Capítulo 11: Sobreprotector.

54 12 5
                                    

Dalas:

Ya he grabado y editado un nuevo video para mi canal, y ya se me ha pasado toda la mañana, decido por comer algo y leer un poco de noticias. Viendo un poco los encabezados uno me llama la atención "GRAN OLA DE SECUESTROS EXPRES Y VIOLACIONES EN BARCELONA" di clic en la noticia y contaba que -últimamente una banda de malhechores vaga por loa ciudad creando una oleada de crímenes tales como secuestros exprés, abusos, robos y violaciones, la banda peligrosa mayormente actúa por las noches aprovechándose de los jóvenes indefensos- lo único que se me vino a la mente fue Meredith, debía cuidarla y protegerla, ella es demasiado inocente y no conoce a nadie aquí. Cuando me doy cuenta eran las cuatro de la tarde y decidí mandarle un mensaje a Meri a ver qué tal se encontraba, pasó una media hora y no recibí respuesta, tal vez se estaría tomando o tomando una siesta. Luego de quince minutos le envíe otro mensaje y tampoco respondió, tal vez estaba molesta y no quería hablarme, pero ni siquiera me marcaba como visto... Eran las seis de la tarde y nada entonces le mandé otro avisando que estaba preocupado que si no recibía respuesta la llamaría,, tal vez no tenía crédito y estaba exagerando todo pero esa noticia me hizo preocupar, estaba tratando de auto convencerme de que ella se encontraba bien y sólo estaba distraída. Pasó otra media hora y le llame, no atendió nadie. Buqué mi chaqueta tomé mis llaves y me dirigí a su departamento, estaba demasiado nervioso y preocupado, ojala sólo esté exagerando y ella esté bien.

Llegué a su departamento y no se escuchaba nada ni nadie dentro, supuse que no se encontraba, cuando le vuelvo a marcar escucho su risa a lo lejos pero no la veía, solo veía a un muchacho venir algo agachado y bailando torpemente hasta que noto que llevaba algo o mejor dicho alguien en su espalda y por las risas supe que era Meri, ¿qué hacía en la espalda de un desconocido? Bueno, tal vez no tan desconocido para ella si estaba tan a gusto con él. Cuando llegan recién ahí Meredith e da cuenta de mi presencia y me obsequia una gran sonrisa tan inocente que desconocía todo el sufrimiento psicológico que padecí al no saber nada de ella.

Meredith: Hola Dalas ¿qué haces aquí? – bien supongo que no vio ningún mensaje mío.

Yo: Hola, te mandé y no contestabas y tampoco la llamada y me preocupe – veo quien la acompañaba quien sólo miraba a otro lado, incómodo - pero veo que estas bien – pude notar como su cara cambio a sorpresa y a una sonrisa tan tierna, podía ver un brillo en sus ojos.

Meredith: Nunca escuché a mi móvil – sacó el móvil de su bolsillo y que luego se golpea en la frente, luego al fin se bajó de la espalda de su acompañante – Perdón, olvide de ponerle volumen al celu después del cine, perdón por preocuparte pero eme aquí estoy bien – bien, entonces todo fue culpa de mi imaginación, al menos ya puedo respirar aliviado.

Yo: no hay problema, lo importante es que estas bien. Bueno adiós Meredith – me di la vuelta pensando irme, ella estaba ocupada y estaba bien.

Meredith: ¡No! no te vayas, porfa quédate – me abrazó mientras me pedía que me quedará, no quería ser parte de un mal tercio, me gustaría pasar tiempo con ella pero no quiero incomodar y veo que su compañero estaba incomodo ante el abrazo.

Yo: Pero estas con tu amigo, mejor me voy – no me gustaría verla abrazada a él todo el tiempo, celos de amigo, él se ve algo mayor no me convence del todo.

Meredith: Dalas yo quiero que te quedes porfiiii – me hacía un mohín de niña pequeña que la hacía tan adorable, no le podía decir que no a ella y menos así.

Yo: Está bien, tú ganas – me rendí ante ella, es la segunda vez que me gana ya, y ella comenzó a dar pequeños saltitos en el lugar y aplaudía, como negarlo no importaba su edad era toda una niña.

Una Nueva Vida (Cancelada)Where stories live. Discover now