Una Chica Diferente.

Capítulo 23.

Las festividades ya habían terminado y yo me sentía bastante feliz, bueno más bien alegre, ya que aun sentía que algo no estaba bien, en si era porque tenía aun el pendiente de que no sabía que era lo que iba a pasar con Erick y conmigo, tenías que hablar sobre nuestros problemas, ya que ambos discrepamos bastante el uno del otro, no sabía que pasaría, realmente ni si quiera sabía que quería yo, una parte de mi quería seguir con el, pero la otra parte sólo quería dejarlo todo y lo peor de todo era que no sabía a cual hacerle caso.

Erick me pidió que lo viera en la unidad deportiva donde los dos concurriamos seguido, yo le dije que ahí lo vería, aun que realmente estaba nerviosa de verlo también estaba algo emocionada, no sabía que pasaría pero yo sólo quería que me sorprenderá con algo lindo, per dudo que lo fuese a hacer, tenía un mal presentimiento sobre todo esto. En el camino para llegar a la unidad deportiva se encuentra la preparatoria, mientras caminaba me encontre un sueter de color morado y con un estanpado típico en el frente, colgado en una de las rejas de la entrada de la preparatoria, no se porque pero decidí tomarlo y llevarlo conmigo, no parecía estar sucio ni en mal estado, así que me lo lleve. Ya estando en la unidad, espere a Erick durante un tiempo hasta que el por fin llegó con su ropa deportiva como de costumbre, me dio un abraso y me preguntó que como estaba, yo le dije que bien, el me dijo que le alegraba y me pregunto que por que no llevaba puesta mi ropa deportiva, yo le dije que realmente no estaba de humor para correr y que en serio necesitaba que habláramos, el me dijo que si yo quería hablar pues que lo haríamos.

Nos sentamos en una banca que encontramos por ahí y comenzamos a platicar, yo le dije que necesitaba saber a donde iría todo esto, que iba a pasar con nosotros, le dije que sentía que nuestra relación no estaba bien del todo, realmente no sentía su cariño ni nada por el estilo, le dije que sentía que el me controlaba mucho, que me hacía hacer cosas que a mi no me gustaban, el me dijo que que cosas, yo le dije que a mi no me gustaba hacer ejercicio o al menos no de la forma en que el lo hacía, le dije que estaba cansada de eso, que lo único lindo que el había hecho por mi fue cuando me llevo a patinar, pero lo arruinó cuando mencionó lo de mi peso, yo le dije que si ese era el problema que lo dijera, el me dijo que el no lo llamaría como un problema, yo le dije que fuera completamente sincero conmigo y me dijera si el cambiaría algo en mi, el me dijo que si había algo que el quería cambiar, dijo que mi peso, yo le pregunté el por que, el me dijo que el quería que yo perdiera peso porque lo necesitaba para estar bien, que el me quería mucho pero que si yo lo quería a él lo haría, yo le dije que a pesar del cariño que le tenía no estaba dispuesta a hacer eso por el, ya que yo me quería tal y como era, que yo me aceptaba a mi misma porque no tenía ningún problema con mi físico, yo le dije que si el no podía aceptarme así entonces no podría seguir más con el.

Erick sólo se quedó callado por unos segundos pero casi de inmediato se acercó a mi y me dijo, "eres hermosa y una gran persona pero no puedo estar con alguien que no le importe su físico y mucho menos querer mejorar por mi, quiero que seas delgada porque en serio tienes mucho sobrepeso y necesitas bajar de peso, debes mostrar una buena imagen, una imagen de una chica perfecta con un chico perfecto, todo en ti es perfecto pero tú físico no lo es", yo sólo lo mire a los ojos y le dije "sigues siendo aquel niño del cual quería olvidarme por lo mal que me hizo sentir, no ha cambiado nada, sólo que esta vez no te daré el gusto de verme sufrir, no vales la pena, gracias por esos lindos momentos pero ya es todo, se acabo", después de eso sólo me fui de ahí, Erick solo me miró mientras me iba, pero cuando lo volte a ver bien sólo pude observar como se fue a correr como siempre lo hacía, sabía que todo había terminado, por fin entendí todo, el quería cambiarme pero yo no estaba dispuesta a hacerlo, para mi no valía la pena o al menos no la suficiente como para hacer eso por el.

Ya después de todo eso me fui a él parque que a mi me encantaba ir, me senté en una banca distinta a la que siempre me sentaba y me puse a pensar mientras miraba una pequeña cancha de fútbol donde podía ver a un chico trotando, sabía que todo había terminado, lo mío con Erick ya no seguiría más y la verdad es que no me sentía mal, de hecho me sentía más tranquila, sabía que eso no era nada bueno para mi y estaba feliz de saber que había terminado, ahora sólo me quedaba preguntarme que seguía, sólo sentía la cálida brisa algo fría que ahí se sentía, pero la disfruté ya que llevaba puesto el suéter que le encontré, sabía que era algo raro pero a pesar de eso lo llevaba puesto, ya no me importaba nada o al menos en ese momento no. Me sentía en paz y tranquilidad, sabía que después de todo estarían bien las cosas, seguí tranquila hasta que de pronto vi como el chico que estaba trotando se acercaba hacia donde yo me encontraba, al principio creí que sólo se dirigía a otra parte, pero no, realmente el estaba dirigiéndose conmigo, cuando por fin llegó me miró con una mirada algo curiosa y con una pequeña expresión de timidez me dijo:

-Eh... hola disculpa si te molestó pero sólo quería preguntarte si ese suéter que llevas puesto te lo encontraste. - Dijo el algo nervioso.

-Pues si de hecho si, ¿por qué la pregunta?. - Dije yo curiosa.

- Es que ese suéter es mío, lo perdí en mi preparatoria y como es mi favorito llevaba tiempo buscándolo. - Dijo el nervioso.

- ¡Oh ya veo! , perdona es que lo haye y... disculpame ten toma perdón. - Dije yo avergonzada.

- No te preocupes no pasa nada, si yo encontrará un suéter en buen estado también me lo quedaría. - Dijo el riendo un poco.

- Si creo que tienes razón, es algo normal supongo. - Dije yo mientras reía.

- Y a todo esto, ¿cómo te llamas?. - Pregunto el chico, a lo que yo respondí.

-Mi nombre es...