Almas Gemelas (A.G #1)

Capítulo 27 (Editado)

MICHELLE

- ¿Y bien? - pregunta de mala manera a mi amiga. - ¿Ya saldrás de tu habitación?

- No, traidora. - ella suspira y se sienta en la silla a mi lado.

- Señorita, no es correcto.

- ¿Y que es correcto? - tomo una pausa. - ¿Dejarme con un monstruo?

- El amo no es un monstruo.

- ¡Mato a dos hombres inocentes!

- Esos hombres eran de todo menos inocentes. - responde. - Uno de ellos trato de violar a Martha.

- ¿La cocinera? - pregunta asombrada.

Ella asiente cabizbaja.

- El otro mato a uno de las jóvenes del servicio. - ahogo un jadeo de sorpresa y ella solo se mantiene en silencio.

Oh, dios.

- No saldré. - es todo lo que digo. - Moriré de hambre.

- Haz lo que quieras. - sale de mi habitación y grito hastiada.

- ¡GRITA EN SILENCIO, MALDITA LOCA! - escucho el grito de Drake e inocentemente rio.

- ¿TU NO ESCUCHAS POR EL ANO?

- ¡ME ACABO DELEVANTAR! - grita de vuelta y escucho sus carcajadas detrás de mi puerta.

Tocan mi puerta y le abro, con una expresión aburrida.

- Te hice reír. - es todo lo que dice.

Comienzo a carcajear y él sonríe apenadamente.

- ¿Así que soy un monstruo? - una tercera voz se hace presente a nuestro lado y me tenso.

- Loyd. - hablo entre dientes.

- He escuchado tu interesante conversación con Jezabel. - me mira molesto.

- No tienes derecho a escuchar conversaciones ajenas.

- Puedo escucharte de lejos. - sonríe con frialdad. - Me retiro.

Palmea el hombro de Drake y continúa caminando por el largo pasillo.

Miro a Drake expectante y él se encoje de hombros.

- Lo siento. - se disculpa en un murmuro.

- No te escuche. - miento con seriedad.

- Michelle... - advierte y luego resopla. - ¡Que lo siento!

Le abrazo divertida y le beso la mejilla.

- No importa, idiota.

(..)

LOYD

Mira hacia afuera con calma, el bosque está tranquilo y sereno y la luna está en su peor fase.

La luna llena.

- No tendremos problemas con ella. - hablo Drake desde la puerta de mi aposento. - No escapara, no por ahora.

- Lo sé, Drake.

- Hay algo más. - Drake camina hacia una silla a mi lado y se sienta sonriente. - Así que besaste a Michelle.

Resoplo frustrado.

- Al parecer, todos lo saben en este lugar.

- ¡Era de esperarse, viejo! - aplaude mi amigo. - Después de lo de Milo Y Ciara, la tercera es la vencida.