Cap. 3

31 4 1
                                    

La tarde pasa volando, entre risas, preguntas sobre mi vida, juegos... ahora mismo estamos en un parque jugando a Yo nunca, ahora habla Natalia.

-Muy bien, yo nunca... me he sentido atraída por alguien de este grupo.

Cristian, Andrés y Sofía beben de su cerveza y yo me quedo sin saber que hacer...

-Pero... atraída en que sentido, quiero decir...

-Físicamente o... sentimentalmente, no sé.

Cojo mi botella de cerveza y le doy un trago, Cristian y Andrés se me quedan mirando y yo para disimular digo:

-¿Que? A lo mejor soy lesbiana y no os lo he dicho así que tranquilizaos.

Todos sueltan una risa y el siguiente turno de hablar le toca a Andrés.

-Muy bien, yo nunca... me he sentido atraído por una chica.

Hijo de...

Cristian y Andrés beben de su cerveza y Andrés se me queda mirando.

-Con que lesbiana eh...

-Tampoco te lo creas tanto- le lanzo una mirada asesina y es el turno de Sofía.

-A ver, yo nunca... he dormido con nadie que no sea de mi familia.

Todos excepto yo beben de su cerveza y cuando se dan cuenta Natalia me pregunta:

-¿Nunca has dormido con nadie que no sea de tu familia?

Eh... ¿Que digo?

¡Cualquier cosa!

-Digamos que... tengo mis razones.

Por suerte no le dan mucha importancia y siguen con el juego, el siguiente turno de pregunta le toca a Carol pero yo ya no presto atención. Recuerdos vienen a mi mente y empiezo a sentirme mal, lo mejor será que me vaya a casa. Cojo el móvil y hago ver que escribo.

- Me tengo que ir...

-¿Tan temprano?

-Es que... mi madre me ha enviado un mensaje de que vaya ahora.

Creo que Cristian ha visto que no he recibido ningún mensaje y sabe que me lo estoy inventando porque me mira bastante confundido, molesto... no sé.

Rezo para que no le diga nada a nadie mientras me despido y empiezo a andar cuando de repente oigo su voz.

-Espera, yo también ya me voy, si quieres te acompaño.

Es pesado este...

-No, gracias, no hace falta.

Vuelvo a girarme y me pongo en dirección a mi casa, llevo pocos pasos cuando Cristian se para a mi lado.

-No hace falta en serio.

-Oye, a los otros los has engañado pero a mí no, no has recibido ningún mensaje.

-¿Tan pendiente estabas de mí que te has dado cuenta?

Y este es el momento en el que te pones a la defensiva

Es el único modo

-Si

Genial, lo que me faltaba, que me venga este ahora con tonterías, a lo mejor estoy siendo un poco cruel pero... no puede ser de otra forma.

-Pues no tienes porque perder el tiempo en mí.

-No lo hago.

Ya me estoy hartando... me paro delante suyo y le corto el paso.

Podrías destruirmeWhere stories live. Discover now