Tu sonrisa como el Sol ✧ j e a r m i n

∆ CAPÍTULO 19 ∆

Armin
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Me despido de Jean una última vez a través de la ventana del autobús con la mano.

Veo como se coloca los guantes que le regalé y comienza a caminar en dirección a su casa. Sonrío enternecido, me sentía feliz de que le gustara mi regalo y que además lo usara.

Suspiré cansado ya que hoy había tenido un largo día de clases y tenía que estudiar para mañana.

Me coloco mis audífonos y pongo a sonar música para relajarme un poco durante el viaje. Comenzó a sonar "Do you Feel Alive?" Una canción que me gustaba bastante y comencé a tararearla mientras me distraía con el paisaje de mi ventana.

Pasaron los minutos y antes de que me diera cuenta ya había llegado a mi parada. Pagué al recolector y me bajé del bus, ya había anochecido un poco así que aceleré el paso hasta mi casa.

Caminaba mientras cantaba en voz baja la música que sonaba, las farolas de la calle comenzaban a encenderse ya que la noche estaba casi presente. Eso significaba mucho más frío, así que metí mis manos en los bolsillos de mi suéter para tratar de calentarme un poco.

La calle estaba inusualmente sola, lo que me daba algo de miedo. Y más aún sabiendo mi situación.

Sentí una presencia, voltee rápidamente a los lados y no pude encontrar nada. Me está siguiendo, lo sé, aunque no pueda verlo en el fondo lo sé.

Apresuro el paso hacia mi casa que no se encontraba tan lejos, aunque me pregunto si servirá de algo. Si de verdad me está siguiendo, creo que cualquier persona tiene mejores cualidades físicas y deportivas que yo, por lo que, corra lo que corra supongo que será fácil alcanzarme.

Respiro profundo para tratar de calmarme un poco, miro al frente y mi casa ya se encontraba allí. No faltaba mucho, sólo debía llegar hasta ahí y ya.

También está la posibilidad de que sea una paranoia mía y nadie me esté siguiendo en realidad...

Armin te estás volviendo loco... - Pensé para mi mismo.

El frío me envolvía completamente haciendo que temblara un poco, pero mi cálido hogar ya se encontraba frente a mí.

Ya estando frente de la puerta noto que piso algo. Bajo la mirada y me encuentro con un sobre bastante conocido para mí.

Miro hacia atrás, hacia los lados pero no veo a nada ni a nadie.

Me agacho y lo tomo, con algo de miedo. Con temor por leer lo que esta vez se encuentra escrito.

Abro con cuidado el sobre y saco el papel que contiene dentro. Vacilo un poco pero termino por leer lo que decía en el pequeño papel.

Un mensaje corto pero letal.

Detrás de ti~

Lo sabía, después de todo no era una paranoia. Suelto el papel rápidamente, mis manos y mi cuerpo entero estaban temblando.

Ni loco me atrevería a mirar atrás, si lo hacía era mi fin. De verdad no soy tan tonto como para caer en eso.

Estiro mi mano hacia la puerta, asegurado a abrirla. Pero una gran mano cubre mi boca y la otra se posa en mi cintura, apegandome a un cuerpo masculino más alto y fornido que el mío.