempre tengo por las dudas guardados en caso de que no pueda hacer a tiempo, en momentos como éste siempre sirve, espero mañana poder explicarle mi demora al subir videos. Me bañe, me vestí y volví a salir hacia el departamento de Meri.

Al regresar al departamento volví con unas pizas y helado para cenar, una vez que abrí la puerta pude ver a Momo acostada con el celular.

Yo: Adivina que tengo – alce la voz para llamar su atención, ella volteo su cabeza en mi dirección y en un segundo en su cara ocupaba una enorme sonrisa, salto de la cama como si fuera una chiquilla, y me recibe con un efusivo abrazo – se ve que me extrañaste – dije riendo.

Momo: ¡Helado! – dijo con una voz demasiado ronca, aún se encontraba inflamada pero al menos ya podía hablar.

Yo: Suenas como ET jajaja – sin poder evitar partirme de la risa por la cara que puso, tomo el helado, una cuchara de la cocina y volvió a la cama sentándose a comer, sin siquiera esperar para dejarlo de postre – espera glotona, aquí está la cena, eso es el postre – sólo respondió mostrándome la lengua – anda ya, luego comes todo el helado que quieras, te hará mal – finalmente termino accediendo.

Luego de comer, nos acomodamos para el postre, en la cama mientras mirábamos un poco de tele basura, bueno, miramos en un decir ya que Momo no dejaba el celular, y lo sentía vibrar a cada minuto y más escuchaba sus pequeñas risas haciendo un esfuerzo por contenerla, me imagino que era para no hacerme bulla, así estuvimos una media hora más hasta que termino lo que sea que había en la tv, la dejé encendida y simplemente me acosté, estaba exhausto, y no me tiraba en la cama desde el sábado en la mañana. Sentí como Meri se dirigía a la cocina a dejar las cosas y luego apagaba la tele, dejando solo la pequeña lámpara que tiene cerca de la cama y volviéndose a acostar, sin dejar el celular, luego de eso sólo me dormí.

Desperté sintiendo una presión, al darme cuenta de que el Meri quien me abraza, tengo todo su cabello sobre mi cara, huele a frutas, me quede un momento así, la acerqué más a mí y cerré los ojos intentando volver a dormir, pero mi mente tenía otros planes al parecer, no dejaba de pensar, ¿con quién se escribía?, tal vez solo era familia o amigos de Argentina, imagine todo lo posible para no pensar que era con Abraham, algo en él no me cerraba del todo, pero debía de querer a Meri por todo lo que hizo, si yo me hubiera quedado con el tipo lo hubiera matado literalmente, no lo hice sólo porque me detuvo su voz llamándome, su voz apenas audible, la pequeña lámpara seguía encendida y dejaba ver las marcas de las manos que ese sujeto poso sobre ella, por su garganta, los brazos, incluso tiene un moretón en la cara, me hierve la sangre de sólo recordar lo que le sucedió, estando en el mismo local y no pude cuidarla.

Unos movimientos provenientes de Meri me sacan de mis pensamientos, parece tener un mal sueño cuando noto una lagrima transcurrir por su mejilla, enseguida la despierto moviéndola suavemente y llamándola.

Yo: Shhh es un sueño Momo – digo mientras seco su lagrima con mi pulgar, en eso ella abre los ojos mirando a todos lados y a ninguno a la vez, hasta que se fija en mí, en un movimiento rápido se aparta y se sienta haciéndose un ovillo y hundiendo su cara entre sus piernas y brazos – no llores, ya pasó – le digo tratando de consolarla, acercándome despacio para abrazarla. Una vez a su altura ella se prende de mi cuello y llora, y la dejo, sé que necesita desahogarse, creo que al fin lo está procesado, se ha portado muy dura y fuerte hasta el momento.

Momo: Lo soñé, lo recordé – decía a voz rota, solo la abrazaba y besaba su frente, quería cuidarla y que olvidara todo, quería aliviar su dolor – no podía moverme, ni hablar – no podía por lo, no podría soportarlo, trate de calmarla meciéndola hasta que solo sentía su hipo pero ya no lloraba, la acosté de vuelta, busque un vaso con agua con la medicación para la garganta, luego de que la tomó afriqué la crema en su pie, para luego acostarnos. Acaricie su cabello lo que parecía relajarla hasta que volvió a dormir.

Como luego de tan pocos días una persona puede serme tan importante...