Bucky Barnes: Encuentros desastrosos.

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Parte 2/2


Me mantuve a distancia mientras Bucky corría por la carretera subterránea y luego mas tarde cuando los arrestaron a él, a Steve, a Falcon y  al misterioso hombre del traje negro que resulto ser el príncipe T'Challa. Me convencí de que no hubiera podido ayudarlos, me habrían arrestado también y no podía permitir que Tony supiera que había venido, así que me parecí en las instalaciones a donde los llevaron junto con Natasha, fingiendo que había llegado después.

Nos dijeron que estarían bajo arresto hasta que se aclararan las cosas pero algo era seguro; no liberarían a Bucky. Nat y yo vimos a los chicos desfilar frente a nosotros rumbo a sus celdas, guardias armados los escoltaban e iban esposados, Bucky iba al final, lo llevaban en una jaula de maxiglas, atado a la silla por las muñecas, los tobillos y el torso. Era un criminal peligroso, o eso pensaban todos pero yo no estaba tan convencida, me había salvado la vida.  Bucky llevaba agachado el rostro carente de toda expresión, cuando paso a mi lado levanto la vista un segundo y nuestros ojos se encontraron como un par de horas antes.

Cuando Tony llegó intenté ver si al menos podía negociar un poco a favor de Steve y los otros, aunque la democracia y la política no eran mucho lo mio. Estaba preguntándome si iba a empezar a golpearme la cabeza contra la mesa cuando de pronto hubo un alboroto de luces rojas y sirenas sonando por todos lados. 

El soldado del invierno había escapado

Como Tony no tenia su traje, dejaron salir a Steve para que detuviera a su amigo que estaba atacando a todos los que se le ponían enfrente, nuestras instrucciones eran evitar que lastimara a los civiles hasta que el Capitan pudiera inmovilizarlo pero la verdad no seria una tarea demasiado sencilla. Los poderes de Steve me habían abandonado así que yo volvía a tener la fuerza de un humano, mi única ventaja era que sabia pelear y disparar. 

Nat, Tony y yo fuimos hasta el primer piso que eran donde se encontraba Bucky, primero fue el turno de Stark pero no le fue demasiado bien, Nat lo intentó después y estaba perdiendo la batalla.

—¡Bucky! —lo llamé parándome a unos metros de él—. Ya basta. 

El pelinegro soltó a Nat que aprovechó para recuperar el aliento, por el contrario Bucky arremetió contra mi.

Él era claramente mucho mas fuerte que yo y su brazo metálico le daba una ventaja más, evité un par de golpes al tiempo que intentaba atinarle, pero un puñetazo en la mejilla me aturdió momentáneamente haciéndome ver puntos de colores por todos lados y supe que no iba a ganar, no al menos que igualara las posibilidades. En el siguiente golpe sujete su muñeca justo donde terminaba la manga de su camisa. 

Y nada paso.

Su mente era un caos, como chocarse con un muro. Algo bloqueandome y empujándome de vuelta.

Lancé una patada que Bucky atrapó al vuelo y me arrojó contra un escritorio, no supe si lo que crujió fue la madera o mis huesos. Traté de levantarme pero Bucky ya estaba ahí y me sujetó por el cuello poniéndome contra la pared, mis pies quedaron en el aire y el frió metal de su mano se aferró a mi garganta impidiéndome respirar. Intenté hacer que me soltara pero fue en vano. 

Sus ojos se habían oscurecido, estaban vacíos.

—Bucky... detente... por favor —jadeé.

Una bala se impactó contra su brazo humano haciendo que me soltara y corriera escaleras arriba. Nat se acercó a mi lado, yo estaba en el piso sujentandome el cuello y tratando de volver a respirar.

—No es él —le dije a la pelirroja—. Lo están controlando.

—¿A dónde vas? —preguntó Nat cuando me puse en pie.

—Tras él, quédate y dile a Steve lo que te dije —grité mientras corría hacia donde se había ido Bucky.



Repasé con la mirada a las personas frente a mi; Steve, Sam, Wanda, Barton y el Soldado del Invierno, todos enfundados en sus trajes y listos para pelear igual que los del lado donde me encontraba junto a Tony, Bucky me estaba mirando y una leve sonrisa bailaba en las comisuras de sus labios. 

Las palabras y las negociaciones habían fallado así que corrimos hacia nuestros amigos que ahora eran enemigos.

La batalla era bastante pareja todos eramos fuertes y tenia la sensación de que estábamos deteniéndonos mas que intentando lastimarnos de verdad. De pronto me vi atrapada en una pelea con Bucky y no pude evitar recordar que me había pateado el trasero antes, pero esta vez sus golpes eran defensivos, no ofensivos. En un extraño movimiento me derribó, se puso sobre mi y sujeto mis muñecas una a cada lado de mi cabeza. 

Sus ojos habían vuelto a ser los de antes.

—Tenemos que dejar de encontrarnos así —sonrió con su aliento acariciándome el rostro—. ¿Sin rencores por lo del otro día?

—Me ganaste limpiamente —acepté, mientras pensaba en como liberarme de su agarre. 

Ahora que su mente ya no estaba bajo control podía tomar su poder pero debía tocar su piel y la única parte expuesta era su rosto, no podía liberar las manos así que hice lo único que se me ocurrió. Levanté la cabeza y le planté un beso en los labios, Bucky se sorprendió pero luego de un segundo me devolvió el beso, cuando me separé me di cuenta de que la batalla se había detenido y todos nos miraban. 

Sonreí al sentir la fuerza extenderse por mi cuerpo como una corriente eléctrica, mi brazo izquierdo se volvió de un brillante metal ante la mirada confundida de Bucky, antes de que pudiera reaccionar me solté de su agarre y le di un golpe que lo hizo ir a parar un par de metros mas allá de donde estábamos, junto a Steve. Me puse en pie de un salto y flexione el brazo bionico.

—Wow... que chica —murmuró Bucky sujetandose la mandíbula con una mano.






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