Capítulo 17

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El día de la graduación:

-¡Anne, es tarde! Despierta por favor. -Dijo mi mamá mientras tocaba fuertemente mi puerta.

-Dame 5 minutos por favor. Necesito seguir durmiendo. -entró en mi cuarto

-Lo siento mi amor, tienes que levantarte. Debemos llegar temprano a la facultad.

-¡Mamá! ¡La graduación es hasta la tarde! -me levanté de la cama.

-Si pero tienes que arreglarte muy bien. ¿Ya tienes tu vestido?

-Si, es el rojo que está allá. -le dije señalando mi closet.

-Es muy bonito, perfecto para la ocasión.

-¿Cuál ocasión? Solo es una graduación, y ni siquiera mía, de mi hermano.

-Así es, pero tienes que ir más guapa que nunca, tal vez te lleves una sorpresa. Métete a bañar. Te espero abajo en 20 minutos, iremos a un lugar a que te pongan muy bonita. -no me dejó decir nada y salió de mi cuarto.

Entré a bañarme, no entendía por qué tanta insistencia en arreglarme, usualmente me decía que lo hiciera cuando teníamos algún evento o fiesta pero no a tal grado de casi obligarme a hacerlo.

Bajé después de bañarme, aún tenía mucho sueño.

-Ya estoy aquí. ¿A dónde vamos? -le pregunté a mi mamá.

-Iremos al salón de belleza.

-¿Por qué mejor no te llevas a Pedro? Él es el de la graduación, además creo que lo necesita más que yo. -le dije riendo.

-Muy graciosa. Sube al auto y vámonos.

Hice lo que me indicó. Llegamos al lugar, era bonito. En la entrada había una recepcionista. Mi mamá habló con ella y nos permitió pasar. Estuvimos un muy largo tiempo ahí. Me arreglaron todo, cabello, uñas, maquillaje. Ya estaba un poco estresada cuando la mujer por fin dijo que había terminado. Otra mujer había arreglado a mi mamá y se veía súper guapa. Me levanté de donde me encontraba y fui a mirarme en el espejo. No me reconocía, lucía tan diferente, cabello más corto, ojos bien delineados y con pestañas largas, hasta me veía más delgada de la cara. Me gustaba cómo me veía, me gustaba mucho.

-Te ves hermosa Anne. -me dijo mi mamá.  -Le va a encantar.

-¿A quién le va a encantar? -le pregunté. Noté que se puso algo nerviosa.

-A todo el mundo. A Pedro, a tú papá, a Dylan, ya sabes, a todos.

-Lo dijiste cómo si te refirieras a una persona en especial.

-No, para nada. Vamos a casa a cambiarnos. Se nos va a hacer tarde.

Subimos al auto y fuimos de vuelta a casa. Mi papá ya estaba en la sala cuando llegamos, usaba un traje azul que lo hacía ver muy guapo. 

-Que hermosas las dos. -nos dijo. -Vayan a cambiarse porque Pedro está a punto de bajar y ya saben cómo se pone cuando se le hace tarde.

Subí y me puse el vestido rojo con unas zapatillas en color negro. Me ví en el espejo y pensé que definitivamente era otra persona. Tal vez esa era la señal de que empezaría otra etapa de mi vida, con Erick fuera de ella por completo y con Dylan a mi lado. Seguía mirándome en el espejo cuando Pedro entró.

-Apúraté por fav... -Se detuvo a media frase. -Wow, te ves muy guapa.

-Tu también te ves muy guapo hermanito. -Llevaba puesto un traje negro, se veía muy bien. 

-Me has dejado sorprendido. ¿Segura que eres tu Anne? -nos empezamos a reír. 

-Te voy a extrañar mucho ahora que te vayas.

-Yo también lo voy a hacer. Pero no tienes por qué preocuparte, nos veremos aquí en la casa y saldremos a muchos lugares, no es como que me vaya a ir para siempre.

-Tienes razón, pero me va a costar acostumbrarme a ya no verte en la escuela. -Me abrazó, después de un largo rato me soltó.

-Vamos ya que se nos hace tarde.

Fuimos a la facultad en el auto de mi papá, el evento se iba a realizar en el auditorio. Entramos, ya había mucha gente y pude ver a Dylan todos ellos.  Decidí que sería un buen momento para hablar, así que me dirigí hacia donde se encontraba.

Estaba a punto de llegar cuando empezó a sonar mi celular, era Karen, la persona que estaba en la biblioteca en el turno de la mañana. En un principio iba a la biblioteca por castigo, pero el lugar me recordaba tanto a Erick que preferí seguir haciendolo durante todo este tiempo, no dejé que me asiganaran a un nuevo compañero para ayudarme con los libros porque sentía que el lugar le pertenecía a Erick, no sabía por qué pero tenía la esperanza de que volvería algún día. El celular seguía sonando y contesté.

-¿Karen?

-Anne, se que debes estar en la graduación de tu hermano pero necesito que vengas a la biblioteca porque surgió un problema con un libro. Hoy tengo que entregar todo completo y no lo encuentro por ningún lado.

-Creí que ya no había ningún problema con mi área.

-Eso parecía pero nos dimos cuenta de último minuto.

-Estaré allá en 5 minutos.

-Gracias.

Perdí de vista a Dylan así que volví con mi familia.

-Tengo que ir a la biblioteca porque surgió un problema. -les dije.

-Esta bien, no tardes. -me dijo mi mamá.

Caminé a la biblioteca, en la entrada estaba Roberto, el encargado.

-Hola. Karen me dijo que tenía un problema con un libro. -le dije.

-Si, pasa, te está esperando en tu área.

-Gracias.

Entré al área de medicina, todo estaba muy callado y no encontré a Karen por ningún lado. Solo ví que había algunos libros en uno de los carritos, seguro ella los había desacomodado mientras buscaba, probablemente aún no lo encontraba. Como de costumbre empujé el carrito a los estantes y los puse en su lugar. Estaba acomodando el último libro cuando sentí que alguien se paró detrás de mi, me tapó los ojos y me dijo:

-Te ves mas guapa que nunca.

Ese perfume, la forma de hablar, hasta la forma de sus manos, era sin duda alguna...

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Oh por dios!! Quién es??

Un capítulo más. Espero les guste.

Muchas gracias por leer.

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Los quiero!!

All the love. Xx

Por Toda La Eternidad - Erick IbarraWhere stories live. Discover now