Capítulo 10: Noche de películas

1.5K 20 7
                                    

Me desperté a la mañana siguiente y ya eran las 7:30. No veía a Alex, de nuevo. Espero que no se haya ido de nuevo.

Bajé a la cocina ya que me moría de hambre y ahí lo encontré, haciendo unos waffles.

Llegué por detrás y lo abrace.

-Tú si que eres multiusos. –le dije.

-Lo soy –me mostró esa hermosa sonrisa que me encanta- ¿Quieres? –me ofreció.

-¡Claro!

Me paso un plato y me senté en la mesa.

-¿Cómo vas con el dinero? –preguntó curioso.

-Muy bien –le dije alegre- De hecho, ya casi tengo la cantidad que quiero.

-Eso es genial. Pero… ¿para qué lo quieres?

-Quiero comprarme un departamento. Ser independiente. –le dije- A veces me estreso viviendo aquí.

-Entiendo –dijo sonriente- Yo tengo una noticia.

-¿Qué? –le pregunté contenta.

-Acabo de comprar un departamento en la playa, es hermoso.

-¿En serio? ¿Cuándo?

-Hace unos días –sonrió- Muero por que lo conozcas.

-Invítame cuando quieras.

-Apenas me estoy mudando. Si quieres cuando este todo listo vienes.

-Ni hablar, yo te ayudo a desempacar –le dije con una enorme sonrisa- ¿Vamos después de clases?

-También podemos hacerlo mañana, ya que comienza la semana santa.

-Ok, me parece perfecto. ¡Ya lo quiero ver! –agregué entusiasta.

Terminamos de comer subí a mi habitación para cambiarme. Busque en mi closet la ropa me quería poner ese día. Después de hoy empezarían unas vacaciones de dos semanas, eso era genial. Encontré lo que quería, una blusa negra y unos shorts negros, hacia demasiado calor entonces en el instituto no nos decían nada porque fuéramos así.

Justo cuando estaba a punto de quitarme la blusa con la que dormía entro Alex haciendo que me sobresaltara y por suerte no vio nada.

-¡Oh! Perdón. Pero puedes seguir por mí no hay problema. –dijo guiñándome un ojo.

Yo solo me dedique a mirarlo seria.

-Es mi habitación y se supone que tienes que tocar antes de entrar.

-Solo venia a buscar mi celular –me dijo sonriente.

Fue hasta la mesa de noche y lo tomo. Iba muy, muy despacio.

-¿Qué haces? Apresúrate.

-¿Segura que no quieres que me quede? –insistió lanzándome una mirada picara.

-¡No! –le grité.

-Pero si necesitas algo estaré aquí abajo.

-Ok.

Mientras me cambiaba recordé la pelea de anoche que después termino en besos. Espero que Alex no haya pensado mal, solo fueron besos, no paso de ahí. No quería que creyera que debido a lo que paso ayer ya podíamos hacer ese tipo de cosas porque la verdad no estaba lista para tener esos momentos con él. Solo llevamos unas semanas y no soy de ese tipo de chicas que al instante ya está encima de los hombres.

Tendría que aclarar las cosas con él.

Tome mi mochila y salí corriendo escaleras abajo, donde él me esperaba en la puerta.

That One ThingWhere stories live. Discover now