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-Oye,tal vez no sea mi pareja pero yo la quiero, no como tu perro-escuche que dijo Zack.

Uu esto se va descontrolar.

-Basta, no me digas perro-contesto enojado Sean.

-Ya cállense, parecen niñas peleando así-comente y ellos se enojaron mas.

Sali de ahi, no me importa ni papas lo que pase ahi. Tendría mucho que caminar.

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Cuando por fin salí del ''purgatorio'' me encontré a casi todos los lobos de una manada peleando con vampiros. Ni como ayudarme.

Intente meterme otra vez a el lugar y sentí que me tocaban el hombro...

-Adonde vas preciosa?-voltee a ver quien era y...

-Fíjate que estaba pensando en irme a Nutellandia pero pues no se puede-sonreí falsamente. Sucios vampiros.

-Conmigo no juegas-dijo y tiro a Diego al suelo de pavimento. El solo se quejo.

-Carajo te digo que me voy a Nutellandia...¿Que no entiendes?-exclamo mientras saco mi navaja agilmente...¿porque me hacen enojar?

-Uy, te pusiste ruda-sonrió pervertidamente mientras caminaba hacia mi, automáticamente retrocedí y por casualidades del destino, me caí de espaldas.

Típica historia de terror donde no tienes salida.

Un gruñido se escucho frente a mi. El vampiro giro su cabeza y yo me asome a un lado de el, era Diego.

El gruño mas alto y luego se abalanzo sobre el vampiro matándolo por completo. Pero que fuerza.

-Diego-sonreí y fui corriendo hacia el para abrazarlo por el cuello, estaba tan suave su pelaje que parecía que no había tenido ningún rasguño.

Otro gruñido me hizo separarme de Diego...Ahora era Sean.

Se convirtió en su forma humana y se acerco a mi. Diego se puso frente a mi gruñendole.

-Basta Diego...lo conozco-susurre en su enorme oreja. El volvió a gruñir y se puso esta vez atrás de mi.

-Erika tenemos que estar en casa...yo...te necesito...créeme que yo nunca me acostaría con alguien que no fueras tu...solo lo dije porque estaba enojado de que te pusieras así...si realmente no te quisiera, te hubiera abandonado y no hubiera luchado por ti...¿acaso no me extrañas? porque yo si lo hago-no me digan que empezó a llorar? ouu carajo porque llora?

-Sean, no llores...tu tuviste la culpa, si no me hubieras dicho eso créeme que todo seria diferente...pero no hubiera conocido a Diego...así que por una parte te agradezco que hayas hecho todo ese espectáculo pero vamos...no llores por el amor a la nutella-me calle un momento-Pero...acepto ir contigo a vivir porque después de todo soy tu mate pero quiero que sepas que si haces otro jueguitos de esos me largo con todo y nutella...pero...-pause para darle suspenso a la situación-Diego va conmigo...porque aunque no lo creas, el casi muere por mi en todo el tiempo que estuvimos juntos ,me cuido y me dio mucho amor...incluso mas de lo que alguna vez me han dado, el lo es todo para mi, así que no te atrevas a hacerle algo porque te juro que te corto las bolas y hago que te las comas-sonreí ante mi propia amenaza y Sean asintió repetidamente pero tambien blanqueo los ojos al decir lo de Diego.

Todos regresamos a la casa de Sean, si hablo de todos porque los lobos guerreros regresaron con nosotros pero ellos se fueron a sus casas. Obvio.

Lo que me sorprendió fue que...nadie se había enterado de mi ''desaparición'' que mas bien fue una huida.

Los gemelos estaban sentados en los sofás frente a la television con las manos en su cara...los dos...misma posición...que miedo.

Cuando me voltearon a ver, abrieron los ojos como platos y Daniel fue corriendo hacia mi y me abrazo...¿que rayos ocurrió cuando yo no estaba? ¿les lavaron el cerebro o que?




Mi pequeña mateWhere stories live. Discover now