Capítulo 23.

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Ya con cuatro meses y medio de embarazo, JongDae no podía sentirse mas feliz. Desde el incidente con los padres de JongIn todo había a estar mas normal y las cosas solo mejoraban. No sabía por que pero eso le preocupaba al chico embarazado, que la situación fuera tan tranquila le hacía inquietarse un poco y no es que no disfrutara de ello, pero un sexto sentido le decía algo.

Estaba acosado sobre el sofá de su nueva casa mirando a la nada pero pensando en sus cosas. Era domingo y había estado jugando pero en un momento solo se paró en pensar su situación, las de su alrededor y en el futuro. Acarició su estómago con delicadeza y una sonrisa apareció en sus finos labios de gatito. Siempre le alegraba saber que su hijo crecía mas y mas.

Se levantó caminando por la gran casa para ir a coger un paquete de galletas de chocolate y mermelada de fresas. Ultimamente no dejaba de comer lo primero que pillaba pero es que podía comer y a los diez minutos pedir mas comida. Se sentó en el sofá y comenzó a mojar las galletas en la mermelada, extraño pero le gustaba.

JongIn y BaekHyun fueron a hacer la compra semanal. Al parecer los padres de JongIn no dejaron de meter cuenta en su dinero, algo de corazón tienen por su hijo. Las 17:30, eso marcaba la hora de su serie por lo que encendió la televisión y dejó que el tiempo pasara mirando la serie.

Al cuarto de hora se había escuchado el timbre de la puerta pensando que eran ellos de su regresa de la compra pero al abrir la puerta se sorprendió un poco al ver quien estaba allí y a la vez no supo bien que hacer. Pues de tanta tranquilidad las últimas semanas al final aparecieron quienes alterarla. Los padres de JongIn estaban allí de pié.

— O-Oh, muy buenas tardes—. JongDae se inclinó y tragó saliva.— ¿Desean a-algo?—.

— Hoy es el día de visita a JongIn—. Habló la madre.

— JongIn está haciendo la compra, no se cuando volverá—.

— Lo esperaremos dentro—. Volvió a decir y entraron haciendo a un lado a JongDae que no dijo nada pero estaba nervioso pues no sabía bien que hacer. Se mordió el labio inferior y suspiró. Caminó detrás de los padres que se sentaron en el sofá donde antes estaba JongDae. El chico recogió la comida de encima de la mesa.

— ¿Desean tomar algo? ¿Que les puedo ofrecer?—.

— Té verde, por favor, solo eso—. Murmuró el padre.

JongDae asintió y se giró con rapidez caminando hacia la cocina para prepara lo anteriormente mencionado por parte de los padres. Guardó la comida que antes estaba devorando y sacó lo necesario para hacer una tetera de té en una bandeja junto una tacitas. Intentó respirar para tranquilizar sus nervios, no sabía que decir.

Una vez todo terminado cogió la bandeja dirigiendose al gran salón y la posó sobre la mesa vertiendo sobre las tacitas el té, ofreciendoles esta. Los padres, sincronizados, tomaron aquellos vasos de porcelana sorbiendo un poco posteriormente dejandolas sobre la mesa. Quedaron minutos en silencio sin hablar.

Esto era demasiado incómodo para JongDae.

Vuelve ya, JongIn. Pensó JongDae.

— ¿Estudias con JongIn?—. Preguntó la madre sorprendiendo al chico.

— S-Si, estamos en algunas clases juntos pero el estudia baile y yo canto—.

— Chorradas—. Susurró el padre.

JongDae apretó sus puños un poco y miró hacia un lado.— No creo que hacer lo que te guste sea una chorrada, es lo que mas te apasiona—.

— Repito, chorradas—. Dio una mirada fuerte a JongDae el padre.

¡Aventura real!Where stories live. Discover now