Henry toma mis brazos y comienzan a sollozar.
- ¡No me dejes, mi amor! – grito con todas mis fuerzas. – ¡No me abandones, por favor!
Henry me arrastra hasta su auto.
- Vamos, tenemos que seguirlos.
Me giro hacia él y observo su pie.
El dirige su mirada hacia donde estoy mirando y se encoge de hombros.
- No duele mucho, vamos. – Henry enciende el auto y arranca.
- Tengo miedo de perderla. – sollozo mientras seguimos la ambulancia.
-Ella estará bien, Daniel.
- Eso no lo sabes, y yo tampoco.
(..)
MICHELLE
- Es una sorpresa tenerte a mi lado, semi-desnudo. – hablo sin pensarlo.
Nicholas ríe divertido y me abraza en el sofá.
Moira se fue hace como tres horas y estaba aburrida, Nicholas me llamo preguntando como estaba y que aún seguía en Richmond.
Una cosa llevo a la otra y aquí estamos viendo películas en mi pequeña sala mientras nos robamos besos.
Una parte de mí, quería olvidar todo por un segundo y pasarla bien con él.
Yo estoy con una camisa holgada y solo unas bragas y el solo esta con un pantalón chándal y sin camisa, ya que yo la estoy usando.
No, no hemos tenido sexo.
El solo me la quiso dar y yo la acepte.
Nicholas se acerca a mí y me besa tiernamente, cuando sus manos se quieren colar debajo de mi camisa, mi móvil suena.
- Tengo que responder. – anuncio y el bufa, dejando de besarme.
Mierda, ¿Quién llamaría a las doce de la noche?
Miro el contacto y frunzo el ceño.
Es el tío Henry, el mejor amigo de mi padre.
- ¿Hola?
- Michí, gracias a dios. – su voz se escucha agitada y frunzo el ceño aún más.
- ¿Qué pasa, Henry? – escucho demasiadas voces en el otro lado y miro a Nicholas, saliendo de la sala. – ¿Hola?
- Michelle, es tu madre.
- ¿Qué ha pasado?
- Estamos en el hospital. – hace una pausa. – Ella está luchando por su vida.
Y cuelgo la llamada, corriendo a mi habitación y cambiándome de ropa.
Llego a la sala echa un manojo de nervios y Nicholas me mira preocupado.
- ¿Qué ha pasado? – no respondo.
- Me tengo que ir. – tomo las llaves de mi auto y Nicholas me detiene. – ¡Sal del medio!
- Tranquila, ¿Qué paso?
- Es mi mama, está en el puto hospital y tú no te quieres mover. – respondo tomando mi cabello en mis manos.
- Ven, yo iré contigo. – busca su camisa y después de unos minutos, ambos estacionamos en el Hospital y corremos hasta la recepcionista.
- ¿Moira Rivaldo? – pregunta Nicholas tranquilo.
La recepcionista le mira de manera coqueta, a lo que ruedo los ojos.
- ¡Mi madre! – chillo. – ¿Dónde está Moira Rivaldo?
- No me grites, niña.
- Esta niña tiene más tetas que tú. – ignoro los gritos de Nicholas y la recepcionista y corro hacia emergencia, encontrándome con mi padre.
- ¡Papa!
Mi padre me abraza y comienza a llorar en mi hombro, las lágrimas comienzan a salir sin permiso y me uno a él.
- Es mi culpa, yo le dije que se fuera de mi apartamento. – sollozo.
- No, mi niña. – escucho a mi padre. – No es tu culpa.
Escucho a Nicholas llegar a nuestro lado y suspirar.
Mi padre se tensa y se separa rápidamente.
- ¿Qué hace el aquí?
- Papa.
- Papa, nada. – responde con molestia. – Lárgate.
- Por favor, papa.
- ¿Estas sordo? – mi padre se acerca a Nicholas de manera amenazante y le empuja. – Dije que te vayas de aquí.
- No me iré, a mí me importa Michelle y estaré aquí pase lo que pase.
Mi padre gruñe y se aleja, caminando hacia Henry quien ahora tiene una pequeña bota en su pie izquierdo.
- Nick. – me abraza con fuerza y sollozo. – solo pido que Moira no se vaya.
Lloro con más fuerza y su agarre se intensifica.
- Que no nos abandone, ella no.
YOU ARE READING
Almas Gemelas (A.G #1)
FantasyUna profecía que involucra a dos personas. Una humana con un pasado atemorizante. Ella es la reencarnación de su antepasado. Su mundo cambia drásticamente y los mas cercanos a ella, desaparecen. Aquel hombre que nunca dejo de amarla aun cuando e...
Capítulo 14 (Editado)
Start from the beginning