Sobrevivir O Sobre Vivir

Mil noches más

He sentido 
la presión en el pecho 
del que está a punto de embarcar 
en un viaje 
del que nadie sabe si volverá. 
Al menos, 
igual que se va.

He sentido 
eso que dicen que pasa 
cuando te caes. 
Dolor lo llaman. 
Yo le llamo libertad. 
Decisión de levantarte 
y caminar. 
Decisión de sentarte 
y esperar.

He sentido 
los puñales en la espada 
de aquellos que juraban estar 
y ya no están; 
de los que prometían 
más que hablaban 
y se han vuelto a ahogar 
en un cutre vaso de cristal.

He sentido la brisa 
que camina con prisa 
y borra sonrisas 
a la hora de despertar.

He sentido el viento,
el sol, 
la lluvia 
y la luna también.

Les he visto, 
les he cantado 
y les he pedido 
cinco minutitos más.

Al viento, 
que siga soplando 
y que se lleve mis miedos 
rapidito y susurrando. 
No quiero despertarlos.

Al sol, 
que no se vaya todavía, 
que hay mucha gente fría 
y la hay que calentar.

A la lluvia: 
empápame mucho 
y hazme notar 
que “un día con lluvia”, 
también puede ser especial.

A ti luna, 
que me has enseñado a brillar, 
que has sido mi maestra en la noche, 
no dejes nunca 
de hacerte notar.
 De darme luz 
y de hacerme soñar.
A ti Luna, 
quédate despierta. 
Déjame besarle 
mil noches más.