Una Chica Diferente.

Capítulo 3

No soy una persona a la cual le guste mucho hacer cosas que requieran hacer esfuerzo físico (claro esta), pero lo que si me gusta es salir, me encanta pasear por los parques y poder caminar en zonas donde hayan árboles, me encantan los árboles al igual que las flores y cual quier otra extensión de la naturaleza. Normalmente suelo salir todas las tarde, maso menos como entre 5 y 6 de la tarde, cuando el sol esta un poco más tranquilo y no me termina acalorando, en ese momento puedo disfrutar aún más el parque ya que a esa hora prácticamente no hay nadie, así que tengo el lugar para mi solita.

Casi siempre tengo una rutina cuando voy al parque, esta consiste en primero comprar un pastelillo en una tienda que se encuentra cercas del mismo, ya dentro del parque comienzo caminando por la larga cancha de fútbol, (cabe descartar que no lo hago esto por hacer ejercicio, si no solo porque me divierte hacerlo) después de caminar suelo correr de un lado para otro sin sentido y me detengo cuando ya no puedo más, cuando por fin retomó fuerzas para continuar me voy hacía un columpio el cual es muy grandey además resistente, solo utilizo ese columpio ya que es el único que puede soportarme con lo brusca que soy al columpiarme, claro también supongo que influye lo de mi peso y el hecho que los demás columpios estén diseñados sólo para gente delgada, y créanme que no bromeó con esto ya que por lo menos he roto 3 columpios de este mismo parque con sólo columpiarme un poco, si lo se, tal vez exagero pero el punto es que no me arriesgare a que me vuelva a suceder esto así que prefiero estar en mi columpio de gorda.

Cuando me estoy columpiando me gusta arquearme un poco y mirar así arriva donde están los hermosos árboles y el preciso cielo, porque así puedo sentir como si estuviera volando, me siento tan ligera y libre, en esos momentos me invade una inmensa paz y tranquilidad. A veces me dejo llevar de mas por calma que termino callendome del columpio y golpeandome contra el suelo, tengo que admitir que cuando pasa eso duele mucho pero siempre me rio para dicimular el dolor, eso siempre es algo efectivo; además de levantarme, sacudirme y continuar con lo que estaba haciendo como si nada hubiese pasado, si así es como soy yo, siempre despreocupada y positiva. Por último termino sentandome en una banca la cual siempre esta en un terrible estado, pero a mi eso no me importa ya que, al ser algo fea nadie se sienta ahí lo cual me hace sentir como la única que quiere a esa banca, por eso puedo decir con certeza que esa es mi banca y nadie me la puede quitar; continuando con lo que decia, me siento en mi banca y comienzo a comer mi pastelillo mientras observo todo a mi alrededor, para mi suerte la banca esta ubicada en un punto donde se puede observar absolutamente todo el parque en su esplendor, esto es algo fabuloso para mi ya que me encanta poder observar todo la hermosura de la naturaleza de este increíble parque, y así es como termina mi visita al parque, yo terminando de comer mi pastelillo y retirandome mientras gritó a los cuatro vientos: ¡Adiós parque, nos vemos mañana!.

Hay días donde simplemente me gana la flojera y prefiero quedarme en casa, sentada frente al computador viendo alguna serie o película mientras como alguna fritura o comida chatarra, puedo permanecer prácticamente toda la tarde encerrada en mi habitación disfrutando de mi ocio, aún que a veces me arto de sólo estar ahí sin hacer nada y me decido por salir a estirar las piernas, aún que también ni madre se encarga de sacarme cuando se percata de que sólo estoy de ociosa frente al computador, suele decirme cosas como: "Vamos hija, no sólo te quedes ahí sentada comiendo frente al computador, sal un momento a respirar aire fresco, recuerda nuestro trato, puedes conservar esa gran barriga si prometes no agrandarla más". - Yo siempre suelto una gran carcajada cuando termina de decir su comentario y le contestó algo como. - "Esta bien mamá, solo terminaré de ver este capítulo y saldré a tomar aire fresco, lo prometo". - A lo que ella responde frunciendo el ceño. - "Bien, pero que sea pronto". - Después de eso sólo se va y yo como buena hija que soy cumplo con mi promesa de salir a tomar aire fresco, no sin antes terminar de ver mi serie.

Cuando son días lluviosos por decisión propia, suelo quedarme en casa para no pescar un resfriado pero hay veces donde de todas formas salgo aún que este lleviendo, en días así suelo sólo caminar por el parque para poder pisar los charcos con mis botas color café, mientras traigo puesto mi gran sueter negro con un fantasma de estampado de color blanco que tanto me encanta. Continuo caminando por ahí pisando todo lo que este mojado, mientras tanto observó a mi al rededor y me percató que estoy completamente sola, lo cual me pone muy feliz ya que en ese momento puedo gritar, cantar, correr y bailar todo lo que yo quiera sin temor de que alguien me mire raro, aún que a pesar de que haya gente yo sigo haciendo lo mismo. Después de que hice todas esas cosas hasta el cansancio, me percató de que del cielo empieza a caer algo de nieve, es increíble que este pasando esto, en serio es algo muy bonito, yo sólo puedo empezar a dar vueltas y sonreír mientras la poca nueva cae sobre mi y me pongo a pensar, estas son de esas pequeñas cosas que solo vives un parde veces en la vida y por ello debes disfrutar porque no sabes cuando volverás a vivir algo igual; derrepente la nieve cesa y sólo noto que comienza a caer lluvia a más no poder. Yo sólo empiezo a correr para salir del parque para llegar pronto a mi casa, mientras me rio y pateo los charcos con felicidad; cuando por fin llegó a casa después de mi increíble tarde, mamá sólo me mira con una cara de horror al verme toda empepada y me dice: "Mírate nada más como quedaste de mojada, métete rápido a la casa antes de que te enfermes y quítate las botas antes de entrar". - Yo solo me ríoy hago lo que me dice, además de que lo hago con prisa y felicidad ya que me acaba de decir mi madre que esta preparando chocolate caliente, y créanme que eso me servirá mucho para quitarme el frío que ahora siento. Terminaré diciendo que este fue un gran día para mi.