Arkadia (AU) -Español [Clexa]

Capítulo 77

CLARKE

Ya hacía casi dos meses desde que Lexa desapareció de su vida. Aceptó el trabajo en otra ciudad que le habían ofrecido, no la culpaba, después de la despedida que habían tenido...era normal que quisiera desaparecer. Es lo mismo que ella había hecho en otras ocasiones. La diferencia, la gran diferencia más bien, era que Lexa tenía todos los motivos del mundo para salir de su vida sin mirar atrás.

Todos le insistían en que fuera a por ella, que la buscase y la trajese de vuelta, pero ella era consciente de que antes debía arreglarse a ella misma. Debía recomponer todos los pedazos rotos. Volver a trazar su vida y volver a recuperar su confianza. No quería arrastrar a Lexa a su oscura vida. Además, estando en ese estado, si Lexa le dijese que no de primer momento, sabía que no iba a luchar y se vendría con el rabo entre las piernas, aceptando plenamente su decisión. Y estaba claro que eso no es lo que ella quería, ella quería luchar por Lexa, luchar por recuperarla y traerla de vuelta a su vida. Había sido una gran estúpida dejándola ir, dejando escapar al amor de su vida.

Quería hacer las cosas bien. Se estaba tomando su tiempo en recuperarse del todo, en afianzar de nuevo su camino, pero es que realmente había conocido a la peor versión de ella misma meses atrás y quería enterrarla por completo, que no quedase ni un resquicio de esa Clarke.

-Lo siento, lo siento, lo siento. –Dijo entrando corriendo a la cafetería de Lincoln.

-Llegas tarde otra vez. –Se quejó su amigo.

Sí, al final había aceptado trabajar en la cafetería, estaba de más volver al Arkadia. Lincoln la aceptó con la condición de que fuera su socia, y finalmente el chico se salió con la suya, y aunque parte de sus ahorros se le habían ido por el tiempo que había estado sin trabajar, llegó a un acuerdo con su amigo en cuanto al tema dinero-socios.
La única excusa que puso Clarke fue la de cambiar el nombre a la cafetería, su amigo había mantenido el nombre antiguo y no le gustaba nada, el nuevo cartel dio paso al nombre que había elegido: Polis.

-Ufff. Lo sé. De verdad que lo siento. –Decía entrando en la barra.

-Límpiate anda. –Dijo su amigo señalándole la cara. –Tienes pintura. Deberías dejar de trasnochar haciendo ese trabajazo, yo puedo ayudarte por las tardes.

-Me gusta y me distrae. –Decía Clarke limpiándose el manchurrón de la cara mientras se observaba en uno de los cristales.

Pasaba las noches y sus turnos libres en la casa que habían comprado ella y Lexa. Pintaba o retocaba algo, incluso a veces se le hacía de día montando algún mueble.
No le importaba. Se había dado cuenta de que era algo que le relajaba por completo, que la distraía. Le ayudaba a pensar y sobrellevar los días con calma.

La sorpresa de que Lexa no iba a seguir pagando la casa no le hizo desistir cuando Raven le informó, ya que con ella no había vuelto a hablar. Raven más que nunca se había convertido en una gran amiga. Le había ayudado siempre que la había llamado, incluso alguna que otra noche tuvo que salir a su encuentro para quitarle la idea de ir a por Lexa aún sin estar recuperada del todo.

Se refugiaba en esa casa. Sus gastos se habían centrado casi exclusivamente en dejar la casa perfecta. Y aunque posiblemente ahora estuviera más justa de dinero, no le importaba, nunca le había dado importancia a eso. Cada domingo iba sola al IKEA, cargaba el coche de su madre y durante la semana tenía en que entretenerse. La salita y el comedor estaban prácticamente terminados, solo le quedaba la decoración. Ahora estaba con el baño de abajo, pequeño pero matón decía, ya que se le estaba resistiendo un pequeño mueblecito.

-Buenos días cielo. –Le dijo su madre desde el otro lado de la barra sentándose en un taburete.

-Buenos días. –Le sonrió ella. -¿Lo de siempre?