Capítulo 6: Cambios.

1K 86 27
                                    

Su pasado siempre había un tema que prefería tener enterrado, tantos años de dedicación a un hombre que solo se aprovechaba de aquello, no era algo de que enorgullecerse, de hecho se avergonzaba por ello, y por esa sola razón había estado mejor enterrado. Pero las cosas habían cambiado, había perdido todo lo que más le importó una vez y no podía dejar que se le escapara de nuevo, aunque eso significara desenterrar aquellas cosas que juró olvidar.

No olvidarlo no por el tiempo en que lo amó, sino porque había sido una estúpida al amar a alguien que solo jugaba con ella...

Aunque esto último no estaba segura de mencionárselo a su esposo. Porque sabía que él haría ahora más preguntas que nunca, ahora que al fin había comenzado a responder sus dudas.

Por lo que al salir de la ducha, sonrió con confianza y no con miedo, ya había mostrado demasiado miedo suficiente para el resto de su vida.... Sin pensarlo mucho tomó lo primero que encontró en el closet, ya que no necesitaba impresionar a nadie, para luego sostener su cabello encima de su cabeza con una goma, y salir a buscar a sus pequeños.

Sabía por la hora que no estarían en su habitación, por lo que no perdió tiempo y fue directo al comedor a buscarlos, en donde los encontró con Grette terminando de desayunar.

— Y ahí está— le dijo la rubia sonriendo.

— ¡Mami! —gritaron ambos al verla antes de salir corriendo a abrazarla.

— ¿Dónde estabas? —preguntó Scarlett sin soltarla.

— Haciendo algo de ejercicio— le respondió vagamente antes de separarlos de ella—. ¿Qué tal el desayuno?, ¿hicieron algo bueno de comer? —desvió el tema antes de ambos tomarla de la mano y llevarla a la mesa.

— Estás mejor que la última vez que te vi— comentó la rubia mirándola con suma curiosidad.

— Esta es mi casa, le guste a tu hermano o no, no pretendo dejar que me saque de nuevo— respondió con confianza antes de servirse unas tostadas, tocino, y jugo de naranja—. ¿Dónde estabas ayer? — no pudo evitar preguntar con curiosidad.

— A salvo de tus discusiones con mi hermano— respondió con burla haciéndola reír—. Además si no mal recuerdas tengo mi propia familia— le recordó con una sonrisa burlona en su rostro—, no tengo tiempo para tus dramas...

— Solo quería agradecerte yo misma, por eso te buscaba— mencionó encogiéndose de hombros—. Aunque es una lástima que tu advertencia no llegara a tiempo...

— Lo sé, pero últimamente Mir no confía ni en mí, no desde...— soltó antes de callarse ella misma y sonreír, llamando la atención de la castaña.

— Sabes que si no vas decir algo mejor ni lo menciones, ¿desde cuándo? —soltó con curiosidad.

— Él llegó aquí sin problemas para decirle de ellos— respondió entre dientes con furia refiriéndose a los gemelos—. Matt estaba con Mir cuando lo enfrentó, y digamos que no fue una charla amistosa...

— ¿Pero porque no confía ni en ti? —preguntó analizando lo que había dicho.

— Seguimos siendo hermanos— respondió suspirando—. Aunque lo odie, Mir no cree en nadie, ya que alguien debió dejarlo entrar para que llegara hasta a la casa...

— ¿Lo ayudaste? —no pudo evitar preguntar.

— No— respondió sin titubear—. Por un tiempo le perdoné Aaly, pero luego de todo lo que ha hecho, de lo que te ha hecho, no pude seguir haciéndolo, además la forma en que vino a regodearse...—se detuvo con ganas de maldecir para luego ver a los gemelos, quienes escuchaban todo sin entender nada.

My Alfa. Book #1. Terminada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora