CAPÍTULO 20 ✓

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Llegamos al centro alrededor de una hora con exactitud, y estoy encantada con cada lugar que miro pasar a través de la ventanilla de copiloto del auto de Zayn. O mejor dicho, su amada "Dyna". Todo a mi alrededor era hermoso; las calles, edificios, casas y tiendas, tenían un estilo muy clásico. Los automóviles y autobuses rojos de dos pisos se paseaban por la carretera con estilo y gracia. Era demasiado bello en éste país.

— ¡Wow! Esto es un sueño de cuidad. —dije con admiración y sonreí—

— Normalmente cuando vienes aquí, no dan ganas de irte nunca. He pensado en comprar un apartamento o una casa sencilla por estos lares. —sonrió—

— Es muy lindo aquí. —volteé para verlo— Oye, prométeme que me traerás a vivir para acá en cuanto consigas un lugar lindo donde vivir.

— Claro que si. —me miró por un corto segundo y sonrió. Luego volvió la vista a la carretera— Serás la primera en venir, eso lo aseguro.

Sonreí y suspiré emocionada, a lo que escuché la risa de Zayn por ese gesto mío.

— Y exactamente, ¿A qué lugares irémos?

Se encogió de hombros. — Aún no estoy seguro. Pero pienso primero en recorrer el centro, ir a algún cine si está abierto, comer algo, ir al parque, caminar un rato por las calles... —suspiró— quizás también ver tiendas de ropa, si quieres. —me miró y siguió conduciendo—

— Suena genial, me encanta la idea, pero deberías dejar el auto estacionado por aquí cerca, quiero caminar y estirar las piernas.

— Perfecto, mejor aún —sonrió—

Condujo unas calles más hasta llegar a una librería, dejó su auto estacionado un poco más adelante del local y luego bajamos. Miré el establecimiento, cuya fachada estaba hecha de piedras y con ventanales grandes de cristal transparente y perfectamente limpio. Este sitio me daba la impresión de estar en una película, específicamente, una de Harry Potter, pues la fachada de piedra le daba ese toque antaño y místico. Precioso, desde mi punto de vista.

— ¿Sabes una cosa?. —hablé mientras cerraba la puerta del auto tras de mi— Esta librería me hace recordar una película de Harry Potter. —reí—

— ¿Qué? —sonrió y yo asentí— Cariño, por si no lo sabias, Harry Potter es inglés, y esa es una de las razones por la cual la película tiene ese estilo, esa y muchas más, específicamente.

— ¿Inglés dices? —asintió— Yo estaba segura de que era Vikingo o... Escocés.

— Tu... la verdad es... —lo miré con inocencia y diversión— olvidalo, no tiene caso explicártelo. —hizo un gesto desdeñoso con su mano—

— Zayn, quiero entrar.

Le comenté mientras admirada el lugar con mis manos dentro de los bolsillos traseros de mi pantalón. Desde afuera por el ventanal pude notar algunas estanterías llenas de infinidades de libros. Me picaba la curiosidad por entrar y conseguir uno que me sea interesante. No sé porqué, pero el estar aquí, hace que mis sentidos de lectora dormida, se despierten y ansíen la necesidad de leer algo de literatura inglesa o cualquier tipo de novela o ciencia ficción.

— ¿Disculpa?

Ante su interrogante, volteé para mirar su cara, sabía que la curiosidad adornaba su rostro de forma dramática. Y tal como supuse, él me miraba con confusión por sobre su hombro, así que giró en dirección hacia mi y comenzó una corta caminata, puesto que él ya había empezado a caminar y yo aún estaba de pie mirando el lindo y acogedor lugar.

LA SIRVIENTA DE LOS GEMELOS STYLESWhere stories live. Discover now