Los Frutos De Nuestro Amor - Sekaiichi Hatsukoi

21.- El comienzo del final (final)

Takano se encontraba sentado en la sala de espera del hospital, las cosas para él habían llegado tan lejos que estaba completamente forzado a tomar una decisión que seguramente marcaría las vidas de ambos para siempre, la cual consistía en hacer que Ritsu fuera tratado para salvar su vida, poniendo en un riesgo inminente a su hija la cual muy seguramente perderían en el proceso. Ya tenía un presentimiento de tener que tomar ésa decisión, y el tan siquiera pensarlo le quebrantaba el alma, ni siquiera quería imaginarse la reacción de Onodera una vez que despertara de su letargo.

Estaba tan abrumado y le era tan difícil poder contener ése sentimiento, pero aún así lo tenía prescrito, solamente esperaba a que la doctora volviera para indicarle su decisión antes de que fuera demasiado tarde tanto para Ritsu como para su hija, después de todo ya habían pasado 8 días y la condición su cuerpo pronto ya no daría para más.

De pronto se escucharon unos pasos muy estruendosos y frenéticos que se intensificaban a lo largo del corredor del hospital e incluso hacían eco en él, seguramente por el hecho de que no hubiera personas en el edificio o pasillos además de los doctores y de Masamune.

Entonces escucha una voz familia gritar su apellido con el honorífico y acostumbrado "san", más temprano que tarde se da cuenta de que se trata de Shouta quien llegó totalmente agitado al grado en el que ni siquiera pudiera respirar bien.

Takano: ¿¡Que es lo que haces aquí ahora?!

De nuevo el editor de estatura menor intenta recuperar el aliento, llena sus pulmones al máximo de aire para después soltar lo que quería decir:

Kisa: Hay alguien que tiene que hablar contigo Takano-san...

Detrás de él se asoma Serani, quien aún parecía estar atemorizada por la reacción que pudiera tomar el editor en jefe al verla, y su temor estaba completamente justificado.

Takano: ¡¿TU?! ¡¿Cómo demonios te atreves a mostrar tu cara en éste lugar?! ¡¿No te basta con todo lo que tú y ése imbécil han ocasionado?!

Kisa: ¡Takano-san tienes que--!

Takano: ¡No! ¡No lo haré! No entiendo como se te pudo ocurrir traerla a éste lugar Kisa.

Sera: Escucha, sé que ésto está muy mal, pero si tan sólo me permitieras--

Takano: ¡¡NO QUIERO SABER NADA!! ¡Lárgate de mi vista ahora mismo si no quieres que llame a la policia!

Kisa: ¡Ya basta Takano-san! ¡Por favor, ella también fue manipulada por ésa mala persona, y aunque sabía que lo que hacía no era nada bueno tenía que acceder por una vieja deuda!

Takano: ¡Son puras excusas--!

Kisa: ¡Takano-san! Tú serás mi jefe y todo, pero ahora mismo tienes que escuchar lo que digo.¡¡Y lo que digo es que TIENES que escucharla a ella por favor!!

El editor en jefe suspira profundamente, aunque su semblante no se tranquiliza en lo absoluto.

Takano: ¿Que es lo que quieres...?

Sera: A-Antes que nada... Me quiero disculpar contigo por todos los problemas que he ocasionado a tu pareja y a su hija, y sí, sé que lo que hice no tiene excusa, tan sólo quiero que sepas que ahora he descubierto la doble cara de mi primo y he decidido hacer lo correcto...

Takano: ...

Sera: Nuevamente... lo siento mucho, de verdad.

La chica hace una reverencia hacia Takano indicando sus más profundas y sinceras disculpas, pero éso no era suficiente para él.