TESIS 〈GREENxLectoraxRED〉+xBLUE

◦Diez:Ruta 1◦

—Muy bien. Quietecita.—Ya te habías resignado. Ibas a morir. Ya no había nada que hacer. Habías rechazado a Green por lo que seguramente te había abandonado a tu suerte porque estaba molesto. No le culpabas de que te fuesen a matar en ese momento, dudabas mucho de que él fuese a saber que te iban a matar. Lloraste mientras cerrabas los ojos, con miedo. Te habías rendido ante todo.—Eso es, ahora...—Quitó el seguro de la pistola.

—¡¡No!!—gritó Green. Abriste los ojos viendo como empujaba a Ciprés hacia un lado evitando que te disparase. Él cayó al suelo pero no tardó en apuntarle. Green se quedó estático en el sitio hasta que se tiró al suelo esquivando la bala que iba hacia su cabeza. Se tiró encima de Ciprés. Ambos agarraban la pistola, luchando por donde apuntaría esta.

Una gran cantidad de sangre estalló en la cara de Green.

—G... Gre...—No te salían las palabras. La expresión del chico te aterrorizaba pero la de Ciprés también. Se miraban con sorpresa. La bala había alcanzado a alguien, ¿pero a cual de los dos? Entonces lo viste caer al suelo. Casi entraste en pánico. El que quedaba de pie se acercó al que estaba tendido en el suelo, sangrando. No querías creerlo.

—Está muerto—susurró—, está muerto, ¿no querías ver a un muerto? ¿no querías saber si había visto un muerto? ¿Eh? ¡Eh! ¡¿No querías saber si había visto a un muerto?!—gritaba Green a punto de perder la cordura. Sus ojos no mostraban brillo alguno. Pateaba al cadáver de Ciprés con una expresión insana y de forma violenta.

—¡Para! ¡Green...!—gritaste comenzando a llorar con fuerza. Se detuvo con una respiración realmente agitada y nerviosa. Se giró hacia la cámara, pateándola con fuerza.

—¡¡Joder!!

•○•

—Todo fue por culpa de él—susurraba Green. Estaba sentado en el sillón encogido sobre sí mismo. Llevaba un rato hablando solo pareciendo un jodido enfermo. El brillo de sus ojos había desaparecido, ahora estaban vacíos, como si se hubiese esfumado su cordura—, yo no lo he matado. Yo no lo he matado, ¿lo entiendes?—mientras decía cosas tu estabas a su lado tumbada, sin tocarle. Llorabas sin cesar. Aquello había sido horrible. El sonido de la televisión estaba de fondo.

—¿Qué vamos a hacer ahora?—preguntaste con voz rota—¿Qué vamos a hacer Green?

—Cerrar el pico para empezar—contestó de forma dura y cortante—, tenemos que dejar de vernos. Yo me quedaré con las cintas de última edición. Y que venga ese cabrón si tiene cojones.

—¿Y si no es él?—sabías que hablaba de Red. Tú seguías con la posibilidad de que no fuese Red. Allí habían dos cámaras, y faltaba una, ¿y si Ciprés había traído su propia cámara? no lo habíais comprobado.

—Márchate, quiero estar solo.