Entré junto con mi maleta a la recepción del hotel, en el gran mostrador de madera estaba sentada en una silla una señora ya adulta, como de unos treinta o cuarenta años. Era más que obvio que ella era de aquí, pues sus rasgos eran más asiáticos que nada, ojos rasgados, cabello negro lacio, ojos castaños y piel blanca como porcelana.
La amable señora sonrió, y mientras me miraba dijo:
—良い夜の若い、あなたが何かが必要である?ます通知を我々が利用可能な部屋数。たい本部屋?または既にには、予約した。
Dijo, era más que obvio que yo no sabía nada del idioma, me acerqué a ella, y con el celular en mis manos tecleé.
"Buenas noches tenga usted señora, no es por ser un maleducado o algo así, pero yo no tengo ni el mas mínimo conocimiento en el idioma, le ruego que me disculpe, y si lo que usted me dijo es que si tenía reservación pues si, si cuento con una habitación reservada al nombre de "Jair". "
Una vez escrito aquello activé el audio traducido, y al finalizar la amable señora se giró para revisar la computadora a su lado, y a los pocos segundos se giró en torno mío y con una mezcla de japonés y español dijo.
—Oh si el señolito Yairu, glacias pol elegil el glan Hotel Aishi pala su leselbacion, arigato gadaimasu.
Cuando la mujer dejó de hablar sólo chasqueó los dedos, y un amable botones tomó mi equipaje, y sin decir nada me dirigió al ascensor, subí junto a él y me dejó el equipaje en la puerta de mi habitación, luego de eso me miró e hizo una leve reverencia, para luego marcharse por las escaleras.
(...)
Di un leve suspiro, y con la llave que me habían dado en recepción abrí la puerta de mi habitación, entrando junto a mi equipaje, por ahora sólo quería dormir del viaje y relajarme, mañana me instalaría en el cuarto, después de todo, yo había reservado la habitación por 15 días y 15 noches.
Al entrar y ver todo en orden me lancé sobre la cama, dejando a un lado mis maletas, y cuando menos lo pensé caí en las garras de Morfeo, en un largo y profundo sueño que duraría toda la noche.
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Recién llegado, recién secuestrado y próximamente torturado.
RandomJair, un joven de apenas 18 años, decide emprender un emocionante viaje al país del sol naciente, pero el destino no estará a su favor y el chico caerá en las garras de la mafia japonesa, vendiéndole al mayor postor. y por si fuera poco, su nuevo du...